-Sabes que no va a salir nada bueno de esto ¿verdad? - Charlie habló por primera vez en el camino mientras manejaba siguiendo el auto de Zed - Eres tan caprichosa ¿Siquiera te interesa Zed? ¿O solo fue porque querías molestar a Lisa? -.
-Si tanto problema tienes pudiste haberte ido. Sé que haces todo lo que Alexis te ordena, no tienes que torturarte rompiendo su regla de oro-.
-Me has dicho muchísimas veces que la naturaleza no te gusta, que odias estar en el exterior...- puse los ojos en blanco y me vi obligada a interrumpurlo.
-Y lo sostengo, ¿crees que me emociona la idea de estar en medio de árboles e insectos? Se que fui impulsiva, pero entiende que no podía dejar a esa torpe chica a salirse con la suya, estaba tratando de humillarme -.
-Pudiste ignorarla y ya, tarde o temprano alguien descubriría quien eres realmente - pasamos la calle que nos lleva a casa de Alexis y continuamos recto unos minutos más hasta que volvimos a cruzar saliendonos de la carretera, nos adentramos un poco en el camino sin pavimentar hasta que el auto de Zed se apagó de pronto.
Charlie procedió a dejar el suyo a un lado.
-Bueno, es mejor de lo que esperaba, si es en la orilla - noté como sus hombros se relajaron y dejó salir un suspiro - Bien, acaba con esta mierda ya y ve con Zed - Fue lo último que me dijo antes de que saliéramos del auto.
Apenas dí unos cuantos pasos y mis converse blancas se llenaron de tierra, maldije en voz baja y al mirar el lugar lo que mas llamó mi atención fue el tronco que parecía haberse caído mucho tiempo atrás.
Zed abrió el baúl de su camioneta y sacó de ahí varias sillas plegables para luego proceder a ponerlas cerca del tronco.
Por otro lado Lucas bajó una mochila negra y una vez que Lisa, Mason y su novia tomaron asiento, abrió la mochila y comenzó a repartir latas de cervezas.
[...]
Me arrepentí de haber aceptado la invitación de Zed a los cinco minutos de estar ahí, el clima era más fresco ahí que donde estaba la casa de Alexis y yo estaba usando una pequeña blusa destapada.
Solo pude relajarme un poco cuando este se sacó una caja de cigarros del bolsillo trasero de su pantalón y me encendió uno.
La sensación del humo en mi boca logró desaparecer el frío por un rato.
Zed comenzó a hacerme preguntas sobre mi vida, los demás comenzaron a poner atención y a contar cosas sobre ellos también, hasta Lisa, quien luego de un par de cervezas se había relajado al fin.
Me había logrado integrar a su conversación, aunque no tardé en perder interés cuando se desviaron a hablar mal del resto de chicos y chicas del instituto.
Miré a Charlie quien estaba sentado en silencio y solo en el tronco viejo, tenía la mirada clavada en su celular y los audífonos puestos, estaba segura de que estaba leyendo algún cómic.
Sentí una espinita en mi pecho al verlo tan solo y aislado del resto de personas. Yo sabía que él no quería estar aquí, no le agradaban estás personas y tampoco el lugar en el wue estábamos.
Me sentí un monstruo al yo estarme incorporando en el grupo dejándolo a a él de lado.
Todos estaban entretenidos en su conversación sobre la vida sexual de Lara Seiman, así que me levanté y fii a ver a Charlie, quien al tenerme enfrente de él se quitó los audífonos de las orejas e hizo su mirada de desaprobación en cuanto vio el pequeño cigarro en medio de mis dedos.
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El Secreto Del Bosque
Teen FictionPobres de aquellos que decidieron ignorar las advertencias de entrar al bosque solos y desprotegidos, los que tuvieron suerte de regresar nunca volvieron a ser los mismos... Las historias acerca de los peligros que podías encontrar en el bosque de O...