AMOR INESPERADO

♡ CAP. NO. 4 ♡

Dos Meses Después Del Primer Encuentro...

Saint estaba estresado tenia demasiada tarea de inglés, aprender un idioma extranjero formaba parte de su interés pero no se imaginó que fuera tan difícil y en todo caso, sería más fácil aprender chino ¿Qué clase de universidad era esa, que no les enseñaban chino? ¡Maldición! Había estado tratando de solucionar el mismo ejercicio durante una hora y ninguno de sus intentos parecía funcionar. Ya tenía la mesa llena de diccionarios, decidió apoyarse con el traductor de Google pero había sido una mala idea. ¡Al diablo con todo! No dejaba de repetirse, si continuaba así, lo más seguro es que reprobaría el examen que estaba programado para la siguiente clase.

Además ¿Dónde demonios se metió Zee ese día? ¡No estuvo en la mañana para darle su desayuno! Bueno, tampoco era como si lo estuviera esperando, pero esa maldita acción de todos los días, había provocado que él se acostumbrara a no llevar dinero consigo para comer algo en la universidad. Estaba tan molesto debido al hambre que tenía y además era bien sabido que un cerebro sin alimento no funciona, pues bueno, la teoría estaba resultando cierta, su cerebro estaba muerto en ese preciso instante.

En eso la puerta de la biblioteca se abrió y la encargada tuvo que llamarle atención a un grupo de estudiantes ruidosos para que se callaran y entraran sin molestar a quienes si estaban estudiando.

La mirada de Zee se cruzo con la de Saint irremediablemente, el pelinegro se disculpo con sus amigos y con total descaro llegó a la mesa del castaño, tomó una silla y se acomodó junto a él.

-Te debo una disculpa- Dijo dejando un chocolate snikers sobre su libreta y Saint lo aparto con la mano para seguir escribiendo-. Hoy no tenía clases en las primeras horas, debes tener hambre ¿Por qué no comes esto?

-No es como si hubiera estado esperando a que aparecieras para darme de comer. En serio deja de pensar que eres indispensable en mi vida.

-Da lo mismo. Mi deseo es que comas esto- Zee colocó el chocolate en la mano de Saint después de arrebatarle el lápiz. Intercambiaron miradas y permanecieron así durante un par de segundos-. ¿Inglés? - el pelinegro tomó la tarea de Saint. Y ahí iba de nuevo a entrometerse en lo que no le importaba-. Tienes muchos errores- empezó a borrar y a escribir a su antojo, Saint se quedó mirando la facilidad que Zee tenía con el idioma ingles y antes de que los dos fueran conscientes de la nueva situación que los unía, parecieron relajarse. Zee le explicaba los ejercicios y le hacía memorizar algunos verbos irregulares, Saint se comía el chocolate y parecía que el azúcar le había devuelto la vida ya que se emocionaba de estar entendiendo todo lo que Zee le decía. El pelinegro no le hizo la tarea, solo le explicó de manera tan detallada que fue más fácil memorizarla.

Unas horas bastaron para que pudieran entrar en confianza, salieron de la biblioteca juntos.

-¿Cómo es que sabes tanto inglés? Saint sentía curiosidad por lo bien que Zee dominaba ese idioma.

-Cuando estaba en la preparatoria fui un estudiante de intercambio en Canadá. Fue muy duro estar en otro país, tuve que aprender a la mala el idioma. Ya te imaginas, aprender a la mala significa estudiar sin parar porque tienes que comunicarte de alguna manera.

-Wow. Yo no habría podido soportarlo.

-Seguro que lo harías, eres alguien valiente y que se esfuerza por hacer mejor las cosas- ¿A qué vino eso?

Saint sintió su rostro acalorado y reviso la temperatura en su celular. Eran 18°, de hecho era un poco fresco ¿Qué hacía él sintiéndose avergonzado por palabras como esas? ¡Basta! No es como si fuera un cumplido.

-Oye. Ahora que parece que si podemos hablar, quiero ser honesto contigo Zee.

-Es la primera vez que me llamas por ni nombre- y eso es genial.

Saint había hecho sonreír a Zee y ahora se sentía culpable de desilusionarlo para siempre.

-Esa carta no estaba dirigida a ti. Así que debes de dejar de ilusionarte conmigo, no eres tu quien me gusta- Dijo Saint lo mas sincero que pudo.

Zee se detuvo y se puso frente a Saint. Tomó sus manos y lo miro directamente a los ojos.

-Antes de transferirme de Chiang Rai. Había una chica que me gustaba tanto, tanto. No, no me gustaba, ¡La amaba tanto! Entonces escondí una carta en su casillero, ella la leyó y cuando acudió al lugar donde yo la cite, estaba muerto de los nervios, termine negando todo.

Le dije que esa carta no la escribí yo, le dije que era un error y que yo estuviera ahí era solo una coincidencia. Ella se fue y no volví a tener el valor de hablarle. Después se hizo novia de otro chico. Mi corazón dolió tanto que me propuse a mi mismo no volver a desechar una oportunidad tan valiosa de salir con alguien. Sé que estas avergonzado, tu carta fue muy atrevida y directa, pero te he dicho antes que puedo esperar, hasta que confíes en mi y estés seguro de lo que sientes.

-Zee realmente agradezco la confianza que me tienes para contarme tu historia, pero quiero que entiendas que no es mi caso. Esa carta no era...

El teléfono de Zee empezó a sonar ruidosamente y se despidió con un "Nos vemos luego"
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💙❤️