Mis ojos se abren un poco tras haber sentido un gran golpe en mi cabeza que hace que todo me dé vueltas y no pueda ver con claridad.
-¡LLAMEN A UNA AMBULANCIA! Mi niña te pondrás bien aguanta... - solo siento mis ojos pesados y de nuevo la oscuridad me envuelve por completo.
Narra Ares:
Después de bastante tiempo intentando quitarme de encima a Laura, no fue nada fácil, me tuve que meter rápido en mi propio apartamento y cerrar con llave mientras ella golpeaba la puerta fuerte gritando mi nombre después de confesarla que estaba enamorado y amaba solo a Mía.
Llame al conserje y aunque Laura se puso como loca la arrastro sacándola teniendo que llamar a la policía para que la echara totalmente a la calle.
Como volviera no dudaría en pedir una orden de alejamiento, no iba a dejar que estropeara lo que estaba empezando a construir con Mía.
Hablando de Mia estuve centrado en terminar todo el tema de los exámenes cuando terminé me hice la cena mientras veía la televisión hasta que me dio por mirar la hora viendo que ya era muy tarde y aun no sabía nada de ella desde que se fue.
Me metí en mensajes y comencé a escribirla.
Mensaje para Mía:
Nena... ¿Cómo va la cena? No quiero molestar, pero es tarde y no me escribiste ni nada
Le doy a enviar el mensaje viendo que le llegaban, pero la última conexión fue antes de que se fuera a la cena.
Tal vez la tenían tan entretenida presentándola gente que no tenía ni un segundo para revisar los nuevos mensajes, es lo que solía pasar en las cenas empresariales.
Sigo viendo la televisión por un rato metiéndome en mensajes veinte mil veces comenzando a ponerme intranquilo.
Mi pierna derecha no podía parar de moverla metiéndome de nuevo en su chat volviendo a escribirla preguntando si todo estaba bien, pero seguía sin tener respuesta.
Con eso ya no aguanto más y marco su número poniendo él altavoz escuchándose los primeros tonos hasta que sale la vocecita en la que decía que estaba apagado o fuera de cobertura.
Volví a llamarla varias veces más, pero seguía saltando con que estaba apagado o fuera de cobertura.
Mía nena me estás empezando a preocupar, no contestas mis mensajes ni tampoco las llamadas, no dudes que si pasa algo o te sientes incomoda por lo que sea en la cena me escribas y estaré allí en menos de diez minutos
Le dejo un mensaje de voz cuando salta él pitido, llamaría a su padre, pero no tenía su número, voy a nuestro cuarto comenzando buscar entre sus cuadernos y sus cosas por si encontraba él número de su padre apuntado o algo.
Pero nada, cojo un cuaderno azul que tenía sacudiéndole por si caía algo hasta que veo como una hoja doblada termina cayendo al suelo.
Me agacho cogiéndola abriéndola comenzando a leer lo que ponía.
Hola Mia, soy yo de nuevo, no sé si encontraras esta nota ya que las que te daba en clase las terminabas tirando a la papelera, sí te vi como las tirabas, no soy un experto ligando con chicas y menos contigo que tú eres muy diferente a todas, no sé cómo expresarme y que más tengo que decirte porque ya sabes que me gustas demasiado.
No quiero que estemos mal y sería mucho pedirte que solo fuéramos amigos cuando yo tengo sentimientos hacía a ti, pero tú no quieres ni eso.
Tenemos tantas cosas en común Mía, no se tal vez si me das una oportunidad podemos comenzar por una amistad, aunque me cueste, salir pasarla bien conocernos más y tal vez solo tal vez en un futuro podrías terminar enamorándote de mí como yo lo estoy de ti.