♡ CAP. NO. 10 ♡

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Ocho Meses Después Del Primer Encuentro...

Saint se encontraba en la biblioteca leyendo un libro, había retomado su vida con normalidad.

Era mejor en las clases y eso ayudaba a que pudiera seguir esforzándose. Seguía comiendo ramen instantáneo cada mañana y se aseguraba de cargar un paraguas cuando su madre le decía.

No iba a negar que se enamoro de Zee Pruk, pero tampoco estaba dispuesto a ponerse a llorar por los rincones de la universidad como una chica rechazada, lo mejor era alejarse y dejar las cosas como estaban, no insistiría en algo que desde un inicio no debía pasar.

-Por fin te encuentro.- dijo Earth interrumpiendo su lectura.

-Era extraño ver a Earth en la biblioteca-. Te conseguí algo genial. Mira esto- Earth le entregó una hoja de papel doblada por la mitad. En ella estaba escrita una dirección y Saint se la regreso con aburrimiento.

-Déjame estudiar.- respondió.

-Oye. Esto es algo valioso - Dijo Earth tomando la mochila de Saint para guardar la pequeña hoja -. Es la dirección de Zee.

-¿Qué? Saint estaba sorprendido.

-Oye amigo, la universidad no es el mejor lugar para tratar de hablar. Necesitas hablar con él, no lo niegues, pero para hacerlo necesitas tenerlo en un lugar donde no pueda alejarse. Y en su casa no tendrá forma de escapar.

-No lo sé. Saint se encontraba indeciso.

-¿Serás un idiota de nuevo? Le preguntó Earth.

Te enamoraste de ese chico y ese chico siempre estuvo muerto de amor por ti, no tienen nada que perder.

¡Lárgate ya! Le ordenó Earth. - Pareciendo su madre quien le dio esa orden.

Saint guardo todas sus cosas y corrió fuera de la universidad.

Tomó un taxi para no tardar ni un segundo y llegar lo más pronto, iba nervioso, en todo el camino se fue pensando en que le diría.

En como reaccionaria Zee cuando lo mirará parado frente a la puerta de su casa, esperaba que no le cerrará la puerta en la cara. O peor aun que haya conocido a alguna chica en estos meses que estuvieron alejados y que en ese momento se encontrara en su casa junto a ella y él fuera rechazado de la misma forma que lo hizo con Zee.

Los pensamientos estaban matando a Saint, no sabía que hacer. No quería hacerse daño.

Toco el timbre de la casa y la encargada de abrir la puerta fue la mamá de Zee. - Saint sintió un alivio.

La madre de Zee era una mujer hermosa de cabello negro y amable.

Saint se presentó solo como un amigo de la universidad para asegurarse de que Zee bajara a hablar con él.

Y así fue, un rato después de que su madre lo llamó Zee bajó las gradas y al pie de estas, se quedó congelado por ver a Saint ahí en la sala.

La madre de Zee volvió a la cocina.

-¿Qué haces aquí? Pregunto.

-Quiero hablar contigo. Es muy importante.

-Yo no quiero hablar contigo. Puedes irte es lo mejor. No tenemos nada de que hablar.

Así que vet. - Zee fue interrumpido, esta vez fue Saint quien lo beso, no lo dejó seguir hablando.

El beso era necesitado, Saint movió su lengua tan seductoramente que Zee no tuvo más remedio que abrir los labios y darle entrada, los dos deseaban tanto ese beso. Por un instante se alejaron y en ese momento las palabras sobraban, Saint se acercó dos pasos y por inercia, Zee rodeó su cintura, deseaban volver a juntar sus labios y fundirlos en un beso y así lo hicieron.

Saint volvió a acortar la distancia con un beso demandante y exigente. Zee no se lo negó, sus lenguas batallaron durante lo que pareció una eternidad por el control. Y cuando les faltó aire, jadearon al unísono, sus ojos abriéndose a la par y sus frentes chocando juntas.

-Eres tú el chico que me gusta y quiero.

Zee te quiero como mi novio ¿Estarías bien con eso?

Zee estaba sorprendido, jamás se había imaginado que Saint llegara a su casa con esa confesión.

-Saint... ¿Estarías bien si vamos a mi habitación? Creo que es un poco arriesgado estar aquí . - respondió el pelinegro.

Tomados de la mano se dirigieron a la habitación de Zee
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❤️💙

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