Hacía una semana que me había mudado a otra ciudad por que me han contratado en una nueva empresa. Voy de camino al metro. Estoy harta ya de todo y estoy deseando morirme ahora mismo. Mi ex novio me forzó y me maltrataba, lo mejor que pude hacer fue dejarle y seguir con mi vida. Me he enterado de que han pagado su fianza y esta fuera de la cárcel. La verdad es que estoy un poco asustada pero supongo que es normal después de todo.
Me quedé mirando las vías esperando a que pasara el tren cuando lo vi de lejos. Empecé a quedarme sin aire. Empece a ponerme nerviosa y a llorar. Noté un fuerte dolor en las rodillas, me había caído al suelo. Noté como alguien me cogía y me apoyaba en la pared y me refrescaba la frente con un pañuelo mojado por una botella de agua.
-Por favor respira.-decía. Era una voz masculina. Una voz dulce que me hacía tranquilizarme.-¿Me oyes?- me preguntó.
-Si...-dije silenciosamente.
-Me llamo Álvaro y me voy a ocupar de ti si te parece bien.-dijo aquel chico.
-Vale.-dije mirándole a unos ojos verdes y una amplia sonrisa. Me incorporó en uno de los bancos y se sentó a mi lado y me dio agua.
-¿Necesitas que llame a alguien?-dijo.
-A mi jefe, que no quiero que me despida. Me harías un gran favor.-dije dándole mi móvil.
-Le diré que has tenido un accidente pero que estas bien. ¿Vale?-me dijo.
Álvaro se alejó un poco para hablar con mi jefe cuando vi a Tom mi ex acercándose a mi a toda velocidad. En cuanto llegó a mi me soltó una bofetada.
-Eres una puta.-me dijo alzando la voz
-Tom dejame ya en paz.-dije empezando a llorar. Álvaro se acercó y paro la siguiente bofetada .
-Pero tu quien te crees para pegar a esta chica.-dijo dándole un empujón.
-Yo soy su novio.-dijo Tom
-Tu no eres nadie. Ahora su novio soy yo a si que largo de aquí si no quieres que te parta la cara.-dijo Álvaro.
Yo empecé a llorar y a llorar cada vez mas y a ponerme mas nerviosa. Álvaro se acercó a mi y me cogió de la cara y me examino por si tenia algún rasguño.
-¿Estas bien?-me dijo.
-Si...-dije abrazándole sin darme cuenta.
-No me has dicho tu nombre.-dijo
-Soy Marta.-dije separándome.
-Marta, ¿quieres que te acompañe a casa?-me dijo levantándome.
-Me harías un gran favor. pero, ¿te puedo pedir una cosa?- le dije.
-Si claro.-dijo sonriendo.
-Quédate conmigo durante el día, tengo miedo de que vuelva...
-Dalo por hecho.-dijo cogiéndome de la mano.
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ByEvans
