♡ CAP. NO 5 ♡

143 55 11
                                    

Tres Meses Después Del Primer Encuentro...

Un mes más transcurrió, uno en el que los desayunos continuaron, igual los encuentros en la biblioteca para poder estudiar juntos, o que Zee le ayudará a Saint, viajes ocasionales en el coche del padre de Zee para dejarlo en la puerta de su casa y algunas caminatas juntos cuando se encontraban por ahí.

Ese día Joss se sentó en una mesa cercana a la de Saint.

El castaño estaba leyendo un libro y Earth aprovecho el momento para comer un poco de la comida que Zee le había llevado a Saint ésa mañana.

Saint sintió que su corazón latía precipitadamente, se cubría un poco con el libro y en ratos miraba por encima. - Joss era él único dueño de su corazón y por quien suspiraba.

-¿Por qué no vas y lo invitas a sentarse con nosotros? Sugirió Earth, sería menos incomodo que verte babear por él.

-Me es inevitable no ver a Joss. No entiendo el porque de su soltería, si es tan guapo.

-Quizá sea un tipo de los que prefieren las relaciones de una noche. Escuche a unas chicas charlando algo sobre eso.

-¿Crees que sea eso?- Agh... ¿Por qué siempre terminaba interesándose en la tonterías que Earth decía? Ya debería estar acostumbrado que su amigo solo decía cosas que no podían ser ciertas.

En fin, era una buena mañana, una mañana perfecta en la que podía ver a Joss sin problema. Saint estaba feliz de tenerlo solo a unos metros, incluso alcanzaba escuchar su linda voz y con eso era suficiente, era como soñar despierto.

De pronto, las nubes imaginarias en las que había comenzado flotar, desaparecieron de forma estrepitosa cuando Zee apareció para sentarse en su mesa y saludó a Earth como si lo conociera de toda la vida.

-¿Estás comiendo lo que traje para Saint? Preguntó Zee. - Oh joder. Los dos chicos se miraron entre sí, creían que el pelinegro iba a enfurecer y les arrebataría la comida, incluso se quedaron mudos y ya que ninguno dijo nada, Zee tuvo su momento para continuar-. Debieron decirme antes que tú también comías, mañana traeré mas comida para ambos.

-¡No es necesario!- Saint agito las manos rápidamente y rechazó el ofrecimiento de Zee.

-Sí, eso estaría muy bien- Earth también quería desayunar algo delicioso todos los días.

-¡Dije que no es necesario!- Saint pateo a Earth por debajo de la mesa.

-Traeré más comida- Zee fue quien concluyo y sacó dos boletos de su mochila. Comenzó otra vez con esa sonrisilla y los agito frente los ojos de Saint -. ¿Te gusta el cine independiente?

-No iré al cine contigo. Respondió el castaño.

-Oh vamos. Un amigo está estudiando para ser director de cine. Es la primera película que puede dirigir, es de acción, creo que será genial. Me regaló entradas.

-Tu amas las películas de acción- "Gracias Earth" Pensó Saint mientras lo fulminaba con la mirada y de pronto tenía unas gigantescas ganas de volverlo a patear.

-Verás Zee, esta tarde estoy algo ocupado.

-¿Ocupado con qué? Si es alguna tarea sabes que puedo ayudarte.

-No, no es eso. Verás...

-Puedo ir a recogerte a tu casa y dejarte en ella. Mi papá va a prestarme el coche.

-Lo que pasa es que...

-Te compraré muchas palomitas, chocolates, refrescos. Lo que tú quieras, todo irá por mi cuenta.

-Es muy amable de tu parte, pero debería de invitar a alguien más.

-Eres gracioso, Saint. Te veo a las siete. Asegúrate de estar listo a esa hora.

- Zee se levanto y dejó la mesa, se escabullo de ahí como acostumbraba hacerlo. Saint tenía las manos cerradas con tanta fuerza formando puños. Esos puños serían excelentes para poder golpear a Zee Pruk, pero ¿Qué creen? Ya se había desaparecido.

-Parece que tienes una cita- dijo Earth a punto de soltar una carcajada.

-¿Por qué esta tan obsesionado conmigo? Le he dicho cientos de veces que esa carta no era para él.

-Pues...- Earth apoyó las manos sobre la mesa y acercó su rostro hasta el de su amigo -. Pero parece que alguien ha comenzado a disfrutar de las atenciones de Zee - Earth huyó antes de ser golpeado y Saint tuvo que luchar con ese incomodo sonrojo que se le pintó en la cara. De nuevo tenía calor ¡Ah. Maldición! Que incomodo era siempre que se encontraba con Zee.

.
.
.
.
.
❤️💙

AMOR INESPERADO Donde viven las historias. Descúbrelo ahora