The other woman // Yuyeon G!P

IV

Ambas se arreglaron lo mejor posible, tomaron sus cosas y salieron del gran edificio para subirse al deportivo que la coreana manejaba, una vez adentro volvieron a besarse.

-¿Dónde queda tu casa? - Soyeon preguntó una vez que se separaron, Yuqi le dio la dirección con un tono nervioso -Eso queda lejos de aquí, que bien que tenemos el auto - dijo divertida su jefa, la china sonrió de forma nerviosa.

Soyeon encendió el automóvil y salieron del estacionamiento, encendió la radio para que el camino no se hiciera tan aburrido -¿Te gusta la música? - intentó generar una conversación pues notaba a la asistente bastante nerviosa, incluso más que cuando estaban a punto de tener sexo, Yuqi asintió tímidamente.

Soyeon le ofreció su mano para que la tomara, la chica lo hizo aún estando muy nerviosa -¿Por qué estás tan nerviosa? ¿te has arrepentido de esto? - intentó no sonar molesta pero realmente no logró mucho pues algo que odiaba era a la gente indecisa.

Yuqi notó eso -No es eso señora- digo... Soyeon - no se sentía cómoda llamando a su jefa así pero ya que eran amantes pensaba que tenía que acostumbrarse, Soyeon la miró brevemente con una ceja alzada antes de regresar su vista al camino.

Yuqi miró a sus manos mientras volvía a jugar con éstas -Mi casa no es para nada lo que usted quisiera o imagina, realmente me siento apenada porque siquiera la vea - miró de inmediato a la coreana que había soltado una pequeña risa, creyendo que se estaba burlando de su situación por lo que rápidamente sintió sus orejas calientes por la vergüenza y pequeñas lágrimas inundando sus ojos.

En el semáforo Soyeon volteó a verla encontrándose con ese cambio tan repentino en su asistente por lo que se alarmó. Rápidamente tomó su rostro para limpiarle las lágrimas -Oye no llores, no me estaba riendo por eso - besó sus mejillas húmedas con cariño esperando que así dejara de llorar. Cuando por fin dejó de hacerlo algunos autos comenzaron a pitarle a la coreana pues el semáforo había cambiado a verde.

-No quise reírme, es que encontré gracioso que te pusieras así de nerviosa por eso y no por haberte acostado conmigo - explicó, Yuqi se sintió aún más avergonzada pues ahora había llorado.

-Ya casi llegamos, dime si es por aquí - anunció la mayor, Yuqi asintió.

Siguieron avanzando hasta que la china divisó el complejo departamental donde vivía -Ahí enfrente - señaló, Soyeon asintió, buscó un lugar donde estacionar el vehículo y antes de bajarse la china tomó la mano de su jefa -Mis vecinos son muy problemáticos pero me conocen bien, no te asustes - la mayor asintió.

Ambas bajaron del vehículo y la coreana le puso la alarma, se adentraron al complejo habitacional y un grupo de tipos se les acercaron, mirando sobre todo a la mayor -Wow Yuqi ¿quién es la ricachona? - le preguntaron rodeándolas, Soyeon los miró con el ceño fruncido en cambio la otra solo suspiró.

-No les interesa, solo déjenos en paz - los chicos rieron ante eso -No nos digas que es tu novia, nunca traes a nadie aquí porque te apena - dijo uno mientras se reía, Yuqi se sonrojó al escuchar eso -C-claro que no, ella y yo no somos nada -

Los hombres siguieron riendo mientras observaban las marcas del fino traje y reloj de la coreana, pero se dispersaron un poco dejándolas seguir caminando -Ni se les ocurra robarle algo a su deportivo porque ella puede meterlos a todos a la cárcel - les advirtió cuando los observó irse.

Llegó a su departamento, sacó sus llaves y abrió la puerta -Quiero disculparme antes de que entre porque esto no es un lugar digno para alguien como usted - la coreana la tomó por la mano dándole seguridad.

Ingresaron al departamento y Soyeon observó todo, lo principal que notó fue que el comedor estaba en la cocina y la sala era pequeña con muebles baratos, dejó su portafolios en uno de los pequeños sillones y siguió prestando atención a los detalles de la casa. Se quitó el saco pues adentro hacia calor y la menor corrió para colgarlo en el gancho para abrigos que tenía.