GreenTea [IzuOcha]

Chapter 12

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Advertencias del capítulo: (Lenguaje soez)

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CHAPTER 12

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SLEEPY KISS

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La vida de los héroes era difícil, sabía en lo que se metía cuando decidió que aquello era lo que más deseaba, o al menos eso creyó ingenuamente.

Nadie le había dicho nunca lo que realmente significaba, tampoco le advirtieron las consecuencias que tendría en su vida con el paso de los años.

Nunca le informaron que algunas veces tendría que vivir más en su oficina que en casa, que en ocasiones olvidaría las fechas importantes, que no visitaría a su madre en su cumpleaños por una emergencia y que tendría que salir en medio de la cena de compromiso de su mejor amigo ante un imprevisto.

Nadie nunca le dijo que se perdería todos los momentos importantes de su vida y la de los suyos.

Miró el reloj de mano por enésima vez ignorando la voz del chico que le daba el reporte de su misión. El muchacho parecía nervioso, pese a todas las veces que le había dicho que actuará con naturalidad. Aunque lo entendía, porque en el pasado le había sucedido igual. Jamás pudo ver a All Might, como algo menos que el fabuloso héroe que era y claro, el símbolo de la paz, y aunque aún se sentía varios pasos atrás del camino que su mentor tomó, pese a que muchos decían que había logrado incluso superarlo.

Si eso solo le permitiera llegar temprano a casa alguna vez.

Sintió como la presión en su pecho volvía y miró el reloj una vez más, notando que los minutos parecían transcurrir con deliberada rapidez.

-Y eso es todo señor - balbuceo temblorosamente el chico.

Izuku suspiró y forzó una sonrisa pasiva en los labios.

-Deku, solo Deku.

-Claro que si, señor Deku... digo, señor... digo...

Y el peliverde volvió a sonreír.

[•••]

Eran las nueve de la noche cuando terminó de revisar todos los informes pendientes que se le habían acumulado esa semana. Dejó los papeles a un lado, se levantó de la silla notando la tensión en su trasero por las horas en la misma posición, y apagó las luces antes de cerrar su oficina.

Tomó su celular y mandó un mensaje rápidamente.

"Estoy yendo a casa"

Una sonrisa se deslizó en sus labios cuando la respuesta fue inmediata, y sintió como pequeñas y curiosas mariposas revoloteaban en su estómago.

Pasaría por una licorería, conseguiría el mejor vino de todos, talvez algunos bombones de chocolate y de camino a su apartamento, daría una vuelta por la floristería.

Necesitaba mochis también, eso sin duda.

Su humor se renovó y salió de la agencia saludando a todos con una gran sonrisa.

Se acercó a su auto e ingresó, usualmente intentaba no usar sus poderes más de lo necesario y el medio de transporte le permitía acortar distancias casi con la misma velocidad. Estaba arrancando cuando lo advirtió, la sensación ligera, pero perceptible que hizo que los vellos de su nuca se erizaran.