El día empezó normal como todos los días de mis semanas, no me arregle mucho me puse un sweater gris que era como de lana pero ligero, algo suelto, un jeans rasgado doblados a la altura de la pantorrilla, unas zapatillas de animal me hice ondas en el cabello no muy marcadas que se vieran como naturales, amaba llevar el cabello así, me maquille solo lo básico, natural, tome mi bolso y Salí de mi habitación.
Era lunes y como todo lunes, todos amanecemos con menos ganas de ir a la universidad (por lo menos a mí me sucede), al mirar el teléfono tenía un mensaje de buenos días de Mau, nos deseamos buenos días y como era su día de descanso siguió durmiendo y yo como toda niña responsable desde muy temprano me fui a la UNI, cuando llego la tarde Mau me escribió avisándome que pasaría por mí ya que salía a las 6pm para ver las imágenes del bebe e ir a cenar.
Estuve muy tranquila pero cuando recibí su mensaje me preocupe, de verme bien de todo, dios pero si nunca había ido tan arreglada para la universidad, no digo que no me arreglaba pero no era la mejor. Caminé al estacionamiento de uno de los edificios de la universidad a esperar, súper nerviosa, Vero se había quedado esperando por el bus de la uní para irse a su casa.
Estaba descuidada mirando el celular cuando siento que me agarran de la cintura, me asuste muchísimo, casi que me pongo en modo defensa estilo kung fu, cuando me gire era Mauricio y le dio un ataque de risa tenía ganas de golpearlo seriamente como me iba a asustar de esa manera.
El seguía riéndose y yo me quede mirándolo se veía hermoso, después que le dio la gana de dejar de reír, se acercó y me saludo.
—Hola niña karateka ¿cómo esta? — quería reírme porque tenía una risa que provoca reírse así las cosas fueran muy estúpida.
—Hola señor acosador ¿bien y usted? —me acerque lo abrace y le dijo un beso.
—Mejor después de lo que acabas de hacer, ¿por cierto nos vamos para que no se nos haga tan tarde? — asentí y me tomo de la mano para caminar, pero yo no camine, me quede mirando nuestras las manos.
—Rosie, ¿caminaras o qué? — reaccioné y empecé a caminar, aunque era un gesto normal hasta ahorita no lo había hecho y lo cierto es que me encanta su tacto.
Cuando subimos a su camioneta me mostro su celular con las imágenes y en ese momento la realidad me golpeo. Mauricio tendrá un bebe con otra mujer y yo estoy en el medio, ya sé que eso lo hablamos pero creo que es inevitable no sentirse así.
Llegamos al restaurant y pedimos nuestra cena, mientras que llegaba nuestra comida estuvimos hablando y conociéndonos, quizás cosas tontas, pero esenciales para cualquier persona que se estén conociendo, gustos en los deportes, como por ejemplo y no coincidimos ni en el futbol, ni en el béisbol.
En un momento se estaba riendo de algo, estúpido que había dicho pero se puso las manos en la cara y le tome una foto, me pareció que se veía lindo. Luego de cancelar nos fuimos hacia su carro. Amaba tomar fotos y como cosa rara de él no tenía fotos, solo la del día que nos conocimos y la que le acaba de tomar en el restaurant, cuando iba manejando se giró para ver algo y aproveche de sacarle una foto de perfil, cuando se dio cuenta del flash, me miro con una sonrisa muy picara.
—Así que tomándome fotos sin mi permiso— la sonrisa seguía y yo sonreí con cara de perrito.
—Solo una, me gusta mucho sacar fotos y no ibas a ser mi excepción— le dije cono tono de niña.
—Debemos tomarnos una, antes de que te bajes lo hacemos— sonreí y continuamos en silencio.
Nos tomamos varias fotos, nos despedimos, salí de la camioneta. Entre a mi casa y estaban todos en el sofá de la sala hablando y me miraron como que era culpable de algo.
—Juro, que no he asesinado a nadie— levante mi mano derecha y todos rieron.
— ¿Todo bien Rosie? ¿Estudiaste? — dijo mi Tío Camilo, para mí era como un segundo padre, me cuidaba mucho, creo que soy la niña que nunca tuvo, ya que tuvo 3 niños.
