Damian Wayne y tu ~secretos~

Capítulo 27:

Narra__:

Estaba en la sala de espera viendo cómo mi papá firmaba los papeles de mi alta, mientras Damian me traía un café.

Damian:Ten es tu favorito.

__:Gracias.

Papá:Listo podemos irnos.

Salí del hospital mirando a lo lejos el auto, Alfred estaba con una sombrilla afuera del hospital.

Alfred:Me alegro de verla señorita.-sonrió.-

Me limite a solo sonreír en respuesta,subí al auto la mañana era terriblemente fría caían unas cuantas gotas de lluvia. El camino fue silencio e incómodo, yo no quería hablar y ellos no querían preguntar eso me alivio.

En cuanto llegamos baje y subí corriendo a mi habitación, ignorando a todos, mi cuarto estaba ordenado y limpio, busque mi teléfono tenía muchas llamadas perdidas, las ignore, conecte mis audífonos y escuché música. Traigon no desaprovechó la oportunidad de recordar lo estúpida que era como para no ser capaz de matarme o si quiera defenderme.

Papá subió media hora después 0ara decirme que tendría que tomar terapia y tenía que ir a la comisaría a denunciar lo que me paso.

__:como si eso borrará de mi memoria lo que pasó.

Papá:Se que no será fácil pero tienes que intentarlo, todos te vamos a apoyar.

__:Esta bien-camine hacia la ventana-.

Escuche que salió de mi habitación, todo el día estuve deprimida escuchando música mirando por la ventana. Dick me dijo que la cena estaba lista.

Mientras bajaba note que Alfred había preparado mi comida favorita, ese olor a lasaña casera invadió toda la casa.

Llegue y todos estaban serios mientras el ambiente era terriblemente denso e incómodo. Alfred sirvió la cena, todos comimos en silencio, nadie podía romper el silencio.

__:No quiero que me tengan lastima,esto fue solo mi culpa.

Todos me miraban inexpresivos.

Jason:Nada de lo que paso fue tu culpa.

Su voz apenas fue audible, fue un susurró.

__:No quiero hablar de eso y tampoco quiero su lastima.

Después de eso, no volví a comer con ellos, no volví a salir a patrullar y tampoco quería ir a la escuela pero según mi terapeuta tenía que retomar mi vida.

Damian me esperaba para irnos a la escuela,me sentía tan mal por no poder besarlo o si quiera darle la mano sin que me incomodara o me trajera recuerdos.

Me subí al carro tratando de no hablar, no quiero esa pregunta absurda sobre su estoy bien cuando claramente nunca lo eh estado.

Llegamos a la escuela me baje y camine lo más rápido que puse hacia el salón esquivando a todo el mundo, me senté en mi lugar con mis audífonos tratando de evitar que alguien me hablara.

Aurore y Cristal buscaban hacer contacto visual conmigo para poder hablarme cosa la cual evite a toda costa incluso evite a Damian durante todo el día.

En el descanso me fui lo suficientemente lejos de la escuela para no tener que hablar con alguien. Me senté en el césped mirando hacia la nada hasta que se me ocurrió visitar el orfanato quería ver a los chicos tenía muchísimo tiempo sin verlos. Tome mis cosas y camine rápidamente hacia el orfanato.

De camino pase a comprar algunos dulces y cosas que podría llevarles a los chicos, cuando estaba pagando un camión de bomberos paso a toda prisa junto con personas que corrían.

Corrí un poco, conforme más me acercaba a las personas pude escuchar de donde provenía el incendio.

El fuego proviene del orfanato-dijo un señor mientras corría con una cubeta-

Tire todas las cosas que traía y corrí hacia el orfanato,cuando llegue los bomberos estaban sacando a los niños  llevándolos hacia las ambulancias, corrí buscando a Betty. Cuando la vi estaba ayudando a apagar el incendio.

___:Betty, ¿donde están los chicos?

Betty:No lo sé, cuando el incendio comenzó yo estaba afuera.

Corrí entre las ambulancias buscando a los chicos en ninguna estaban ellos, los bomberos hacían su mejor esfuerzo por apagar el fuego pero era inútil no cedía.

Todos corrían, las sirenas de las ambulancias y patrullas, los niños gritando, las personas corriendo todo me parecía una maldita pesadilla.

Busque una manta, la moje y me la puse encima corriendo hacia una ventana, el fuego estaba por todos lados corrí hacia donde dormíamos pero no había nadie busque y busque por todos lados y ellos no estaban.

Me estaba quedando sin oxígeno, salí agachada hacía la calle y entonces mi corazón se aceleró cuando vi como cerraban bolsas para cadáveres, me acerque pidiendo que por favor no fueran ellos, pero eran ellos. Me aferre a la camilla llorando y maldiciendo a todo.

Papá junto con Alfred y los chicos llegaron a la forense, Betty sufrió un paro respiratorio, la mayoría de los niños habían sufrido quemaduras de segundo grado e intoxicación, yo tuve que reconocer los cuerpos de mis amigos.

Betty se recuperó 4 días después, los niños fueron enviados a diferentes orfanatos, mi papá organizó un funeral para mis amigos. Durante el funeral no podía llorar, no podía aceptar el hecho que no pude despedirme de ellos, ni poder verlos.

La escuela se estaba volviendo un infierno, cuando caminaba por los pasillos me parecía verlos, no podía comer sin poder recordarlos.

Estaba en el baño llorando a mares aprovechando que todos estaban en clases, espere unos 15 minutos antes de salir. No podía pasarme nada peor que esto.

Caminaba por los pasillos mientras todo el mundo me veía y me señalaba, escuchaba como susurraban hasta que un chico se acerco a mi.

Xxx:Resulta que eras una zorra Wayne y no habías dicho nada al respecto.

Puso su teléfono en mi cara, me petrifique al mirar el video, era yo... esa noche.

Xxx:Podrías recrear el video conmigo-me tomo el mentón-

Quería golpearlo, quería matarlo, pero no pude simplemente me quede ahí parada sin hacer nada. Damian llego corriendo.

Xxx:¿Que se siente saber que tu novia es un zorra barata?

Damian le dio un puñetazo comenzando una pelea, yo seguía inmóvil incapaz si quiera de hablar hasta que llego el director a separarlos. Damian como es de esperarse no tenía ni un solo rasguño mientras él otro chico casi tiene una contusión cerebral. Estábamos esperando a que papá saliera de la dirección en cuanto salió camine rápido hacia el auto no quería oírlo,no quiera preguntas, no quería saber nada.

Y lo logre no pregunto nada, ni si quiera hablo todo el camino, estacionó el coche y subí corriendo a mi cuarto evitando a todo el mundo, quería morirme ahí mismo, parecía que todo lo que tuviera contacto conmigo terminaría mal.