Parte 6: FISHER ISLAND

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Y otra vez sin saber nada de él, aunque me había repetido mil veces que así estaba mejor, una parte de mi quería conocerlo realmente. No sabia porque, pero me daba la impresión de que algo se guardaba para él y yo quería saber que era.
Y Justo así me Había pasado estos últimos días. En el trabajo sentía que me faltaba algo, cosa rara porque cuando el estaba en el local siempre permanecía encerrado en su oficina haciendo sabrá qué, pero yo sabía que estaba a pocos pasos de mí, a mi alcance y eso me hacía sentir segura sin ninguna razón aparente .
Cuando me defendió, hacia pocos días, me sentí cuidada; verdaderamente no sabia como enfrentarme a la situación que se había creado, pero llegó y lo resolvió a su manera y eso de alguna manera me hizo sentir bien . Enterarme por Susan , una compañera de trabajo   que el señor Rowell y cito : 'Si lo hubieras visto , estaba fuera de sus cabales , en el tiempo que lo conozco , jamas lo he visto expresar ningún tipo de sentimiento o emoción '. Los había sacado casi por los pelos cuando uno de ellos le gritó que yo era una puta calienta pollas . Cuando entró ese día a su oficina a encararme no parecía que había d vendido mi honor, todo lo contrario , me había señalado prácticamente. Así que todo me sonaba a cuento exagerado . O podría ser verdad , pero a lo mejor hubiera reaccionado así tanto si fuera yo o cualquiera de mis compañeras, pero aquí todos sabemos que ese desastre lo podía haber limpiado cualquiera de los que trabaja ahí, no tenia que haberlo hecho el personalmente . Odiaba todo esto , no sabía que pensar y no quería meterme historias en mi sistema .
¡Es mejor para mi parar de hacer conjeturas y no pensar en musarañas, el no te da ni la hora Alma! Piénsalo bien !  . Tu bórralo de tu cabeza, sácalo de tus sabanas y de tu loca imaginación ahora mismo antes que te pierdas , si lo haces será 100% tu culpa , me gritó la otra parte de mi conciencia, la que tenía los pies en la tierra, y mejor hacerle caso a esta parte , puesto que la otra estaba llena de purpurinas y mundos de arcoíris.

Era sábado en la noche y necesitaba terminar de arreglarme para un evento al cual iban mis padres y querían que los acompañara, mi padre decía que así me distraería, eran bastante conocidos allí y tenían su prestigio , a pesar de estar en otro continente tantos años , los bufetes que tenían por los cuatro estados más importantes le habían dado el reconocimiento de ser cruciales y buenos en lo que hacían , ahora con ellos aquí las ofertas a eventos llovían por todos lados . Casi siempre me quedaba en casa , pero mi padre tenía razón, como siempre ,  mi rutina apestaba y solo consistía en 4 pasos básicos. No conocía  ni la ciudad, solo sabia llegar a las 4 direcciones que tenia en mi repertorio de maps, para ser más clara , no había visto ni las playas , y eso era imperdonable aquí .

Carla y yo hacíamos FaceTime, me ayudaba a escoger un vestido para la ocasión.

-Habrá mucha gente famosa y rica buscando sexo esta noche – me decía – tu asegúrate de enamorarte esta vez de alguien de altura, como tú, algún chico con dinero y amante de los libros o tíratelos y ya está .

- haha, esa combinación es muy dificil de conseguir, el mercado esta muy mal en estos tiempos. No creas que no he tenido propuestas, en mi clase hay varios chicos que me preguntan mi número para quedar y tomar una copa, ya sabes como termina ese tipo de citas y ahora no busco nada .
-¡Alma no seas mojigata, sale y disfruta tía ! Casi haces 20 años de vida y no te has acostado con nadie aún, ya estás en la lista de 'chica rara ' . – bueno es que solo había tenido a Gorka de novio y el nunca se propasaba conmigo, era muy majo, habíamos hecho otras cosas, no es que sea del todo santa , pero nunca me pareció un buen momento para llegar a otro nivel. – Y hablando del rey de roma... - había tardado en tocar el tema - me llamó ayer para preguntarme si sabía de ti, este desesperado por recuperarte, ya sabes que me da pena .

-No será posible recuperar lo que teníamos , ya sabes que ya no sentía nada más que no fuera cariño fraternal y con eso no puedo engañarnos y mantener una relación. No para de llamarme y necesito pasar página. No quiere ver algo que claramente es muy visible en todos los aspectos. – le decía mientras me terminaba de aplicar el rosa a mis mejillas, llevaba sin maquillarme hace bastante tiempo ni arreglarme tanto para ocasiones especiales.

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