"𝐃é𝐜𝐢𝐦𝐨 𝐏é𝐭𝐚𝐥𝐨"

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⋘ ᴛᴇ ᴀᴍᴀʀé ᴘᴏʀ sɪᴇᴍᴘʀᴇ... ⋙

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Hoy es veintiocho de noviembre, el día de mañana es el cumpleaños de mi amada Sana. No tengo nada preparado lamentablemente, pero estoy segura que ella se alegrará de oír que estoy mejorando y que muy probablemente en unas cuantas semanas podré estar junto a ella.

La luna está llena, hermosa y muy brillante como siempre, pero ésto me hace pensar en Saná y si el resplandor único, creo que la forma en la que ella brilla es facinante y me gusta ser la persona que puede apreciarlo siempre.

-- Qué preciosa...-- Sonreí levemente.

Miré por el rabillo del ojo, el ya ajeno rosario y así por ultima vez la rosa que solía mirar siempre, se despojó de su ultimo petalo blanco.

En ese instante mi corazón dió una punzada que me quitó la respiración, mis ojos se abrieron de par a par y mi boca ligeramente lo hizo también a causa del dolor. Mis ojos se nublaron en lágrimas y llevé mis manos a mi pecho, apretando con fuera para calmar el dolor.

No pensé en nada más que en Sana, el momento que menos querido había llegado y a pesar de sus esfuerzos no puedo lograr quedarse a su lado.

-- Sana...-- El nombre de mi amada se me escapó de los labios.

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El monitor comenzó a sonar descontroladamente, alarmando a los funcionarios que pasaban por alrededor, quienes acudieron al llamado de la maquina.

-- ¡Enfermera el desbribilador! -- El médico pidió con una voz demandante.

Carga eléctrica, tras carga eléctrica y el cuerpo de la joven abogada ya no demostraba signos vitales, pero ellos sabían muy en el fondo que la chica seguía intentando volver, pues a pesar de todo sus signos reaparecer por leve períodos de tiempo.

-- Ella no quiere morir...-- Pronunció una de las enfermeras, limpiando sus lágrimas.

-- ¡Tzuyu! -- Sana interrumpio en la habitación a pesar de las advetencias -- T-Tzuyu...

Su rostro estába cubierto de sudor y lágrimas, ella realmente había corrido lo más rápido posible.

Y todo para poder estar con Tzuyu.

-- Ella ha estado luchando desde el principió, pero ya no le quedan fuerzas para seguir, solo estará consiente un para de minutos...-- Dicho ésto, el médico movió le dió paso a Sana.

Sana tomó la mano de Tzuyu, la alta reaccionó a su contacto pues abrió sus ojos con pesadez y le sonrió. No habían palabras algunas que expresaran lo que ambas transmitían en ese momento, sus corazones realmente estaban conectados.

-- Realmente creí que podría mejorar...-- Hizo una pausa, le costaba respirar -- Lo intenté por tí y no lo logré, perdóname...

-- No te disculpes, sé desde el principió que a pesar de todo jamás estuviste convencida de éste destino.-- Sonrió y acarició sus mejillas -- Pero no importa, estoy aquí a tu lado, como siempre...-- Sana limpió las lagrimas de Tzuyu -- Estámos juntas.

-- Sana, tengo miedo...-- Confesó con una voz suave -- Tengo mucho miedo, por favor no dejes de amarme.-- Pidió con cierto desesperó y con una triste expresión suplicante.

Algo que puedo llegar al corazón de los presentes.

-- No tengas miedo mi ángel, a donde sea que vayas yo iré, en el lugar que sea te amaré, siempre.-- Sana se acercó y acarició el cabello de Tzuyu -- Te amo...

Tzuyu tomó una gran bocada de aire.

-- Sana, Perdóname por favor...-- Le pidió Tzuyu arrepentida por todo lo que le había causado -- ¿Podrás seguir amandome?

Sana rio levemente, su rostro cálido y sus ojos llenos de amor lo decían todo.

Para ella jamás hubo palabra o detalle que demostrará cuánto amaba a Tzuyu.

Lo que sentía por Tzuyu era mucho más.

-- Por supuesto, por supuesto que lo haré y no te sientas mal.-- Sonrió -- No hiciste nada malo...Nada en éste mundo hará que deje de amarte, nada.

-- Qué alegría...-- Tzuyu pronunció relajando sus ojos -- Qué alegría..
-- Replicó llena de alivió y mostrando una sonrisa cálida -- También voy a amarte para siempre Sana, esa fue mi verdadera razón de existir.

-- Te amo Tzuyu...

Sana selló sus palabras con un delicado y duradero beso en los labios de su otra mitad. Pudo sentir como el agarré de Tzuyu se hizó flojo y sus ojos se cerraron lentamente.

-- Te amo Sana...-- Fueron esas más últimas palabras de Tzuyu, antes de que el monitor diera la indicación de lo que había sucedido.

La jóven abogada de veinticuatro años había cedido a su destino con serenidad y paz después de haber batallando con todas sus fuerzas.

La larga y agotadora guerra que había luchado contra todos y todo había terminado por acabar con la mente y cuerpo de Tzuyu, pero no con el amor que sentía hacía Sana.

Mientras ella siguiera existiendo en el corazón de Sana. No importaba que le sucediera a su cuerpo.

Porque dejar de existir en su corazón era para Tzuyu, morir.

-- ¿T-Tzuyu?...— Pronunció con una ligera voz.

La mayor se desmoronó por completo, su agonía era desgarradora de oír. Sus sollozos de llantos eran idénticos a gritos de ayuda, sentía como moría por dentro.

Estába tirada en el suelo con sus manos en su cabeza, se había acabado todo para ella.

¿Qué se supone que haría ahora?

Morir...

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Hasta aquí el cap, realmente solloce un poco al hacerlo jajaja

Esperó y lo disfruten.
Arios ^^

𝐔́𝐥𝐭𝐢𝐦𝐨 𝐏𝐞́𝐭𝐚𝐥𝐨 ˢᵃᵗᶻᵘ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora