Baby Boy [KrisMin] PAUSADA

Capitulo II

-¡No puedo! ¡¿Y si no responde?! ¡¿Y si ne dice que era broma?! ¡¿Y SI NO LE GUSTO?!- Gritaba un exaltado Kris a su acompañante Sehun.

-¡No lo sabrás si no lo intentas! Yo lo intenté con Tao y ahora somos novios, te toca a ti Hyung, ve por ese muchacho.- Le animaba Sehun al más alto, quien miraba su IPhone dudoso de llamar al chico de cabellos anaranjados y revueltos llamado MinSeok.

-¿Y si no le gustan los chinos? ¿Y si no le gustan los altos? ¿Y si no es lo que yo esperab...- La palabra de Kris fué cortada rápidamente por el sonido del teléfono de Kris, quien casi perdió el alma del susto.

Rápidamente cogió entre sus manos el teléfono, relajándose al ver que era Tao, pero cuando contestó no era la voz de Tao la que escuchó, era otra que le sonaba muy conocida.

-¿Hola? Soy MinSeok, tu primo me ha prestado su móvil para llamarte, ya que yo no sé tu número, pero como sea, ¿Te gustaría salir conmigo hoy?- Kris se quedó estupefacto, por lo que Sehun le quitó el móvil ágilmente y contestó.

-Ah, soy Sehun, el amigo de Kris, él quería llamarte pero tenía miedo, ¿Te parece bien en dos horas en el parque frente a la cafetería? Me encargaré de llevartelo limpio y sexy.- Kris casi abofetea a Sehun por lo que dijo, pero se lo agradeció mentalmente.

-Ah, un gusto Sehun, me parece bien, trataré de ser bien puntual, ¡Adiós!- Y MinSeok cortó la llamada, entonces Sehun volteó a mirar a Kris, quien lo miraba estupefacto por la llamada telefónica de MinSeok, entre tanto, una pregunta de formó en su cabeza.

¿MinSeok es amigo de su primo?

***

-¡Vamos Kris, si te ves excelente! ¡Ahora vete de una vez o llegarás tarde a tu cita con MinSeok!- Gritaba Sehun al ver a Kris seguir arreglando su cabello frente al espejo.

-Okey, okey, ya me voy, no me grites...- Y así un nervioso Kris se dirigió al parque frente a la cafetería caminando.

Mientras caminaba iba refleccionando sobre la vida, sobre el amor, sobre el futuro. ¿Cómo sería su vida en el futuro? ¿Sería novio de MinSeok? Tal vez se casarían... Claro si MinSeok aceptaba primero los sentimientos del Chino. Luego de un rato caminando y reflexionando llegó al famoso parque, se sentó en una banca y esperó a que MinSeok llegara al punto de encuentro.

Luego de unos segundos sintió unos brazos rodear su cuello, luego un deleitante olor frutal inundó sus fosas nasales, en eso escuchó una pequeña risilla la cual le pareció muy familiar, Kris volteó su rostro y se encontró con el pequeño de cabellera anaranjada y olor a frutas, definitivamente ese chico parecía un niño de no más de 12 años.

-Hola Kris...- Dijo MinSeok, como el susurro de un ángel en su oído, provocándole que un escalofrío recorriese toda su espalda.

-M-MinSeok... Hola, ¿Te parece ir a tomar unos helados?- Respondió Kris, quien se encontraba a poco de sufrir un ataque de nervios.

-Claro, me gustan los helados.- Dijo el chico de baja estatura con una gran sonrisa sobre sus labios, dejando ver sus pequeños dientes.

MinSeok y Kris se dirigieron en silencio hacia la cafetería, en la cual se encontraron con una gran sorpresa al llegar.

-¡Eh tú! ¡Quita tus asquerosas manos de mi primo!- Gritó un exaltado y bastante furioso Kris.

Frente a ambos chicos se encontraba un joven de piel bronceada sentado en una mesa con Tao sobre sus piernas, ambos estaban besandose y acariciandose sin pudor alguno hasta que son descubiertos por Kris, quien ya estaba a punto de echar humo por las orejas.

MinSeok, en un intento por calmar a Kris tomó la mano de este, comenzando a acariciarla. Y como por arte de magia a Kris se le bajaron los humos, concentrandose en las caricias que le otorgaba su amor platónico a su mano, sintiendo como la sangre le viajaba rápidamente hasta los pómulos, provocándole un gran sonrojo.

-Vamos Kris, Tao es libre se hacer lo que quiera, no te amargues y vamos a otro sitio.- Dijo un comprensible MinSeok, entrelazando sus dedos con los del menor y comenzando a caminar junto a este a otro sitio.

-¿Te parece si vamos al cine? Me enteré de que están pasando una película muy buena de terror, ¿Te animas?- Sugirió Kris al mayor, tratando de sonar calmado y controlar el color de sus mejillas, verse pasivo no era su estilo.

-¡Por supuesto!- MinSeok dió paso acelerado hasta el Cinema del centro de Seúl, nunca había ido y la verdad tenía muchas ganas de ver esa nueva película de terror que se había estrenado.

Ah decir verdad Kris esperaba que el mayor se agallinara o que titubeara un poco, ya que Kris no era muy valiente, y si el mayor no le pedía que lo abrazara en el cine él tendría que tomar la iniciativa.

***

Una vez pagadas las entradas del Cine y comprados los bocadillos se adentraron en la oscura sala de cine, se sentaron casi al final, ya que Kris no quería molestar con su gran altura si se sentaba muy adelante.

MinSeok se acomodó en el pecho de Kris esperando a que comenzara la película, una vez comenzada ambos estaban un tanto atemorizados, uno más que el otro, pero al estar ambos cerca se sentían valientes y capaces de soportar todo tipo de temor.

Entre tanto MinSeok por accidente rozó el miembro de Kris con su mano cuando buscaba donde había dejado su bebida, provocando que Kris se mordiera su labio inferior, ya que con sólo aquel roce del mayor su miembro reaccionó casi de inmediato.

-¡Lo lamento!- El torpe, torpe MinSeok tiró su bebida sobre Kris, ensuciandole su entrepierna con esta.

MinSeok rápidamente tomó un pañuelo y comenzó a limpiar el rastro de bebida sobre la ropa de Kris, quien no podía creer que su mente se llenase de pensamientos sucios con sólo el tácto ajeno. Aunque le fué inevitable cuando MinSeok se agachó frente a él y le comenzó a limpiar la zona de su miembro con un pañuelo.

Definitivamente Kris tenía una mente nada sana.