Love me or Hate me • [BrightWin]

²· Bienvenido

Bright sabía que lo que había dicho ese día fue muy grosero de su parte, pero estaba tan cegado por el enojo y la ira que simplemente lo dijo sin pensarlo, ahora se arrepentía de haber dicho eso.

-Bright, Dew ya me contó todo. Estuvo mal lo que dijiste.

Bright quería llorar, ¿acaso no lo podían dejar en paz si quiera un rato? Se sentía demasiado mal como para tener que soportar regaños de sus amigos.

-Es que no puedo creer que hayas dicho eso cuando antes decías todo el tiempo que era el amor de tu vida. De todos modos, se que aquello que dijiste fue mentira, tu no serías capaz de decir eso. Te conozco.

Bright quería llorar más, con Nani no podía mentir pero esta vez tenía que hacerlo, no queria que nadie supiera eso. Así que tenía que fingir que no le importaba nada de lo que tuviera que ver con Win.

Sabía que en este momento todos estaban en la fiesta de bienvenida de Win, incluso Dew. Claro, el no podía faltar en esa fiesta y sabía que Dew quería que fuera a esa maldita fiesta.

Le quedó más que claro cuando una llamada de Dew entró en su celular, ¿tanto quería Dew que fuera a esa fiesta? Esta bien, le iba a dar el gusto de verlo ahí.

Salió enojado de su cuarto, sin importarle la presencia de Nani a su lado.

-¿A dónde vas?-Bright no respondió.-¿Entonces de verdad ya no te impor-

-Si todos le estan dándole la bienvenida a Win, ¿por qué yo no?-le interrumpió Bright y salio de la mansión, se dirigió a su auto deportivo.

Sabía que iba manejando muy rápido y que tal vez lo multarían pero no le importo en ese momento, aflojo un poco su corbata porque el aire comenzaba a faltarle.

-Bienvenidos a todos, es un placer tenerlos aquí. Amo volver a casa. Estoy demasiado feliz por volver después de 5 largos años, puedo ver que han cambiado muchas cosas.

Bright se sentó alejado de todos y comenzó a escuchar a Win. El rostro de Bright mostraba desinterés pero por dentro su corazón se aceleraba al volver a verlo, jamás pensó que llegaría ese día. Win se veía igual que antes, esos ojos cafés no tan oscuros, su cabello ahora estaba un poco más largo, sus labios esponjosos y esa sonrisa que podía alegrar el día de todos. Lo único que había cambiado, era que ahora se veía como una persona exitosa, tenía ese porte elegante y atractivo a la vez.

-Muchos me preguntaron que fue lo que paso conmigo, muchas gracias por preocuparse. Lamentablemente, es algo de lo que no me gustaría decir al público, ya que eso fue pasado y como muchos dicen, lo del pasado se queda en el pasado. Así que ya no es necesario hablar de eso. Ahora, estoy aquí para tomar el mando en la empresa de mi difunto padre, el quería que fuera el futuro jefe de aquella empresa. Les prometo a todos que no los defraudaré y haré de la empresa, una mejor.

Todos aplaudieron, incluso Bright aplaudió. Después de aquel discurso, Bright vio como varias personas se le acercaban para hablarle y otras se iban al gran salón donde sería la fiesta.

Después de que Win pudiera librarse de todas las personas de su alrededor, se dirigió a una habitación apartada de la fiesta, donde lo esperaba un hombre al que había contratado.

-Asi que el joven Vachirawit se casará en un mes... Necesito que investigues más sobre su prometida.

Dijo Win después de haber visto la información que aquel señor le había proporcionado, habia escuchado algo sobre eso pero pensó que serían rumores.

-No se preocupe, déjamelo a mi. Solo... Dígame cuanto costará esto.

Win sabía que le preguntaría en cualquier momento eso, soltó una risa nasal y negó con la cabeza.

-Tus hijos estarán en la mejor escuela de Bangkok, tu familia estará asegurada y tu bar seguirá abierto.

El hombre se quedo pensativo, pero Win sabía muy bien que no se iba a negar, puesto que era una muy buena oferta, solo un idiota rechazaría eso.

Bright llegó al salón, obviamente se esperaba que este fuera grandísimo, las luces tenues estaban por todo el lugar, había gente bailando en la pista y otras conversando en cualquier lado. Bright se sentó en un lugar lejano y para su mala suerte, Win estaba cerca de él. Estaba junto a una chica que claramente le coqueteaba. Bright suspiro, no sabía ni que hacía ahí asi que decidió irse pero la voz de Win lo detuvo.

-¿Qué haces aqui? Escuche que te vas a casar, no tienes nada que hacer aquí.

-Si, me voy a casar.

-Durante la fiesta, nadie ha dejado de hablarme de eso, fastidio.

Win suspiró.

-Mhm, ¿quién pensaría esto? Resultó que voy a terminar casandome con otra persona...

-No me importa con quien te vayas a casar-dijo Win bruscamente, quería tener un poco de paz y él que haya vuelto a ver a Bright y su primer tema de conversación sea su boda no ayuda. Simplemente todavía no creía que tenía a Bright enfrente suyo, sabía que tal vez se lo cruzara pero no creyó que fuera tan pronto. Admitía que se puso demasiado nervioso y que las piernas le temblaban levemente, pero no es algo que no pudiera solucionar.

-¿Por qué te intentaste suicidar?

Win quedo perplejo, le sorprendió bastante que le haya preguntado eso de la nada y el que mencionara aquel tema le daban ganas de llorar, esa parte había sido de las peores, el solo volver a recordarla lo hacía querer irse a llorar, pero de nuevo disimulo que no le lastimaba.

-¿Cuál era la necesidad de hacerlo?

Win quería gritarle, quería golpear esa cara que parecía importarle poco lo que pasara a su alrededor, quería sacarlo a patadas, quería demostrarle lo mucho que sufrió por el error que el mismo cometió, quería hacer muchas cosas. Pero... más que nada quería abrazarlo, abrazarlo con fuerza para que no se fuera de su lado como él lo hizo hace 5 años, quería llorar en sus brazos, quería que todo fuera como antes pero al mismo tiempo no.

Bright al no obtener respuesta, suspiro y se paro de la silla, puso una mano en su hombro y dijo:

-Solo para decirte que desde ahora tú y yo no somos amigos. Bienvenido a Tailandia, Metawin.

Win retuvo sus lágrimas y se fue como si nada hubiera pasado.

Espero que seas feliz con tu futura esposa pero no tan feliz como lo fuiste conmigo.