[FNAF] Fidelidad [Bonnie x Toy Bonnie]

¿El final? ¿El principio?

- ¡Vamos, vamos!

Chica empujaba con fuerza al de orejas de conejo púrpura. Parecía de lo más entusiasmada, sin embargo, a Bonnie se le debió pasar el efecto de la moneda de chocolate que Foxy le dio en la noche, pues no se le veía muy energético. Seguramente se habría quedado todo el tiempo pensando en lo ocurrido. Pensar no siempre es beneficioso...

- No me empujes, Chica. Puedo caminar por mí mismo. - Dijo Bonnie con un suspiro. La rubia estaba insistiendo mucho en llevarle a la sala principal para fiestas de la pizzería.

Aunque Bonnie no lo entendía del todo, pues en la lista programada para el día, no venía nada de un cumpleaños ni de ninguna otra celebración. ¿Entonces para qué?

- Estoy segura de que te alegrarás mucho... ¡Pero apúrate! - Bien, aquellas palabras no hacían más que que aumentar su estado de confusión. Conociendo a sus compañeros, habrían preparado algún pastel o algo por el estilo, para intentar aliviar sus penas...

Efectivamente fue así. Cuando llegaron al salón de fiestas, en una de las mesas había un pastel que desprendía un agradable olor. Sin embargo no había nadie más que él y Chica. Estaba seguro de que se encontrarían allí por lo menos Freddy y Foxy, pero no. Chica le dijo que se sentase en una de las sillas.

- No es necesario todo esto. - Dijo el pelimorado sonriendo leve.

- ¿Por qué no? ¿No estás triste de que BonBon se haya ido otra vez? - Preguntó apoyándose en la mesa.

- Sí, mucho. Pero no son cosas dulces las que quiero... - Miró el postre que tenía delante.

- Entiendo. - Una sonrisa se dibujó en el infantil rostro de la joven. Para separarse un poco. - Pero Freddy y yo nos hemos esforzado mucho en ese pastelito... ¡Por lo menos deberías probarlo! Solo quédate aquí mientras voy a buscar a alguien para que te lo sirva. - Guiñó uno de sus ojos rosados y corriendo se dio la vuelta y salió del lugar.

Era muy extraño ver la sala de fiestas vacía, normalmente siempre estaba llena de niños celebrando algo. Pero en aquel día no había nada que celebrar, nada. Tampoco entendía el hecho de que la pizzería estuviese desierta, Freddy no le había avisado de que cerrarían en el día de hoy. ¿Qué estarían planeando? Pronto lo descubriría.

Intentando pensar en otra cosa mientras Chica volvía con quién sabe quién. Hundió su cabeza entre sus brazos sobre la mesa. Se sentía la cosa más desgraciada del universo. Odiaba ser un robot. Los húmanos... Se podían casar y ser felices por siempre. Él en cambio, tenía que vivir una supuesta vida alejado del ser que amaba.

- Esto... - Una voz sonó. En frente de él, pero ni siquiera se esforzó en levantar la cabeza.

No era la voz de Foxy, desde luego. Tampoco la de Chica ni de la de Freddy. Y dudaba mucho en que Golden Freddy, el sujeto del sótano le hablase así como así. ¿Entonces quién?

Cuando levantó su mirar...

- Esto... Vine para servirle en pastel. - Era el mismo Toy Bonnie. Vestía su viejo uniforme de mesero que llevaba cuando estaba abierta la pasada pizzería. Básicamente era el atuendo de camarero que usaba cuando se conocieron. Su rostro estaba rojo, incluso estando maquillado como de costumbre, se le notaba sonrojado, y esbozaba una amplia sonrisa.