Alicia
Nos abrimos paso hacia el cuarto de ventilación, donde estaban las escaleras que dan hacia los ductos, desde allí podríamos ver todo lo que estaba sucediendo, sin ser vistas nosotras.
Alicia: Raquel tía, si sabias que esto podía ocurrir, ¿Por qué viniste?- le pregunte, me parecía demasiado irresponsable de su parte-.
Raquel: Si bien si desarme la banda, porque porque liquide al jefe, su hijo TITO juro venganza y asumo que es el quien me esta buscando para matarme- dijo y pude sentir un nudo en el estoma. digo es normal que siempre quieran matarte en esta profesión, pero que quieran acabar con la vida de tu amor de toda la vida, es otra cosa-.
Alicia: Raquel esto es demasiado peligroso si lo enfrentamos solas-dije-.
Raquel: No parecen las palabras de la Alicia que yo conozco- dijo y la mire-.
Alicia: Si pero allá afuera hay como 20 hombres armados y tu y yo solo estamos nosotras con dos revolver- dije sarcásticamente-.
Raquel: Siempre que fuimos nosotras dos estuvimos bien no recuerdas?- esta mujer hoy esta dispuesta a recordarme el pasado-.
Alicia: Venga ya, subamos por aquí- dije muestras subía los escalones que daban hacia la ventilación- Esto es demasiado angosto Raquel, no nos va soportar a las dos-.
Raquel: Vale baja tu y yo seré quien suba- jamás dejaría que ella hiciera algo así-.
Alicia: Ya estoy yo arriba, ya me quedo acá- dije y subí- espera a qui a que regrese no vayas a hacer una tontearía por querer hacer las cosas sola, recuerda lo que sucedió la ultima vez-.
Raquel: Venga Alicia no hay necesidad de mencionar esas cosas- dijo y seguí subiendo-.
Llegue a la ventilación, los ductos eran realmente angosto, por muy poco entraba yo y eso que estaba bastante delgada, avance unos metros de rodillas y cuando todo se puso mas angosto, tuve que acostarme y rampar, pude llegar al salón, y mis cálculos no fallaron, a mi vista estaban 20 hombre armados con calibre alto, no sabia como estaba la entrada ni el techo, generalmente en estas emboscadas, cubren todas las salidas y entradas del lugar.
Logre ver a ángel, el compañero de Raquel, saque mi teléfono, el fondo de pantalla era una foto de Raquel, por eso no pude dárselo cuando me lo pidió, no es momento pero tomare unos cuantos segundos para cambiarlo; estaban apuntando a Ángel, no podía escuchar que le decían, pero asumo le estaban preguntando por Raquel, y conociendo lo fiel que es, podían matarlo antes de que soltara el paradero de ella.
Decidí regresar, debíamos idear un plan para salir vivas de acá, solo nos teníamos la una a la otra.
Tome el camino de regreso, llegue y baje los escalones.
Raquel: ¿Qué fue o que viste?¿ cuantos son?¿que armas traen?¿viste algún herido?-me lleno de preguntas-.
Alicia: Venga necesito que te calmes, son mas o menos 25 hombres sin contar, entrada y salida ni techo ni sótano, tenían a tu amigo Ángel, supongo que interrogando, pero ambas sabemos que no hablara, esta demasiado enamorado como para ser sopón- dije en tono burlón-.
Raquel: Ángel no esta enamorado de no-dijo-
Alicia: Eres la única que no lo ve, pero yo entiendo, puedes tener al amor de tu vida en frente y no te das cuenta de nada, y no haces nada- dije y ella me miro fijo entre cerrando los ojos- pero no es momento para hablar de esas cosas, ¿Qué vamos a planear?-dije en seco-.
Raquel: Debemos buscar la forma de salir, y así poder pedir ayuda desde afuera, tengo un plan, como yo sabia lo que podía suceder, pedí un plano del lugar, esta acá- saca su teléfono y busca la imagen- nosotros estamos aquí- señala un punto- y debemos llegar hasta aquí, son aproximadamente 200 metros, juntas en silencio podemos hacerlo, es una salida directa hacia mi auto, pero obviamente ellos van a estar allí-.
Alicia: Vamos al mío, esta como a 50 metros del tuyo, de allí salimos y pedimos refuerzos-.
Raquel: Perfecto, hagámoslo.
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Tan mía como de nadie. // Ralicia / Alicia & Raquel
FanfictionAlicia Sierra y Raquel Murillo, ambas inspectoras de la policía, con pasado marcado de intensidad , jamas se imaginarían que ese pasado se convertiría en un presente tan intenso como esa sensación que explotaba en el corazón de ambas en cada encuent...