𝗔𝗰𝗹𝗮𝗿𝗮𝗰𝗶𝗼𝗻𝗲𝘀˚₊· ͟͟͞͞➳❥ Antes de empezar, quiero aclarar que todo esto es ficticio, creado por mi imaginación, respeto completamente la relación de amistad que ellos llevan y no quisiera incomodarlos ni a ellos ni a ustedes <3
˚₊· ͟͟͞͞➳❥ No soy de Argentina, obviamente el modismo se me hará difícil, haré lo que pueda :').
Como todos los días, Rodrigo era el primero en llegar en el aula, al ser hijo de la maestra de primaria y subdirectora del colegio tenía ventajas y desventajas sobre el trabajo de su madre, le fastidiaba tanto en tener que levantarse temprano solo para ordenar cada sala y ver que todo estaba en el lugar correcto, claro, hacia todo el trabajo y no le pagaban, muy injusto, expresó Rodrigo haciendo unas gestos de disgusto.Dejó su mochila y algunas otras cosas más antes de ir a su lugar favorito
Lo positivo de todo este deber, era tener la librería para el sólo y sin ninguna interrupción de parte de los profesores.
Eso lo ponía feliz.
Leer novelas y poesías eran su mayor pasatiempo del menor, había logrado obtener un gran vocabulario con elegancia y estilo, también sacar una calificación alta en la materia de Gramática.
Desde pequeño su padre le regalo montones de libros con cuentos para pequeños de siete años, para ese entonces, Rodrigo ya leía libros con más de doscientas páginas, se quedaba todas las noches despierto hasta terminar un libro y después empezar con otro.
En un periodo donde los padres del pequeño comenzaron a prohibirle leer hasta las nueve de la noche, por supuesto que les encantaba que su hijo era un gran lector, pero pasar más de sus horas de dormir no le ayudaria descansar al niño de apenas siete años, hicieron un acuerdo, cada vez que Rodrigo se acostaba temprano, le compraban un libro. Un trato en donde más Rodrigo, salía ganando.
Vio el reloj marcar las ocho, guardó el libro que recién comenzó a leer y se dirigió hacia el aula, donde sus compañeros llegaban a toda prisa para jugar.
— ¿Todo en orden? — Rodrigo preguntó al ver a Fabio acercarse.
— Sip — sonrió el niño, no antes sonreír aún más al encontrar a Iván recién entrando a la sala — Carre, llegó Iván — alzó la voz con intención de molestarlo un poco.
El pelinegro los vio a ambos, hizo un gesto de saludo para luego sentarse en su respectivo asiento.
— Pelotudo... — murmuró el castaño dedicándole una mirada asesina a Fabio.
— Eu, Iván.
Rodó los ojos al saber de quien se trataba.
— ¿Si?
Nina mordía su labio mientras que se tocaba el pelo una y otra vez.
— ¿Vos salís con Carrera? — los ojos azules de la chica transmitían molestia solo al verlo.
— No — respondió con simpleza.
Al tener su respuesta, se fue sin decir nada más.
No era más que evidente que su amistad con Nina se había ido para siempre.
Las clases empezaron con normalidad, se había dado cuenta que Abel faltó al cole, por lo que Iván se sentía más calmado al no tener a alguien muy intenso a su lado.
Últimamente el chico comenzó a ser más intenso sobre todo con Iván, no dejaba que nadie con "otros intereses" se acercara a Iván (excepto con Rodrigo, quien lograba poner resistencia ante las reclamaciones de Abel).
El afecto excesivo de Abel, agobiaba a Iván, una vez, cuando ellos se quedaron solos ordenando el salón de clases, el de tez morena acorralo a Iván en una esquina, dejándolo sin salida, intento besarlo, pero, Iván al ser un poco más alto que el morocho, lo empujó con todas sus fuerzas, dándole una mirada extraña, no quiso seguir con su labor, dejando solo al quien pensó que respetaria su espacio.
Decidió no decirle a nadie, ya que aún tenía esperanzas de que Abel lo superara.
Silbo apoyando la cabeza con su mano, observando por debajo dos cartas de papel.
Parpadeó varias veces, abriendo la primera carta.
"Sólo me gustás vos ;)"
Era de Abel.
Fastidiado, tomó la segunda carta.
"Te amo una banda, me gusta todo de vos, lo inocente que sos, la hermosa carita que tenes, la confianza que nos tenemos, la sonrisa más linda y sincera que me das, ya llevamos tres meses de novios, soy el pibe más afortunado del mundo♡ "
pd: ¿nos vemos después de clases?
Rodrigo.
Al terminar de leerlo, Iván sonríe inconscientemente, decidido, voltea hacia Rodrigo, donde este escribía algún que otra tarea que el profesor Luís dejaba en el pizarron.
En un momento de darle una respuesta, acaricia la mano libre del castaño, en pequeños círculos, Rodrigo sobresalta ante tal acción.
Iván ríe tapando su sonrisa y, solamente lo mira a los ojos y asiente en muestra de respuesta.
Rodrigo también sonríe, dejando de escribir y contemplar enamoradamente a su chico.
・・・
Sin ser visto, Iván buscaba a Rodrigo entre los juegos del patio del salón, tenía tantas ganas de estar entre los brazos del castaño y darle muchos besitos en la mejilla, como era de costumbre, Iván y Rodrigo quedaban en verse en los recreos, pasaban el tiempo juntos hablando sobre pelotudeces o cualquier otra cosa que ambos les gustaba oír, se escuchaban y respondían con risas.
A lo lejos, pudo ver la cabellera castaña del chico, corrió hacia la casita de juegos donde Rodrigo estaba.
— ¡Rodrigo!
— ¡Iván! Te extrañe mucho — lo abrazo fuertemente.
Iván rió — Pero, si estamos en el mismo salón, boludito.
— Ajam, no es lo mismo — besó tiernamente la mejilla del contrario.
El pelinegro corresponde cerrando sus ojos.
— Eu, ¿sos un poeta?, me re encantó— escondió su cara en el cuello del castaño.
— ¿Recordás lo que te dije?, todas las mañanas recibirás cientos de cartas expresando mi amor por vos — tomó delicadamente la mano de Iván, entrelazando sus dedos.
Permaneciendo cara a cara, Iván le da un pequeño beso en sus labios, a lo que Rodrigo corresponde sin dudas.
Fin.
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Sweethearts ! rodrivan
RomanceComienza un nuevo año e Iván no tiene opción de comenzar una nueva etapa en la primaria Royal School. El es un niño callado y tímido, cero posibilidades de conseguir amigos o pareja, sin embargo, no se imagino que el primer día de clases el señor cu...