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Entrando a mi casa, la mano de Jimin sujeto la puerta, volteé a verlo y su mirada triste se encontró con la mía.

-Sé cómo te sientes, ¿Quieres que vaya a cenar contigo?

-Sí, vamos. - cerré la puerta nuevamente y caminé con él hasta la calle.

-Dejé mi auto en casa, ¿Tomamos un taxi?

-No, mejor vámonos caminando. - sonreí.

-Bien.

Jimin comenzó a caminar a mi lado, de esa manera salimos de los portones de seguridad y tomamos la acera al cruzar la avenida.
Jimin en ese momento en el que cruzamos la calle tomó mi mano, la suya era muy suave y estaba cálida, todo lo contrario a la mía.

-¿Qué quieres comer? - preguntó.

-Mi vestido esta diseñado para un lugar caro y fino, pero quisiera una hamburguesa grande con queso y papas fritas con salsa de tomate.

-Vaya, ¿Y un helado?

-De fresas. - dije saboreando mis labios.

-_______, ¿Cómo te sientes?

-Mal, pero lo he ocultado todo este tiempo y Taehyung se ha sentido muy feliz.

-No puedo creerlo, ¿Qué hombre pone a su amiga antes que a su esposa?

-Solo él. - dije triste.

-Oye, déjame decirte lo que yo siento ante todo esto. - Jimin se detuvo para mirarme frente a frente - Taehyung no te merece.

-No digas eso, eres amigo de Taehyung.

-Sí, pero es la verdad. Eres hermosa, Yuina es una tipa corriente, le gusta estar borracha y tiene malas mañas.

-Es una ladrona. 

-¿Ya te diste cuenta? - preguntó.

-Sí, se robó el reloj de oro de Taehyung y una gargantilla carísima que me regaló mi suegra para mi boda.

-Le pediré que lo devuelva todo cuando tenga la oportunidad.

-Es lo mejor que puede hacer.

-________, me gustaría pedirte un favor esta noche ya que estamos solos. - lo miré a los ojos con atención - No vuelvas a llorar por Taehyung, recuerda que él no te merece.

-Jimin...

-No digas nada, ya no lo defiendas. Mejor dime qué no vas a llorar nunca más.

-No lloraré nunca más por él. - sellamos nuestra promesa como niños pequeños.

Las estrellas esa noche se pusieron a mi favor al poder tener una noche diferente y maravillosa junto a Jimin. Ese chico era un encanto, su sonrisa siempre estaba presente, tenía siempre un cumplido para mí y nunca me dejaba pensar en cosas negativas.

Jimin y yo compartimos una hamburguesa, comimos helado y antes de culminar la noche nos tomamos varias cervezas en un lugar callejero. De camino a casa nos tomábamos la última cerveza y justo en ese momento también comenzaba a llover, Jimin estaba muy lleno y yo también, no podíamos correr y tampoco había en dónde refugiarnos de la lluvia, así que mojarse en la lluvia era la única opción.

-No tienes idea de cuánto tiempo a pasado que no me mojó en la lluvia. - admití sonriendo.

-¿En serio? - asentí - Bueno, eso quiere decir que tampoco te has mojado en un charco.

-¿Qué? - solo pude sentir el golpe de agua en mi cara, Jimin me había mojado con agua que bajaba por la calle - Vas a ver.

Feliz y mojada llegué a casa, no sabía que hora era, pero sí sabía que debía darme una ducha y colocarme ropa cómoda o si no iba a tener un fuerte resfriada al siguiente día.

-¿En dónde estabas? Llegué hace dos horas y no estabas aquí. 

-Fui a dar un paseo, ¿Te molesta? 

-No, pero debiste avisarme que saldrías, me tenías preocupado. 

-Ay ya, estoy bien. ¿Te divertiste con tu amiga? - me quité el vestido delante de Tae y caminé al baño de nuestra habitación.  

-Un poco, no puedo estar tranquilo si estás sola en la casa. 

-No mientas, si te preocuparas no te irías. 

-No quiero discutir. 

-No estoy discutiendo, solo te estoy diciendo la verdad. Pero, ¿Sabes una cosa? No me importa que te vayas con esa ladrona, te la puedes coger y no me importa tampoco, los dos son iguales, perros sin corazón. - estaba borracha, no sabía lo que estaba diciendo, pero aun así amaba la cara de Taehyung - Dile que vas a pasar por ella mañana y la llevarás a cenar, quizás con ella si logres comer, ya que conmigo es imposible, ya que soy una maldita idiota en tu vida y lo único que hago es causarte problemas, tristeza e impedirte que estés con la mujer que realmente amas. 

La bebida de la noche antes me estaba pasando factura, al despertar me dolía mucho la cabeza y mi estómago estaba revuelto. 

-¿Estás bien? - preguntó Taehyung.

-Si, ¿Qué hora es? 

-Las tres de la tarde. 

-Cielos, perdí todo el día. - me senté en la cama. 

-¿A dónde fuiste anoche? No eres de tomar alcohol y mucho menos de salir sola. 

-Salí con Jimin. 

-¿Y por qué sales con mi amigo y tomas alcohol hasta perder la cordura? Estabas hablando cosas sin sentido, estabas llena de lodo y vomitando por todas partes. 

-¿Por qué sales con Yuina? Tú haces justo lo mismo, incluso llegas a quedarte fuera de la casa. 

-Me quedé en la casa de mis padres. 

-Eso quien me lo asegura. Además, no deberías decir nada, teníamos una cena y la cancelaste por esa mujer, así que no tienes nada que reclamar porque estamos iguales. 

-Que no se vuelva a repetir ese tipo de salidas con Jimin, tú eres una mujer casada. 

-Pues no vuelvas a salir con Yuina, eres un hombre casado y esa mujer una cualquiera que te besa y te maneja a su estilo. 

-A mí no me das ordenes. 

-Ni tú a mí, pendejo. - Tae estaba recibiendo un sorbo de su propia medicina y no le estaba gustando. 

...

Querido Amigo (Jimin, Taehyung - BTS)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora