La vida de Kagura en su solitaria casa, había cambiado por completo los últimos meses. Nuevamente vivía en compañía de alguien, compartían sus días y sus noches y cada día amaba más a su compañero.
Luego de la recuperación de Hijikata, el hombre había decidido volver a sus labores en el Shinsengumi. A pesar de haber disfrutado en gran manera estar con la Yato, extrañaba también el cuartel, los entrenamientos y arrestar maleantes.
Poco más de dos meses habían transcurrido desde el nacimiento de Sakura y ahora, Kagura sólo tenía pendiente celebrar el cumpleaños del Vicecomandante por primera vez como pareja. Ya había empezado con los preparativos. No sería algo tan grande ni complicado como la fiesta que tuvo junto a Otae y Kondo, por lo que tenía todo bajo control hasta ahora.
Esa tarde al culminar su trabajo en la Yorozuya, decidió salir a caminar junto a Sadaharu. Pasearon por las calles de Kabuki-cho hasta llegar a un parque, donde jugaron un poco; el peludo amigo de Kagura se veía más que feliz.
Ella extrañaba la sensación de ser recibida por él en casa o caminar y luchar a su lado, por lo que esa tarde tomaría la decisión de llevarlo a vivir junto a ella y Hijikata. La Yato entendía que tarde o temprano el hombre volvería a vivir en el cuartel del Shinsengumi y así no estaría tan sola cuando eso pasara.
Esa misma noche, la pareja y el enorme perro blanco se encontraban cenando en el comedor, compartiendo lo sucedido durante el día. En momentos así Kagura se sentía aliviada de haber aprendido a cocinar algo decente, tanto para ella como para Hijikata. Aunque esta noche se deleitaban con el favorito de la Yato: arroz con huevo.
Hijikata no se quejaba mientras tuviera su respectiva dosis de mayonesa encima y en consideración, cuando podía él también cocinaba, algo que a Kagura le encantaba. Tanto verlo preparando una rica comida, como disfrutarla.
Por su parte, el vicecomandante sólo pensaba en lo que pasaría en unos días. Mientras la escuchaba hablar se distraía en varias ocasiones sólo observándola, absorbiendo cada detalle, cada gesto en su memoria. Con el pasar de los días estaba cada vez más seguro de que quería unir su vida con ella, seguir conociendo más aspectos de su vida.
Aunque era una experiencia nueva para él, todo se sentía natural mientras estaban juntos. Ahora a pesar de su fachada de tranquilidad, en su interior empezaba a sentir nervios por la propuesta que planificaba, más aun el tener que hacerlo durante su cumpleaños.
- Ne, Kagura... ¿Cuál es tu color favorito?
- Eh, bueno, creo que el rojo. ¿ Y el tuyo? - Preguntó mientras llevaba un poco de arroz a su boca.
- Uhmm. No lo sé, supongo que me gustan los colores oscuros... Ya sospechaba que el rojo era tu favorito, sólo quería confirmar.
- ¿Por qué tan interesado en mis gustos en colores tan de repente?
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Yorozuya-Shinsengumi 🏵️(Hiji-Kagu) 🏵️
FanfictionKagura de 19 años recién cumplidos trabaja aún como parte de la Yorozuya. Gracias al esfuerzo de todos pudieron recuperar esos días tranquilos junto a sus preciados amigos luego de derrotar a Utsuro. Ahora vive con Otae, Todo marcha normal, su vida...