𝐓𝐡𝐞 𝐥𝐢𝐭𝐭𝐥𝐞 𝐰𝐢𝐳𝐚𝐫𝐝 𝐚𝐧𝐝 𝐡𝐢𝐬 𝐰𝐨𝐥𝐟

Héroe misterioso

Odio todo...

Me repetía constantemente, mientras caminaba por el bosque en busca de mis cosas, las cuales yacían esparcidas por todos lados, pero lo que más odiaba en esos momentos, era a mi escoba.

- Estúpido pedazo de madera inservible, debí hacerte leña y echarte al fuego el año pasado, – grité exasperado, esperando que esa cosa con vida propia me escuchara.

Seguí buscando, trepando algunos árboles, huyendo de algunas hadas, escondiéndome de algunos duendes; Odio todo... Me volvía repetir mentalmente, mientras trataba de aguantar la respiración, esperando que aquel troll no se le ocurriera meterse al río. Para aumentar mi desgracia, sentí como lo que parecían ser raíces, se enredaban en mis piernas y jalaban de mi hacia lo más profundo.

Y una vez más parecía que este sería mi fin, y una vez más maldije a mi hermano por vivir en la quinta mierda, solo a él se le ocurría casarse con un elfo e irse a vivir con él a sus tierras. El aire de mis pulmones se acabó, y cerré mis ojos, en espera de la más dolorosa muerte, bueno, talvez estoy exagerando un poco, me concentre lo suficiente y me imagine en la orilla del río, y antes de poder efectuar lo que sería mi más grande hechizo, fui sacado del agua de manera brusca, tosí un poco, e inhale una buena cantidad de aire, enfoque mi vista, y me di cuenta que estaba de cabeza, siendo cargado por alguien.

Y una vez más fui salvado por mi héroe misterioso.

Suspire con tranquilidad, y me deje caer ante el cansancio, al despertar me encontraba en la casa de mi hermanito, en una de las habitaciones de invitados, con todas mis cosas apiladas en una esquina de la cama, y a mi inútil escoba a mi lado, tonta madera con vida.

Me levante despacio, tome la pequeña hacha que siempre llevo conmigo, y la apunte con furia hacia Woom «mi escoba, y si, le había puesto nombre» esta fue rápida en esquivar mi ataque, la perseguí por la habitación tratando de hacerle algún daño, porque todo esto había sido su culpa, bueno en parte también mía por pronunciar mal el hechizo, pero siempre es mejor culpar a terceros de tus desgracias.

A punto de acertarle un golpe la puerta se abre, y la desgraciada escapa, escondiéndose tras mi cuñado.

- Un día de estos, – susurre, escondiendo el arma de la vista del elfo frente a mí, sonriendo de manera amigable, lo abrace en modo de poder alcanzar a tomar a Woom, pero esta volvió a escapar.

- ¿Te sientes bien? – pregunto un poco confundido, – no es que no me agrade la idea de que me abraces, eres el hermano de mi esposo, y me hace sentir que al fin me tienes cariño, – continúo hablando, sin darme tiempo de responder, me aparte de él y lo mire con mi ceño fruncido, – pero normalmente sueles pegarme e insultarme cada vez que vienes, y es un poco extraño, así que gracias por aceptarme, – finalizo con una linda sonrisa.

No me atreví a decirle que estaba equivocado y que lo única razón para abrazarlo, fue parte de mi táctica para atacar a Woom, atiné a sonreírle y empujarle de manera juguetona al pasar a su lado para salir, lo sentí esfumarse, y luego su voz resonaba desde la cocina.

Me gustaría aclarar que, si le tengo cariño, es la persona que más ama a mi hermanito y haría todo por verle feliz, simplemente me gustaba molestarlo, pero ahora ya no podría seguir haciéndolo, porque sería contradecir lo que muy emocionado le contaba a Felix, y eso borraría las hermosas sonrisas que ambos tenían en estos momentos.

Me acerque lentamente a ellos, y los abrace a ambos por los hombros, deposite un pequeño beso en la frente de Lix en modo de saludo, y luego les revolví el cabello.

- ¿Has visto a Woom? – pregunte observando con cuidado todo el lugar.

- ¿Otra vez peleando con tu escoba? – respondió con otra pregunta, – me gustaría que me explicaras porque estabas inconsciente frente a mi puerta, – pidió, obligándome a sentarme.

- Bueno, quiero recalcar que todo es culpa de Woom, boto todas mis cosas en el bosque, baje a buscarlas, de un momento a otro me estaba escondiendo de un troll dentro del rio, cuando siento que comienzan a arrastrarme hacia las profundidades de este, luego de eso no recuerdo lo que paso exactamente.

Relate de manera seria, para evitar más preguntas, no le contaría sobre la existencia de mi héroe, hasta descubrir quien es.