Infiltrados

> Capítulo 33 <

~ 23:35 p.m ||  Bar "Nightclub", Chile, Av providencia. ~
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Sus labios se movían sincronizadamente y con demasiada intensidad, Sakura lo abrazaba de la nuca para que no se aleje y Sasuke la agarraba del cuello queriendo devorar su boca, se habían olvidado por completo en donde estaban o lo que había pasado hace minutos, hasta que escucharon después de varios segundos como alguien se aclaraba la garganta esperando que se separen con los labios hinchados de la fuerza que aplicaron en querer fundirse.

- Bien, tengo que admitir que pareces lista en este tipo de situaciones. - Mei se acercó a ellos con los brazos cruzados y se dirigió más que nada a Sakura, reconociendo que quizás era más fuerte de lo que creía. -

- Yo no necesité un entrenamiento como todos. Simplemente aprendí con los años lo que debía de hacer. - Sakura no diría en voz alta que se sentía halagada o algo así, pero no dejaba de repetir en su mente "te lo dije"-

- Ya me puedo imaginar. Cómo sea, los llevaran al hospital primero antes de ir a la comisaría ya que están heridos. - Les informó de lo que pasaría ahora con los guardias de Madara. -

- Quiero hablar con ellos. - Sasuke no quería esperar a que suelten toda la verdad de su tío, pero sabía que todo era demasiado pronto. -

- No, al menos por el momento. Cuando ellos estén en la cárcel podrán recibir visitas o podrán ser interrogados. - Sabía que estaba emocionado por ir y preguntarles cosas, vio ese entusiasmo apenas miró a Mangekyō entrar por el bar. -

- Hmp. - Asintió a regañadientes y pensó que luego hablaría con su hermano para arreglar los interrogatorios porque no tenían tiempo para quedarse. -

- ¿Y qué paso con Nagato?- Sakura todavía no sabía de la trampa que fue todo planeado por Pain y de Madara. -

- Cuando fuimos por Nagato nos dimos cuenta que no era él, traía una máscara igual a su aspecto y también lo llevamos detenido. - Le explicó Mei sin tener más información que eso. -

- Nagato está en Argentina. - Las dos se lo quedaron mirando sin entender como Sasuke sabía eso. - Mangekyō me lo contó todo. -

- ¿Y vamos a confiar en las palabras de un criminal?- Sakura frunció el ceño pensando que era otro juego sucio. -

- ¿Tenemos otra opción?- Claro que no la tenían, solamente tenían la información que Mangekyō les brindó e irían a confirmar que sea cierto. -

- Supongo que iremos a Argentina. - Sakura agradecía que al menos el viaje sería corto por lo cerca que estaban. -

- Si no les molesta sigan hablando en la patrulla, mi última orden es llevarlos al hotel porque ya finalizó todo. - Mei les dio la espalda y empezó a caminar hacia la planta baja para salir. -