No había pasado mucho cuando Iida se enteró que Aiko se había salido de la estación de policía, más específicamente se había escapado. Al inicio trataron de localizarla pero desistieron porque ¿quién extrañaría a una chica como ella?, Ni siquiera se pudo localizar su origen, ni familia.
Dos días después de esta noticia Iida la vio sentada en unos escalones de un puesto cerrado, era de noche y estaba lloviendo a cántaros, pero logró reconocerla. Sin dudar estacionó su auto cerca, tomo su paraguas y fue hasta ella.
– Pensé que te habías perdido.
Al escuchar esa voz familiar Aiko alzó la mirada y sonrió a su rescatista.
– Bueno, la idea era perder a la policía en realidad.
– Estás empapada.
– Solo son unas gotas.
No eran solo unas gotas. Ella llevaba una falda corta y una blusa de manga larga, pero la falda estaba totalmente mojada, al igual que su cabello y su espalda, sus zapatos eran más bien unas sandalias, por lo que aunque ella no lo admitiera los pies y piernas se le estaban congelando.
– Ven vamos.
– A dónde? De nuevo con la policía? No gracias.
En ese momento trató de convencerla, de que sería lo mejor para ella, pero al ver qué no iba a ser fácil decidió tratar con otro camino.
– Bien, sino ven a mi casa o terminarás con hipotermia con esta lluvia.
– Wow, ahí vives?
La chica iba en el asiento del copiloto, Iida le había dado un abrigo, le quedaba grande pero la calentaría un poco.
– Si, en el 7 piso.
– En el séptimo? Es porque el 7 es de la buena suerte?
Iida no pudo evitar reír por su comentario.
– Algo así.
Subieron ambos hasta el departamento del héroe y ella recorrió con la mirada todo el lugar.
– Eres muy ordenado.
– Me lo dicen seguido.
– Por lo poco que te conozco me lo creo 100%.
Ambos se dedicaron una sonrisa de complicidad.
Tenya Iida:
Le indiqué a Aiko dónde estaba el baño, le dije que se metiera a bañar para que no se resfriara, no tenía ropa de mujer pero en el peor de los casos podría pedir que le compraran alguna. Ella se negó rotundamente a qué le comprará ropa, y no quería aceptar ducharse, pero después de una ronda de estornudos ella misma acepto que sería lo mejor.
Estaba buscando alguna prenda que pudiera prestarle cuando escuché que preguntaba algo desde el baño.
– Cómo dices? – me acerque un poco a la puerta para oírla mejor.
– Preguntaba si no tenías un shampoo.
Había olvidado poner el shampoo nuevo en el baño, le dije que esperara en lo que iba por el. No tarde mucho y toque la puerta, a lo que ella respondió con un "adelante".
Aiko estaba dentro de la bañera, el agua era clara, pues aún no había utilizado shampoo ni jabón. Se podía ver todo el cuerpo de Aiko desnuda con bastante nitidez.
Me quedé congelado, más porque ella se incorporó un poco al verme entrar, esto hizo que sus pechos sobresalieran del agua.
- Ah gracias.
Extendió una de sus manos para que le pasará el shampoo pero reaccioné ante sus palabras, se me cayó el shampoo y salí de inmediato de ahí usando mi quirk, casi azote la puerta, solo escuché un "estás bien?" De parte de ella, pero estaba tan avergonzado de mi mismo que no podía ni hablar.
Me recargue en la puerta del baño y me deje caer, mantenía mis manos en mi boca y traté de calmarme.
No era la primera vez que veía el cuerpo sin ropa de una mujer, pero si la primera que la veía en la bañera, era más vergüenza lo que sentía. Aún así, no quería pensar en eso pero dios santo, el cuerpo que tiene.
Me puse de pie de golpe y me reprimi severamente por 1. Entrar así cuando ella se estaba duchando y 2. Por estar pensando cosas así del cuerpo de ella.
Deje unas prendas sobre la cama y salí de la habitación.Pedí algo de comida a domicilio para la cena y me quedé sentado en el sofá con los ojos cerrados, tratando de pensar en otras cosas, pero los pensamientos intrusivos de ella en la bañera o de sus piernas me distraían cada dos segundos.
– Seguro estás bien? Estás sudando – escuché sus pasos y su voz acercándose.
– Si, no pasa nad...
Cuando abrí mis ojos para verla ella aún seguía envuelta en una toalla.
Esta vez actúe más rápido y desvíe mi mirada.– Te había dejado ropa encima de la cama.
– Ah si? Es que te llamé desde el baño y al ver qué no venías decidí salir y no me fijé en la habitación.
Se sentó a mi lado en el sofá y yo trate de no tensarme en exceso.
– Que te pasa? – se acercó un poco más a mi y de reojo pude notar como con una de sus manos sostenía la toalla para que no se le cayera– Nunca habías visto a una mujer desnuda?
– N-no es eso.
Se hizo un leve silencio y ella se levantó del sillón.
– Bien, iré por la ropa que dijiste.
En cuanto escuché la puerta de la habitación cerrarse me relaje un poco, aunque no duró mucho pues me percaté que traía una erección en ese momento. Me levanté y mientras me regañaba a mi mismo, de nuevo, traté de acomodar mi pene para que no se notará lo erecto que estaba.
Dios mío Iida comportate.
Seguía de pie cuando Aiko salió del cuarto ya vestida con el pants y la playera que le habia dado.
– Te vez bien.
Me sonrió, pasó de largo de mi y se sentó de nuevo en el sofá.
– Me queda algo grande, pero tu ropa es cómoda.
Fuí con ella y me senté a su lado. Conversamos de mis inicios en la UA, de mi Kosei y de como conseguí el lugar donde vivo. A veces trataba de desviar la conversación a ella, que me contara cosas de su vida, pero sus respuestas eran que no recordaba o directamente se cerraba y cambiaba de tema.
Cuando llegó la cena comimos juntos y después le dije que se quedara a dormir en mi cuarto y yo en la sala. Así nos acomodamos y pensé que había sido un gran avance, que así al día siguiente me costaría menos trabajo llevarla con ayuda o al menos tratar de llevarla con el oficial.
Pero a la mañana siguiente ella ya se había ido.

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Unholy
FanfictionTenya Iida es un héroe reconocido por su responsabilidad, decoro y rectitud, además está pronto a casarse. Un matrimonio arreglado por parte de su familia, es lo que debe hacer, lo correcto. Pero ¿Qué pasará cuando conozca a otra mujer que lo saque...