Ah! It's a wonderful cat life! | | K N Y | | A U | | TANJISEN | |

| | C A P Í T U L O . 8 | |

¿Senjuro tenía arrepentimientos?

Uno.

Y se llamaba: dejar que sus padres influyeran en las decisiones de su vida.

Había cometido el error de comentarles que le habían ofrecido una beca en Inglaterra y está de más decir que comenzaron a presionarlo para que la aceptase lo más pronto posible.

Intentó lo mejor que pudo disuadirlos diciendo que aún tenía que comunicarse para pedir informes más detallados, pero con eso solo obtuvo mensajes diarios de sus ausentes progenitores recordándole una y otra vez que se comunicase con la escuela.

Era pesado, pero eventualmente tuvo que hacerlo.

A decir verdad, era una oferta excelente, la escuela era prestigiosa y esto no era algo que ofrecieran a un estudiante promedio.

Pero tenía un maldito conflicto.

La escuela...

No. Aceptaba. Mascotas.

Era como si la vida finalmente hubiera decidido que las cosas estaban yendo demasiado bien y que había que meterle drama.

En un principio pensó en negarse.

Pero sus padres aparecieron en la casa más pronto de lo que él hubiera deseado, impacientes por saber su respuesta por lo de la beca.

—no iré.

—¡¿Disculpa?! —la voz atronadora de su padre por poco lo deja sordo de un oído.

—simplemente creo que es una decisión demasiado drástica. Hay universidades muy buenas en Japón.

—si es por tu nivel de inglés, no te preocupes, podemos conseguirte cursos avanzados —sugirió su madre de inmediata, con su habitual expresión neutra.

—¿Qué? no, no, no es eso —se agarró el dedo índice de la mano derecha con la izquierda, mordiéndose el labio y mirando hacia otro lado.

Evidentemente no podía decir que el motivo de su rechazo era porque tenía un gato y la universidad no aceptaba mascotas.

—¿entonces qué? un Rengoku no desperdicia una oportunidad de este calibre. Piensa en todas las oportunidades de trabajo que puedes conseguir si eres un egresado de esa escuela. 

Y sus padres procedieron a tirarle a la cara todos los pros de asistir a esa escuela.

¿La peor parte?

Eran sus padres y él fue débil, dejó que manipularan sus decisiones.

A la mañana siguiente entró a la dirección y le dio su confirmación a Kagaya.

Ahora tendría que convencer a Kyojuro de que lo ayudase a cuidar de Tanjiro mientras él se iba a otro país.

Y lo que más le preocupaba ¿Cómo le diría la noticia al felino?

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Capítulo cortito, pero ya se viene el drama chido.

Jaja, no tengo mucho que decir, creo que, de todos, este es el capítulo que menos me gustó personalmente hablando.

Pero espero que les haya gustado, cuídense, tomen agüita, nos leemos luego, baiiiiiii.