Quedate Conmigo (Lauren Jauregui y tu)

Capitulo 2: Ha vuelto

___:¿Estás bien? —se interesó _____ tras arrodillarse junto a la mujer.

Esta asintió con la cabeza y bajó la vista. Luego, cuando ella le ofreció la mano para levantarla, se incorporó como si algo la hubiera quemado.

George:¿Estás bien, Lauren? —preguntó entonces George Kromby, un empleado del supermercado que había compartido clase con _____ durante el instituto.

La mujer lo miró con dureza, ruborizada. Parecía desesperada, aterrorizada... No podía tener miedo de ella, ¿no?, se preguntó ______. De pronto reconoció algo familiar en ella, aunque no supo señalar el qué. La fragancia de su perfume y la suavidad de su piel bajo la blusa le impedían concentrarse.

George:¿Se ha hecho daño, Lauren? —insistió George, ya arrodillado junto a las dos.

Lauren:Estoy bien —repuso ella con una voz rugosa que hizo hervir la sangre de ______. Se dio cuenta de que no quería soltarla, pero la mujer se apartó y se puso de pie—. Lo siento, George. Me tropecé de repente...

George: dije a Ricky que esta torre dificultaba el paso —comentó George, recogiendo el bolso y la cesta de Lauren al tiempo que criticaba a uno de los empleados.

Lauren:No, no, ha sido culpa mía. Lo siento —se disculpó Lauren—. Bueno, tengo que irme a casa —añadió tras esbozar una sonrisa que puso a George colorado.

George:Salude a su madre de mi parte, señorita Jauregui —dijo él mientras Lauren se alejaba.

¿Señorita Jauregui?, ¿Lauren Jauregui? ¿Esa Lauren era la pequeña y delgaducha Lauren Jauregui, la de la coleta roja y las gafas de pasta?

Hacía doce años que no la veía, justo antes de marcharse de Miami. Estaba de aprendiz en un taller de mecánica y ella había aparecido con su padre, que necesitaba unos pistones para su motocicleta. _______ tenía veintiún años entonces, de modo que ella debía de tener dieciséis o diecisiete. Era la chica más tímida que jamás había conocido. Y era evidente que seguía siendo tan tímida como de adolescente. Pero, aunque Lauren no la mirara a la cara, ella sí que se había fijado en ella. Todavía no podía creerse que la pequeña Lauren Jauregui fuera esa mujer de cuerpo despampanante y precioso rostro.

Su perfume flotaba aún en el aire y, de pronto, se dio cuenta de que tanto él como _______ seguían mirando hacia el pasillo por el que Lauren había desaparecido.

George:Tranquila, yo recojo todo —reaccionó George por fin.

_____:Te ayudo —repuso _____ mientras alcanzaba una lata de guisantes—. ¿Qué tal los señores Jauregui?, ¿siguen viviendo en la Avenida Belview? —añadió con naturalidad...

George:El señor Jauregui fue operado la semana pasada de la rodilla — respondió George a medida que apilaba latas de guisantes—. Lauren volvió ayer de Londres para echarle una mano a su madre.

Por eso no la había visto antes, comprendió ______.