Capituló 40: Una Charla Con Un Perro

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Sirius estaba de nuevo cerca de la cabaña de Hagrid, caminando como un perro.

"La mierda de mierda ni siquiera me dejaba decidir" Alguien dijo que miró en dirección y vio a su hijo, ya juzgar por la túnica, este era Scorpius.

Scorpius iba a despotricar una vez más, pero Sirius se acercó a él y Scorpius miró su forma de perro y sonrió.

"Hola" dijo Scorpius mientras se sentaba en el césped para ver mejor al perro. "Sin collar, ¿eh?" dijo Scorpius, y el perro lo derribó.

"Tranquilo ahí" dijo con una risa.

Sirius sonrió para sí mismo al ver la sonrisa de Scorpius, era preciosa como la de Diana.

"¿Quieres uno?" El chico dijo que Sirius lo miró y vio que el chico le daba una barra de chocolate, Sirius tuvo que contenerse para no reírse.

"Lo siento, lo olvidé" dijo y se comió el chocolate.

"Bueno, debería regresar al castillo, mi hermano y sus amigos, bueno, mis amigos también, pero ahora no me consideran uno, porque creen que favorezco a Draco, pero 'Mione habla con más" El chico dijo mientras se levantaba del suelo y regresaba al castillo.

Estaba pensando en lo que dijeron los chicos, pero su trance se interrumpió cuando vio a Diana en el terreno recogiendo algunas hierbas.

Sirius sonrió para sí mismo y casi corrió hacia la chica, pero se contuvo y la admiró.

Ella no había cambiado, pero luego miró en otra dirección y vio que Scorpius se acercaba a ella y la abrazó con fuerza, luego se fue.

____

Unos Scorpius se habían ido Diana miró a su alrededor en busca de algunas hierbas, pero algo llamó su atención, algo negro, llamó su atención. Caminó unos pasos, hasta que vio que era un perro negro y desaliñado, sus ojos se abrieron como platos al recordar muy bien que la forma animaga de Sirius era exactamente igual a esta, volvió al interior del castillo y se puso a pensar.

¿Y si es Sirius? ¿Y si llegaba a Hogwarts? ¿Y si venía por los gemelos? ¿Qué pasa si él está detrás de Harry?" Había muchas preguntas dando vueltas en su cabeza.

Su trance se interrumpió cuando Atenea le puso una mano en el hombro.

"¿Lo estás haciendo bien?" Athena dijo mientras se sentaba al lado de Diana.

"¿No tu?" Ella dijo.

"Rem, me atrapó encima de Regulus" dijo riendo, y Diana la miró con incredulidad.

"No me dijiste que tú y R-"

"En primer lugar, no estamos saliendo, nos estábamos divirtiendo, y por diversión significa que estábamos jugando un juego", dijo Athena, y Diana se rió entre dientes.

"¿Cómo lo hizo Remus, ya sabes?", Dijo Diana, y Athena suspiró.

"Él dijo 'Sorru, si te molesté, puedes continuar'. ¡El chico prácticamente nos dijo duro!" Athena dijo y Diana se rió de ella.

"Oye Di-Oh lo siento" dijo Remus cerrando la puerta.

"Oye, vuelve aquí", dijo Diana y llevó a Remus de regreso a la enfermería.

"Lo siento por-"

"No perturbaste nada, solo estábamos jugando un pequeño juego, y él perdió" dijo Athena, y juró que Remus suspiró aliviado.

"¿Has visto a Scorp?" dijo Remus, y Diana asintió.

"Él mira hacia abajo, ¿quieres decirme algo?" Dijo Diana, Remus miró a Atenea y la niña comenzó.

"Los demás tienen la impresión de que se está volviendo como Draco, pero sabemos que Scorp no haría eso" coincidió Remus con Athena.

"Y la última vez que hablé con él perdió su cuaderno de bocetos, y el Libro que le diste, donde guarda el pergamino que él y Archer tienen" dijo Remus.

"Archer se enojó con él, luego dejaron de hablar, pero la Sra. Granger todavía habla con él", dijo Athena.

"Bueno, ¿dónde vas a pasar la Navidad?" dijo Atenea.

"Hogwarts" respondieron.

"Eso es obvio" dijo con una sonrisa, y Remus no pudo evitar mirar a la chica.

"Bueno, debería irme, tengo una clase más tarde, nos vemos" dijo Athena mientras los dejaba a los dos.

"¿Quieres hablar en algún lugar privado?" Diana le preguntó a Remus cuando vio la mirada que tenía su hermano.

"Claro por qué no" dijo Remus y los dos fueron a su oficina.

"Escúchalo, ¿por qué estás actuando así y por qué rompiste con ella?" Preguntó mirando hacia el fango.

"N-no sé, pensé que se había enamorado, pensé que no quería estar conmigo, pensé-" Antes de que pudiera terminar la oración, se derrumbó.

"Shh" dijo Diana, y Remus la abrazó.

"No conozco a Ana, hasta ahora la sigo amando, no sé qué pasó en ese entonces, no sé por qué hice eso" dijo Remus, y Diana comenzó a consolar al niño.

"La recuperarás, no te preocupes" dijo Diana y Remus la miró a los ojos.

"Ojalá" dijo, y Diana le dedicó una pequeña sonrisa.

"Ojalá" repitió.

Moraleja de la historia- Sirius Black Donde viven las historias. Descúbrelo ahora