Estamos listos para ser padres? [EraserMic]

Dia 30

El año nuevo llegó y las vacaciones estaban en su final, Aizawa y Mic habían pasado unas fiestas increíbles en compañía de los alumnos de la academia, todo fue dentro de un entorno sano y responsable pues debían seguir reglas establecidas.

Shouta estaba en la sala común con su hija, ella gateaba en un tapete que también tenía juguetes.

—ven Nat, mira un gatito— el le hablaba para que gateara más, la pequeña rió al ver el peluche y se acercó para tomarlo, le mordió la orejita.

—no hagas eso mi princesa, ven con papá— la bebé se acercó a el de nuevo y Aizawa la cargó para besar su mejilla con amor, adoraba dedicar tiempo a su hija y sabía que debía educarla arduamente para que ella fuera feliz. Se tomaba muy en serio la labor de ser un padre pero siempre terminaba siendo cariñoso para no seguir el patrón que utilizaron en el.  Pensaba en maneras de darle el amor necesario sin caer en la sobreprotección, en ello le ayudaba mucho su esposo aunque sabía que el la consentía mucho.

—wahhh— Nat interrumpió de nuevo sus pensamientos y el sonrió para volver a jugar, le enseñaba un trenecito que llevaba conectados algunos vagoncitos, ella tenía que unirlos.

—este es el uno, este es el dos y este el tres mi amor, ya viste?— le ayudaba a acomodarlos y ella le seguía, se divertía mucho con ella. Hizashi llegó y abrió la puerta, llevaba en brazos un enorme peluche de gato.

—donde está la princesa de papá?— la miró para extender sus brazos, sin embargo también se topó con la mirada de reproche de su esposo quien se levantó.

—que dijimos de consentirla demasiado Hizashi?— cruzó los brazos esperando una explicación. Mic rasco su nuca

—perdon cielo, es que es mi niña, mi princesa y quiero hacerla feliz, trataré de moderarme si?— hizo una carita de ruego que siempre funcionaba en Aizawa.

—bien, solo esta vez por favor— Shou volteó a ver a su hija pero para su sorpresa no estaba donde la dejó, miró a todos lados hasta que la vió ahí, tratando de llegar al peluche, iba de pie.

—a...amor, amoor, son sus primeros pasos— Mic casi grita al verla también así, abrazó a su amado y fue rápidamente a cuidar que Nat no se cayera, al llegar ella abrazó al peluche que era casi el doble de su tamaño.

—mi niña está creciendo muy rápido, por favor no sigas Nat, quiero tenerte como mi bebita hermosa todo el tiempo— Aizawa también se acercó para cuidar de ella.

—a ver mi amor, puedes ir con papá?— le preguntó Yamada a su pequeña haciéndole algunas señales para que viera a Shou de nuevo. El extendió sus brazos.

—ven chiquita, ven con papá—

La bebé dió un paso con ayuda de Hizashi y después siguió sola, daba pasitos lentos, cayó de rodillas pero no se lastimó gracias al tapete, sus papás se acercaron a revisar que no estuviese lastimada, al ser primerizos y sin importar cuan preparados estuvieran también tenían miedos.

Eso era lo que implicaba ser papás.

—estás bien hermosa? No te lastimaste?— el rubio la volvía a cargar para besar su mejilla.

—lo está amor, ya dió sus pasitos, dejemos que descanse, apenas empezó— Shou solo quería que ella no se esforzara demasiado, aun era muy pequeña y aprendería a su ritmo.

—muy bien princesa, seguro que estás cansada, vamos al expreso de la ducha— Mic la llevó a la habitación para poner la tina de su hija, la llenó de agua a temperatura adecuada para que ella se sintiera bien y la bañó con cuidado, al terminar Aizawa la cargó y la secó, la cambiaron y la recostaron, de inmediato ella se durmió.

—está creciendo amor, no puedo creerlo—

El tiempo pasaba demasiado rápido.