—Les presento a mi nieto Iruma —había dicho el renombrado director de Babyrus, Sullivan, este demostraba la foto de un chico de cabello azul.
Pero lo tenía bastante cerca de distancia, dos filas antes, estaba ahí muriéndose de la vergüenza entre dos demonios. Verlo morirse de vergüenza era bastante divertido, y más porque parecía un buen demonio con el que jugar, me imaginaba todas las jugarretas que podría hacer, aunque posiblemente no sabría con cual comenzar.
—Ahora hablare el nuevo representante —decían cuando el director Sullivan se marchaba.
Se paraba Asmodeus, le conocía, bastante serio, pero nos hemos visto un par de veces.
—El representante de los de nuevo ingreso es Asmodeus —muchas chicas alababan que era guapo, pero no importaba mucho su físico, solo era un escalón el cual tirar—, hubo un cambio, quien hablara es el becado, Iruma.
Y un grandioso plan se elaboró en mi mente. Pase mi lengua por mis colmillos saboreando el momento, iba a ser bastante divertido. Estando parado en el escenario, un poco estático, y cuando empezó a hablar...
—Aberuhauke... Tarutoudari, Iusabebe, Risutouru, Aburuze, Sutoumano, Aberuge, Uru, Mahoraba... Tsurezaza —había pronunciado un hechizo prohibido.
Así que, posiblemente la idea que tenía iba a ser muy divertida.
—Oye, Asmodeus —le alcanzo soltando una voz seria caminando a su lado—, ¿no se suponía que tu darías el discurso? —pregunte mirándole al rostro—, era tu momento de gloria, y un simple becado te acaba de quitar el puesto.
—¿Y que tiene?
—¿Entonces cualquiera puede pisotearte, Asmodeus? —pregunte terminando hacer un poco de mi magia.
Asmodeus llamó al becado, Iruma, al jardín, donde lo reto a un duelo, para saber si era merecedor de esa gloria, aunque al cabo de un tiempo, llego a ser aburrido, Iruma, esquivo cada uno de los ataques de Asmodeus, durante veinte minutos.
Iruma estaba resultando ser un chico interesante, pero estaría mejor a vivar el rencor de Asmodeus.
—¡Iruma no ha atacado ni una sola vez! ¡Creo que si lo vemos así! ¡Asmodeus no vale la pena para que Iruma contrataque! —dije con la voz en alto.
Recibí una mirada del becado, como el de mis compañeros, que dejaron de prestar atención, pero prosiguieron a echar leña al fuego, que yo misma propicié. Asmodeus decidió emplear artes marciales, para acabar con ello, lanzándose a estocarlo con una espada de fuego.
Iruma lo volvía a evadir, salvo que esta vez, iba hacia una estudiante, este lo sostuvo por la cintura, realizando un suplex perfecto.
—Inari —le llamaron cuando iba de salida—. ¿Tu provocaste el altercado?
La miró por encima del hombro, y reía por lo bajo.
—¿Cómo crees, Amelie? —preguntó girando en su dirección—. No provoque nada, solo me divertí un poco.
—¡Los estudiantes no son tus juguetes!
Pero decidí ignorarla.
Caminando hacia la salida, sonreí a mis adentros, era la primera vez que no iba una de mis jugarretas como tenía planeado, por lo que tal vez y tendría que hacerlas mejor, salvo que el becado era el objetivo para todas esas jugarretas.
***
—¡Oye es Iruma! —escuché que alguien señalaba—. El nacido para ser un triunfador.
Sus orejas se levantaron, buscando al becado por el patio, hasta encontrarlo con Asmodeus de rodillas a sus pies.
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My demon School Ahri-San
Hayran KurguLos kitsunes no son considerados demonios en el inframundo, sino como amantes o sirvientes para los demonios, pero la joven Mino Ahri, está dispuesta a demostrar que los kitsunes son más que amantes o sirvientes, también pueden ser guerreros y reina...