Brad empieza a depositar besos húmedos por todo mi cuello.
-¿Que haces? -intento despegarme de él.
-Sólo yo puedo tocarte, sólo yo puedo besarte -dice en un tono posesivo y río frenéticamente.
-¿Tuya? -vuelvo a reír- Por favor Brad no me hagas vomitar ¿si? Puedo hacer lo que me de en gana, cuando sea, donde sea y con quien sea. Soy libre, no tengo novio y mucho menos dueño, que te quede clarito ricitos -le susurro en el oído.
-Eso cambiará, créeme -dice tranquilo.
-Mientras tu sigas follandote a esa morena yo no formare parte de tus jueguecitos, no seré tu tonta muñeca ¿lo pillas? -digo irritada.
Dicho esto me suelta y se va hecho una furia hacia la salida, veo como va maldiciendo a gente que se cruza en su camino. Me meto en la pista otra vez y sigo bailando, hasta que Mel viene a buscarme para regresar al campus.El domingo recibo otro sobre más , esto ya es una rutina. Cada domingo abro el buzón con demasiado frío en las manos, con muchos nervios por saber que veré en las fotos. El sobre de hoy me impacta demasiado, hay veinte fotos asquerosas de Brad y Melanie en una habitación que desconozco teniendo sexo, y otras más donde después de verme en la fiesta se fue con ella. En este momento me siento demasiado utilizada, me dan ganas de partirle la cara y lo peor es que me atrae.
No voy a dejar que juegue conmigo, yo voy a ser mejor jugadora y haré que pierda.
Me voy a la habitación de James y golpeo la puerta, este sale sin camisa y con un pantalón de chándal gris.
-¿Estabas durmiendo? -le pregunto inocentemente.
-Me estaba cambiando -dice poniéndose una sudadera negra de Gas Monckey -¿Te quieres venir preciosa?
-Si insistes -alzo los hombros en modo de desimportancia.
Salimos de la habitación y caminamos cerca el uno del otro, llegamos al parking y busco la moto con la mirada.
-A donde vamos necesitamos algo mejor -saca unas llaves del bolsillo y las luces de un precioso Range Rover Sport en color negro parpadean.
Lo sigo hasta el coche, abro la puerta del copiloto y me subo. En su interior es todo de cuero, tiene una mezcla de perfume de hombre y tabaco; me gusta como huele, es agradable. No se donde me lleva y a decir verdad me importa bien poco, en medio del camino una espesa niebla se instala en la carretera y empiezo a sentir frío, me encojo en el asiento y me apoyo en el cristal. En gran parte es culpa mía, tan solo llevo una camiseta a cuadros negros y blancos de manga larga, no me había dado cuenta de eso hasta que el frío se cuela en mi piel. James sube la calefacción a la vez que yo cambio de emisora. Finalmente llegamos a un mirador precioso, no se donde estoy, solamente sé que se ve la ciudad debajo de nosotros y que el mirador esta en medio de un denso bosque rodeado por niebla. Miro todo a mi alrededor, y me bajo, al instante vuelvo a sentir frío, escucho un golpe y me sobresalto, solo es James estirado en el capó del Range Rove. Él me palmea su lado y poco después me encuentro tumbada a su lado, contempla el cielo y dice:
-¿Verdad que es hermosa?
-¿La luna? -digo con intriga.
-No, la oscuridad de la noche , el silencio de las estrellas y el misterio que la rodea... Todo es tan agradable y callado -me mira- ¿Aun tienes frío?
-Siempre me he preguntado si alguna vez la oscuridad ha tenido miedo del sol, de la luz, de las cosas que provocan que se vea fúnebre. Y gracias, ya no tengo frío -le contesto muy convencida, pero un estornudo acompañado de un escalofrío me delata.
-Mientes muy mal rubia -se gana un gruñido de mi parte. Me abraza y yo hago el mismo acto. Nos quedamos un buen rato abrazados, hasta que el crujido de una rama nos alerta de que alguien más esta aquí. Me bajo del coche y las ramas de delante mío se mueven.
-James ¿nos podemos ir? -las tenues luces del mirador se apagan. Dejando todo a oscuras y haciendo que mi corazón se acelere. James enciende el coche y rápidamente me subo en él.
-¿Rubia? ¿Que has visto? -estoy hiperventilando, escucho la voz de James muy lejana- ¡Rubia mírame! -me grita pero no puedo reaccionar, me esta pasando otra vez.
-¡Brad mueve el culo ya y ven al mirador! No se que le pasa a Charlotte, esta pálida , tiembla y no me contesta, su respiración esta super acelerada. ¡Jodeeeer estaba hablando con su buzón de voz! ¿Tris? Si soy yo, necesito ayud , a Charlotte le cuesta respirar, ¿que hago? Mmm si, entendido. No se donde se ha metido el capullo de Brad, no coge mis llamadas. Vale, gracias, adiós.
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Risk It All
FanfictionElla: Charlotte de 18 años , con padres separados , un hermano pequeño , guapa , cariñosa , dulce , amable , con un buen cuerpo , trabajadora. Para los ojos de todos los chicos de su universidad "la chica perfecta" ...Pero no sabían que esa chica te...