Jimin observó el par de medias que sostenía en sus manos, con una expresión un tanto extrañada se preguntó donde había visto unas iguales. No le tomó más de dos segundos recordar que eran las mismas que Jin metió al lavarropas el día anterior. Aquello era algo que el carismático joven solía hacer con demasiada frecuencia, su ropa siempre buscaba estar en sintonia con la de Ha-neul, haciendoles parecer dos gemelos cada vez que salían a la calle. Jimin se limitaba a reír, aunque Jin lo negara, sabía que le gustaba mucho que lo confundieron con el hermano mayor o la joven madre del pequeño alfa.
Sus mejillas se sonrojaban y respondía bromeando que aquello era cierto y que ambos eran chicos muy guapos y carismáticos, Jimin le había preguntado muchas veces el porque no intentaba encontrar a alguien y formar una familia, después de todo, propuestas de matrimonio jamás le faltaban, era alguien muy codiciado en el lugar.
Pero Jin siempre se negaba, según él, no había nadie lo suficientemente digno que le mereciera y definitivamente no estaba dispuesto a conformarse con cualquiera. Dichas palabras Jimin no las refutaria, si ese era su verdadero sentir, por supuesto que podía entenderlo y respetarlo, pero de igual forma odiaba verle tan solo cada vez que Jungkook, Ha-neul y él salían.
Siempre le invitaban a acompañarlos, pero el orgullosos Jin se rehusaba rotundamente, no deseaba entrometerse en lo que él consideraba como su tiempo familiar. Por tal motivo, esta vez prácticamente lo estaba arrastrando consigo.
Era sábado por la mañana y Jimin terminaba de acomodar sus prendas en una pequeña maleta. Jungkook los había invitado a una pequeña cabaña a pasar el fin de semana, con la idea principal de relajarse y disfrutar la piscina que ahí había. La propuesta por supuesto fue fascinante y atractiva para su pequeño hijo, quien no paro de saltar emocionado toda la semana, el adorable niño muy pocas veces podía ir a nadar o salir a recrearse, antes Jin y Jimin no habían tenido tiempo suficiente y los días de salidas eran prácticamente nulos, afortunadamente, ese ya no era el caso en la actualidad.
Ahora que el tiempo no implicaba mayor problema, tendrían todos una gran y merecida salida familiar. Jungkook, Jimin y Ha-neul no serian los únicos en ir, Namjoon y Jin los acompañarían también para tranquilidad del propio Jimin.
Esta semana había sido muy asfixiante, el ambiente en la cafetería era tenso, todo debido al estado de alerta de Jimin y a la timidez de Jungkook. Después de aquella ardiente confesión, Jimin no había podido ser capas de ignorar como antes a Jeon, además, aquel recuerdo infantil de hace unos días no había hecho más que angustiarlo con cada minuto que pasaba. Y es que, sucedía que últimamente no se sentía muy bien, su corazón se agitaba sin razón y su respiración se tornaba irregular y profusa, el cansancio golpeaba en él como si hubiera corrido en una maratón, sus manos transpiraban y el calor asfixiante le sofocada.
Estos síntomas, hace muchos años no los tenía, era todo tan extraño y repentino, muy difícil de asimilar. Jimin podría pretender ignorancia y una falsa evasión, pero el hecho era más que obvio, estaba por entrar en celo después de ocho años de síntomas inhibidos. Todo por sus emociones confusas y sus pensamientos enredados, el hecho de que Jungkook se acercara cada vez más y le perturbara hacia que su sistema reaccionará aún si él no quería.Esta incomodidad suya había sido notada por Jungkook, por ello había insistido en que a la salida se unieran Namjoon y Jin, su mirada preocupada solo aumentaba el sentimiento opresivo en Jimin.
El amor suyo ya había sido expresado, pero no pudo dar una respuesta a sus sentimientos, ¿qué debería decir Jimin? ¿realmente esta confusión había incitado el celo? No quería pensar en ello, tan pronto llegara a su destino, se prometió ir a la farmacia más cercana y comprar inhibidores, no quería que algún accidente incordiara su salida.—¿Crees que esté bien llevar el traje rosa? —preguntó Jin interrumpiendo sus pensamientos —¿o el verde? ¿Cuál le estás llevando a Ha-neul?
Jin entró repentinamente a la habitación, llevaba unas gafas de sol en la cabeza y un gran bolso violeta colgado a un lado de su cuerpo. Jimin frunció el ceño al verlo, aquel bolso estaba demasiado lleno y, si tomara en cuenta la maleta enorme detrás suyo, podría decir que Jin se saldría de control en cualquier momento
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My loyalty to you/// Kookmin
FanfictionJimin tiene el corazón roto, la única persona a la que amó en toda su vida le falló, aquella forma sucia de jugar con su corazón era más que denigrante, sobretodo para una persona que jamás tuvo nada en la vida. Ahora está completamente solo, sin di...