La Katana abandonada

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Don se ofreció personalmente para ir a dejar a los dragones donde el personal del edificio los reconociera. (no pudieron haber entrado sin llamar la atención).

-nos volveremos a ver Otello-Bon-Ryan-escupió la chica con desprecio.

-disfruta la prisión Kendra

-te odio

-yo igual, byee- se fue velozmente.

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-entonces, recuperaron en pendrive y la computadora?-el de morado entró al tanque con expresión tranquila encontrándose a los demás dentro listos para irse:

-a? oh si, que hacemos con ellos?

-deberíamos destruirlos-comentó Donnie.

-oooo, tal vez esto nos sirva de algo- Don tomó el pendrive de las manos de su hermano mayor mientras hablaba.

-Don, tú mismo dijiste que esta información es peligrosa-el de rojo giró la cabeza extrañado.

-y por eso no la deben tener los dragones púrpura, yo en cambio le tengo pensado un uso apropiado que nos beneficiara a todos- hizo que una de las garras mecánicas en su escudo tomará el pequeño aparato y lo guardara en su interior. Donnie estaba extrañado, tras pensarlo un segundo cayó en cuenta de que en realidad, (en vez de recuperar la información para destruirla y acabar con el riesgo) le robaron la información a otros ladrones. Le parecía poco ético, ¿en que la usarían? Cuando Raph se limitó a alzar los hombros y conducir de regreso a casa Leo se mostró confuso, si fuese él seguramente habría discutido seriamente esta situación "supongo que a Raph le parece correcto, el conoce más a su Don, debe confiar en él" pensó. Si Don lo dice ha de ser por algo. El de de rojo más bajito se encargó de destruir la computadora y fue a sentarse:

-creo que fue mucho entrenamiento por hoy- Leon se estiró a sus anchas- ya me dio sueño. Rafa dijo en voz alta que llegando a casa podrían hacer lo que quisieran y que descansen, esa noche saldrán a recolectar los metales que necesitan y los quiere con energía, todos asintieron y quedaron conversando en la parte de atrás, Don revisó que el pendrive no tuviera ninguna trampa, solo para estar seguros.

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Un mal presentimiento le hizo romper la concentración en su meditación, al principio solo le preocupaba, la alcantarilla rebosaba de un silencio y quietud muy poco característicos a estas horas de la noche, luego de un par de horas más la preocupación aumentó, fué a ver a sus habitaciones en caso de que hubiesen llegado tan cansados que entraron a dormir y ya, pero no, No había nadie. El televisor apagado, en la cocina gatito helado casi se derrite, lo regreso a l refrigerador y siguió buscando, llamó a cada uno de ellos y nadie contestó, luego a sus amigos humanos y ninguno conocía su paradero. La preocupación se tornó en angustia pero se mantuvo lo más tranquilo que su corazón le permitía. pensó "¿dónde pueden estar?" "¿donde fueron la última vez?" si bien no solía considerarlo le pareció que debía ir a la superficie, si algo les hubiese pasado a sus hijos, algo peor de a lo que siempre se enfrentan, se sentiría muy culpable y jamás se lo perdonaría.

Splinter corría por las azoteas velozmente y con el sigilo de una sombra, imperceptible y silencioso, recorrió el camino que sus hijos suelen seguir cuando van a patrullar, después de unos minutos encontró su vehículo, asumió que se estacionaron ahí, y que luego siguieron a pie. Fue difícil identificar su rastro, les enseño bien, pero algo tenían que dejar. su búsqueda finalizó en una bodega abandonada, no había nadie ahí, ni siquiera un ave o un ratón, descendió.

Quedaban vestigios de una batalla, tecnología que reconoció como la del Krang (pero ningún robot cerca) había máquinas que no sabía identificar, el piso tenia rasguños hechos por el filo de sus armas, quemaduras y raspones, frente a una de las estructuras más grandes, enterrada en el concreto a varios centímetros de profundidad, estaba la katana de Leo, sola y abandonada.

Splinter la reconoció en un instante, sabía que sus hijos se encontraban en peligro, el líder azul jamás dejaría una de sus espadas a menos que le fuese imposible recuperarla. A pesar de la certeza de que sus hijos estaban en problemas trato de mantenerse sereno, la posición de la empuñadura, él como la hoja estaba enterrada le dijo que Leonardo se había aferrado a ella como si algo lo estuviera tirando. Volteó hacia la máquina, seguramente eso los absorbió, la tecnología de portales krang no le era ajena y había oído acerca de ello, La enorme rata suspiro con pesadez y algo de tristeza. Si sus hijos habían viajado a través del portal y permanecieron juntos, entonces estarán bien y encontrarán la forma de volver a casa sanos y salvos. No podía hacer nada por ellos, esto era algo que comprendía, sólo podía esperar a que volvieran, eso es lo único que tiene, Esperanza.

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Capítulo corto, lo sé, había más pero aparecerá más tarde...

 se desaparece en un sartén porque si*

Dimension trouble~(rottmnt & 2k12tmnt crossover)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora