Con la mirada perdida esperaba,
en realidad no sé a qué o quién.
Yo solo veía las luces que alumbraban la noche,
dentro de ellas mi rostro.
Sí, ese rostro perdido entre pensamientos,
pensamientos destructores de sueños y anhelos.
Destruyendo mi cuerpo,
mordiendo y devorando mi cordura.
Ansiosa buscando salir del lugar,
del lugar donde mis demonios saludan.
Donde mis deseos de llorar renacen.
Me sentía asfixiada.
No era yo,
era mi cuerpo consumido por el alcohol,
buscando anestesiar mis emociones,
mantenerme en el trance del sonido.
Entonces, cuando creí todo perdido;
llegó el chico de la noche.
Alejando mis demonios,
aquellos que me gritaban que huyera.
Casi muere alguien esa noche.
Como sabrás, una daga común no lo matará.
Lo harán algunas cuantas saliendo de mi boca.
Moriría de forma dolorosa...
¡Le salvaste cuando merecía morir!
Salvaste con tu sonrisa,
sí, con tu hermosa sonrisa,
al mounstro del anochecer.
Lo hiciste al posar tus cálidas manos sobre las mías,
al mirarme con tus brillantes ojos,
aquellos tan brillantes como tu sonrisa,
como tu aura...
¡Como seguir tu áspera voz,
a la par de las estrellas!
Agradeciendo al chico de la noche,
de la noche aquella...
—Dedicada al chico mentiroso que conocí durante una noche caótica. Gracias por salvarme de matar al mounstro de la noche.
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Poesía de el cielo azul
PoesieAquí podrán encontrar una gran variedad de poesías, que generalmente hablan de problemas existenciales y algunas podrían ser crueles... por favor, agradecería tus comentarios constructivos. Apenas me animo a publicar lo que escribo en una comunidad...
