un nuevo capitulo...

Capitulo 02

Los días siguientes no son buenos las pastillas mantienen a límite la bilis ácida, la vida parece continuar aunque su padre sigue lanzando burlas sobre su pronta muerte y sobre como de va reir en su tumba osa a mencionar a su madre , Merle ignora lo que escucha dejando a daryl humillado y triste se encierra en la habitación y su malestar se sumerge en sueños inquietos.

–¡Arriba daryl tienes que acompañarme a cazar se nos acabo la comida!

–No quiero Merle, no me siento bien.

–Nunca te sientes bien son dos semanas daryl no me digas que tengo que llevarte a un maldito hospital– gruñe

–Quizás papá tenga razón y me muera ¿no? – susurra

–No digas estupideces daryl mira– pasa un momento en silencio – Cambiate de ropa te llevaré a una bruja esa perra curandera

–No– se niega rotundamente a que alguien lo toque a no ser una mujer.

–Esto tiene que acabar daryl, si estas enfermo de gravedad debemos saberlo de una vez y ver que hacer.

–¡Y que vamos hacer! Si me dice que me estoy muriendo, no tenemos dinero Merle no tenemos nada así que prefiero dejarlo así, solo vete quiero dormir– se queja

Merle gruñe y se marcha lanzando la puerta estrepitosamente, daryl suspira sus manos ondulan su estómago tratando de calmar los calambres sin darse cuenta se queda dormido.

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–¿Donde esta?

–Descansando

–Dos semanas descansando ya es mucho ¿no crees? Necesita aportar en esta casa no comemos de milagros Merle

–Esta enfermo y soy capaz de de manternos alimentados, soy el que pone más dinero y caza aquí viejo– réplica

–¡Y! Merle estamos viendo que daryl es una carga lo mejor sería enviarlo al hospital y que lo atiendan ahí dejémoslo ahí, no nos sirve para nada.

–Hablas de tu hijo

–¿Deberia ofenderme? No me importa Merle.

Merle no responde

A la mañana siguiente daryl se levanta con los gritos de Merle pidiéndole que levante su trasero de la cama lo hace con dificultad se cambia de ropa y toma su ballesta

–Ya era hora andando– gruñe saliendo afuera daryl suspira siguiéndolo se adentran al bosque en silencio en lo profundo daryl se siente mejor quizás por el aire helado que le pega en la cara o los largos días sin caminar pero se siente mucho mejor

–Un ciervo tenemos suerte no te muevas no quiero perderlo– daryl asiente en afirmación, Merle apunta al ciervo con su escopeta el silencio es atronador es estos momento hay una pizca de adrenalina que daryl llegó a amar incluso si Merle hacia la mayor parte siempre.

Merle dispara directo a las costillas donde debería esconderse el corazón del ciervo con una sonrisa victoriosa baja el arma le sonrie a daryl y se acercan

–Vamos daryl te toca– patea al animal muerto, daryl le tira la ballesta para alzar al ciervo sobre sus hombros, pesa, pesa muchisimo

–Carne asada Merle guardamos el resto para la semana

–Haría un guisado es buena caza hoy saldré al bar ¿vas a venir?

–No– arruga la cara –Dormiré.

Merle resopla

–Daryl tienes que salir estoy harto de tus... Cosas de enfermo saldré por unos días iré a la ciudad necesito que te hagas carro aquí y de Jhon.