La leyenda cuenta sobre un antiguo guardián, un ser encargado de cuidar el bosque sagrado de los Dioses. Éste guardian se ha encargado de vigilar y proteger el bosque de aquellas almas impuras, almas corrompidas de entrar a ese bosque. Aquellas pers...
“Corramos por veredas en el bosque, probemos de sus frutos el sabor”
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
—¿A dónde nos llevas Quackity? — Pregunta un curioso Luzu, hace ya un rato que andaban navegando con la canoa — Has estado un poco callado, ¿Qué pasa? — Es cierto, no ha hablado desde que el castaño le dijo que va ha tener un matrimonio arreglado, claro que no se lo dijo directamente.
— Te quiero mostrar algo, pero no es nada, solo eh estado pensando — Al escuchar la voz del oji-carmín salió de su trance que le consumía lentamente, le destrozaba por dentro.
— ¿Estás seguro? Sabes que puedes confiar en mí — Quiere hacerlo, contarle lo que le desgarraba su corazón y pesares, pero no lo hará, no hasta que Luzu le diga correctamente hacerca del matrimonio.
— ¡Te juro que no es nada! Además ya casi llegamos, quiero presentarte a alguien — Intenta cambiar el tema. Parece funcionar.
— ¿Alguien? ¿Hay más guardianes aquí? ¿No eres el único? —.
— ¡Ya pinche Luzu! Puras preguntas cabrón, mejor espérate —.
Llegaron a tierra, Quackity es el primero en bajar, ayudando a su contrario ha salir de la canoa, y empezar a caminar. Su andar era tranquilo, disfrutando los sonidos de los diversos animales fantásticos que habitan ahí, todo es tan mágico, claro que, no dura siempre, al emplumado se le ocurrió una idea.
— ¡A que no me atrapas cabrón! — Empuja levemente al castaño, para salir corriendo a una velocidad suficientemente lenta cómo para que Luzu le pueda seguir el paso.
— ¡Espera Quackity! —.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
— ¡Ya llegamos! — Anuncia un azabache acelerado.
— !Pero tío! ¿Cómo tienes tanta energía? — Para su maratón y tomar un respiro, con las manos posadas sobre sus rodillas, correr detrás del más bajo es bastante agitado.
— No lo sé ¿Cómo te cansas si es que tenemos la misma edad de cuerpo humano teóricamente? — Responde de manera sarcástica.
— No todos la misma capacidad física Quacks — Levanta finalmente la vista, un enorme árbol, tenía una puerta lo suficientemente grande como para que alguien pueda entrar y unas pequeñas ventana dispersas alrededores de todo el árbol.
