Capitulo 5 Día 2 (¿Que es real?)

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Estaba despertando, principalmente por qué no soportaba mi espalda y por lo vivido en la madrugada, me senté donde estaba acostado e intenté levantarme, pero no sentía del todo mis piernas, mire mi mano y estaba temblando. Aún seguía teniendo un miedo increíble, era una sensación en el pecho que no lograba explicar, todo lo ocurrido seguía impregnado en mi mente, la sangre, el cuerpo, la criatura y su sonrisa; era como vivirlo una y otra vez.

Estaba paralizado mirando a la nada intentando digerir la situación y que hacer, me encontraba perdido totalmente en mis pensamientos en total silencio sin darle importancia a mi alrededor, pude escuchar como me susurraron en el oído —Acaso… ¿Tienes miedo?— un escalofrío gigantesco me recorrió de pies a cabeza y pude sentir mi cuerpo estremecerse ligeramente, volteo rápido para ver sobre mi hombro y notar qur no habia nadie, gracias a eso entre de nuevo en razón y respire profundo para evitar entrar en pánico.

—Mierda— dije entre dientes y logré reunir fuerzas otra vez para levantarme y poder buscar entre mis cosas mi medicamento. Nunca me había descuidado en tomarlo, pero con todo lo que pasó, omití el hecho de que ayer era sábado, días donde tengo que tomarlo en cualquier hora del día, pero que no pase de media noche.

—Te veías tan patético cuando tenías a esa cosa cerca, que ni siquiera pudiste moverte, incluso a punto de llorar— me estaba empezando a enojar pues no conseguía mi medicamento entre mi ropa y la voz de mi cabeza no se detenía —Recuérdalo bien Zack, solo eres un inútil que no puede hacer absolutamente nada, mejor muere— empezaba a sentir de que el tenía razón y mi visión propia se cambiaba poco a poco por decepción hacia mi mismo, en mi cabeza retumbaba una carcajada burlona y sádica que no se detenía, cada vez me sentía más aturdido por la risa mientras que mi desesperación aumentaba junto a mi ansiedad, apreté con fuerza mi mandíbula y conseguí mi medicamento, en un movimiento rápido abrí el envase agarrando una pastilla y la tomé apenas pude; tenia la suerte de que se podian consumir sin agua por ocaciones de emergencia.

Me sente de nuevo colocando mis manos a los costados de mis orejas intentando "no escuchar nada" pero todo el desastre pasaba dentro de mi —Bueno, fue divertido poder venir a echarte en cara lo inútil que eres, no olvides llamarme si nuestra vida corre riesgo, bastardo infeliz— podía sentir que cada palabra de decía era más lejana, y con ello llegué a no escucharlo más.

Pude sentir como regresaban mis sentidos, tome una bocanada de aire para tranquilizarme, me pase la mano por la cara y estaba sudando, de seguro estaba pálido, me senté de nuevo guardando las pastillas en la mochila y me recosté en el asiento otra vez, ahora me sentía inquieto, pensé en lo que mi trastorno dijo y viendo las cosas desde un punto de vista diferente, si parecía un idiota asustado. Un calor recorrió todo mi cuerpo, mi sangre hervía y estaba demasiado molesto —Esto no volvera a ocurrir—, algo que aprendí fue a convertir mis peores momentos, cosas que me hagan sentir débil o menos que alguien en frustración o irá y así crear una motivación para auto superarme lo más rápido posible.

Poco después volteo viendo que todos empezaban a despertar, sentí una mano en mi hombro y mire hacia atrás encontrándome con Leo —¿Y bien? ¿Qué piensas hacer?— me preguntó un tanto serio, me demore unos segundos para responder ya que estaba en un gran debate interno, decirle al resto y que posiblemente no se lo crean o no decir nada y que lo descubran ellos solos.

—Hablemos— el chico asintió con la cabeza, en si, era lo más conveniente para nosotros, en un futuro no muy lejano, nosotros tendríamos puntos a favor para que se den cuenta del verdadero peligro que nos rodea.

Salimos del avión con el resto de los chicos, nos acercamos a un árbol grande y empezamos a conversar sobre que era lo mejor para decir, no diríamos cualquier cosa tal cual era lo que pasó, se analizaba los altos y bajos sobre el tema. Mandamos a Leo que era el que mejor habilidades de comunicación tenía para que hable con Max, de que habia algo importante para decirle pero que no viniera solo, ya que era un tema a tratar.

El experimento fallido Donde viven las historias. Descúbrelo ahora