—Si tío todo bien, gracias a dios entendí todo, ahorita repaso otro poco antes de dormir— había mencionado que estaba estudiando ya que me habían escrito para saber si me esperaban a cenar. Estuvimos hablando y riéndonos de cosas sin sentido, luego de cómo una hora todos nos fuimos a nuestras habitaciones, yo me fui a duchar, entre a mi habitación, me puse a revisar mis apuntes, por lo menos tenía un examen de teoría y no soy de tener que estudiar tanto para aprenderme las cosas.
Luego de hacer todo, agarre mi teléfono a ver si Mau me había escrito y tenía un mensaje
—¿Qué haces princesa? — escribió
—estaba pasando un rato con mi familia, aparte de estudiar y ducharme, pero ya estoy acostada ¿y tú? — espere.
— Que bueno que ya estés descansando, yo también estoy acostado, estaba dándote chance de que hicieras las cosas que debías hacer, para hablar un rato antes de dormir— le sonreí al teléfono como idiota, cuando me di cuenta que ya iban a hacer las 12 de la noche.
— gracias por esperarme mi príncipe, pero ya es tarde tú debes entrenar mañana temprano y yo debo ir a la universidad temprano, un besote, feliz noche——de nada nos servía estar desvelados el día siguiente.
—si es cierto preciosa, feliz noche, paso por ti en la mañana ¿sí?, porfa no acepto un no, por respuesta — pero para que me pregunta entonces.
—ok príncipe, feliz noche—dije ya que no valía la pena discutir algo ya perdido.
—Feliz noche princesa— mire la pantalla como que Mauricio estuviera mirándome justo en ese momento pensé que creo que entraría en un coma diabético de tanta dulzura que salía por mis poros, quien diría que el futbolista que me gustaba y al cual admiraba, yo le gustaba.
Me puse a hacer un collage con las fotos que tenía de él, puse la del restaurant, el carro y una donde el salía dándome un beso en la mejilla claro, pero casi no se le veía la cara, luego de que quedaran editadas, las subí a Instagram, la puse segura porque a él no se le veía la cara y bueno si quería que vieran que estaba feliz aunque no fuéramos pareja como tal.
En el comentario de la foto puse
Gracias por una noche agradable, una cena súper rica y sobre todo de tu compañía
Mas no lo mencione, al instante recibí un mensaje de mi mejor amiga que es como una hermana, Nathalie, se me había olvidado escribirle, por cosas del destino vivíamos en ciudades distintas pero siempre nos contábamos todo era la única que sabía todo de mí, ella vero y Ainara "bebe", las dos últimas las conocí al mudarme nos hicimos muy amigas y las adoro, las 3 son las personas que no son mi familia de sangre pero que me conocen muchísimo incluso más que mi familia y a las cuales adoro con toda mi alma.
El mensaje de Nathie decía que le escribiera para ya, de igual forma Ainara, sé que me había metido en serios problemas pero es que se me había pasado todo ha pasado tan rápido, ya ni a vero le había contado sino hubiese sido por verla hoy en clase, Ainara se había cambiado de carrera así que no nos veíamos muy a menudo.
Primero le escribí a Nathie:
"si lo acepto no te he contado, pero lo juro, mañana lo hago tengo mucho sueño, te adelanto de que si sabes quién es, te amo, mañana te llamo y nos ponemos al día"
Luego escribí el mensaje para Ainara
"bebe, mañana te cuento nos vemos y vamos al cine, no he ido, tengo bajas de películas, aparte de que debo contarte todo, si lo conoces antes de que empiecen las preguntas"
Luego de eso apague el celular rápido, para no leer las respuestas y poder ir a dormir porque si no estaría pegada hasta la madrugada y ya tenía mucho sueño. Puse a cargar mi teléfono, luego me fui a dormir debía ir temprano a clase a eso le añaden de que Mauricio pasaría por mi debía levantarme un poco antes y dedicarme a arreglar un poco más.
ESTÁS LEYENDO
Un Gol Directo al Corazón
RomanceSi me describo diría que soy todo lo contrario a cliché, pero no hay que descartar nada por más que nos suene sumamente loco. Es aquí donde me pondría a pintar todo una historia de esas fresas que debo aceptar me encantan y aunque yo por el contrari...