Taking over you |Taehyung y tú|

Más peligroso

Narra t/n

-T/n, ¿Segura que estás bien? -Me preguntó Jimin sacándome de mi transe.

-¿Oh? Sí, sí... -Contesté mirándolos a él y a Joanne.

-Yo pienso -Habló Joanne desde una esquina-. Que si no estás lista tal vez deberías evitarlo hasta que empiecen las clases.

-Sí -Concordó Jimin-. No deberías obligarte a esto, menos por Jungkook, él debería entender.

El problema era que esto no era por Jungkook... era por mí.

-Estoy lista -Afirmé-. Estoy pensando en otras cosas, no dramaticen.

Jimin y Joanne se miraron preocupados entre ellos.

-¿Ya viste el cuadro de Jimin? -Cambié el tema dirigiéndome a Joanne.

Ella pareció confundida mientras le señalaba el gran cuadro que colgaba al centro de la sala.

-¿Jimin? -Cuestionó poniendo atención-. ¿Es Jimin?

Asentí con una sonrisa mientras Jimin se ruborizaba.

-¡Jimin! -Exclamó acercándose a ver los detalles-. Jhope te tiene pintado en la sala de su casa, ¡Qué romántico! Y te ves muy guapo.

-T/n, ¿Por qué le dices? -Preguntó tapándose el rostro.

-Por favor, Park Jimin, eventualmente me daría cuenta.

-No sé por qué lo hizo -Dijo refiriéndose a Jhope-. Pero sí, es bastante lindo el gesto.

Entonces escuchamos los autos llegar. En ese momento mi corazón empezó a latir al mil por hora.

-Parece que ya llegaron -Dijo Joanne.

Me puse a un lado de ella y la tomé del brazo mientras ambas mirábamos a la entrada.

Escuchamos las voces de todos reír mientras se acercaban.

-No te vayas a desmayar -Dijo Joanne divertida.

-Cállate.

Entonces la puerta se abrió dejando ver a Jhope, Namjoon y Jin que hablaban de algún tema de deportes que no me interesaba en ese momento. Después entraron Suga con Gwen, Anne y Erika. Anne se dio la vuelta para cerrar la puerta detrás de Erika y yo fruncí el ceño confundida.

-¿Y Taehyung? -Preguntó Jimin confundido.

Gracias a Dios que él lo preguntó antes de que saliera inconscientemente de mi boca.

-Viene con Jungkook -Contestó Jhope-. Pasaron a dejar sus maletas primero.

Solté el agarre que tenía al brazo de Joanne relajando mi cuerpo.

Todos fuimos al patio de Jhope que era muy diferente al de la casa de Jungkook ya que mientras la casa del último era bastante blanca y moderna, la de Jhope tenía una temática más acogedora y el patio era más rústico, con acabados de piedra y una piscina verdosa rodeada de plantas y rocas.

Jhope había conseguido una mesa larga para que todos pudiéramos sentarnos juntos ya que como con Joanne, la fiesta trataba de escuchar las experiencias de Taehyung y celebrar su regreso.

-¿Cómo les fue en el aeropuerto? -Habló Joanne.

-Bien -Contestó Anne-. Taehyung estaba muy feliz.

-Muy feliz y muy guapo -Afirmó Gwen-. Creo que me iré a Londres un año.

-Estaba muy sorprendido de que hubiéramos ido todos a recibirlo -Dijo Jin con una sonrisa.

-¿Cierto? -Concordó Namjoon-. Ese tarado nunca ha terminado de comprender cuánto lo queremos.

-Entre tantas cosas que han pasado con nosotros 9... ya debería de saberlo -Continuó Gwen.

Toda esa conversación acerca de él me estaba sofocando así que decidí ponerme de pie.

-Voy por frituras -Dije dándome la vuelta.

Todos parecieron seguir sumergidos en su conversación acerca de lo magnífico que es Taehyung mientras yo entraba de nuevo a la casa.

Me dirigí hacia la cocina que al igual que el resto de la casa, tenía una temática oscura con madera caoba y electrodomésticos gris oscuro, era realmente bello.

Suspiré y traté de relajarme.

-Parece que todos olvidan las cosas feas cuando de su amistad se trata -Dije para mi misma con fastidio.

Estiré mi cabeza en un círculo cerrando los ojos y decidí soltar los pensamientos tóxicos para comenzar a servir. Busqué unos bowls para abrir las envolturas y vaciar las frituras en ellos, después comencé a buscar la salsa sin éxito, no había en las gavetas y tampoco recordaba que hubiéramos comprado. Me detuve a pensar por varios segundos y se me ocurrió darme la vuelta para revisar en el refrigerador.

Casi metí mi cabeza al refrigerador para asegurarme, sin embargo, de nuevo sin éxito.

Me erguí de nuevo y al cerrar la puerta del refrigerador sentí un frío aún más fuerte que el que venía dentro de él a medida que un escalofrío recorría mi espalda.

Mis ojos se encontraban clavados en los de Taehyung.

Parecía una ilusión óptica o una imagen suya, pero, no podía ser una imagen porque era diferente a como lo recordaba porque... era incluso mejor de lo que lo describían, era más guapo, más elegante, más peligroso que antes, era...

-T/n -Habló.

Su voz.

Su voz también era mejor de lo que la recordaba, era más grave, más profunda, más tentativa.

Cuando los meses pasaron después de su partida, cada vez que lo recordaba sentía que iba olvidando los detalles de su rostro y ahora mismo me sentía tan sumergida analizándolos de nuevo que olvidé por completo la situación en la que me encontraba.

Él recorrió su mirada de igual forma por mi cuerpo y yo no pude evitar sentirme expuesta ante sus ojos, que me veían tal cual un perro miraría su primera comida en 3 días.

Mi pecho comenzó a subir y bajar más rápido de lo que debería y tragué saliva cuando sus ojos se volvieron a clavar en los míos de esa manera que yo ya conocía.

-Te ves más hermosa que antes -Volvió a hablar.

Yo separé escasamente los labios para intentar hablar, pero las palabras no salían de mi boca.

-T/n se me olvidó decirte de la salsa -Habló Jhope entrando al lugar abruptamente.

Sobresaltada me di la vuelta dando un ligero brinco.

Jhope, tan alegre como siempre, parecía ignorar la situación.

-¿No la encontraste cierto? -Cuestionó divertido-. Jimin come mucha salsa, tiene su compartimiento especial.

-Yo... -Intenté hablar.

Taehyung puso una mano sobre mi hombro haciéndome sobresaltar de nuevo. Su mano se sentía suave y caliente sobre mi hombro desnudo.

-Voy a meter las bebidas -Me dijo levantando con la otra mano una bolsa con botellas.

Yo asentí alejándome del refri apresuradamente para retirar su contacto de mí.

Jhope se agachó a un lado del lavatrastes automático y abrió una pequeña gaveta donde se encontraban varias salsas.

-Ta daaaa -Expresó.

Yo forcé una sonrisa.

-¿La puedes llevar? -Dije con nerviosismo-. Cargaré las frituras.

Agarré los dos bowls que había servido con mis manos y me di la vuelta para salir a máxima velocidad de la cocina.