Capítulo 7

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Las cosas comenzaban a escalar a algo más intenso y Tignari simplemente se levantó, no iba a continuar está discusión, no en el estado en el que se encontraba, respiro hondo y comenzó a caminar.

-¿A dónde vas Nari?- Cuestionó desconcertado.

-A fuera, no voy a continuar está absurda discusión hasta que me calme por el bien de ambos - Respondió saliendo, por suerte para ella aún no salía el sol y todo parecía tranquilo.

Cyno sin perder el tiempo comenzó a seguirla con una distancia prudente pero sin intenciones de ocultarse, de todos modos Tignari sabría si estaba cercas con su excelente oído.

-No me sigas - Ordenó cortante la de cabellos negros, siguiendo su camino sin rumbo por la aldea.

-Tengo que hacerlo, te pierdes en tus pensamientos cuando estás furioso y no estamos en el bosque que conoces perfectamente, estamos en el desierto cualquier descuido y podrías perderte o caer a alguna ruina y eso podría significar la muerte, no te molestaré - Explico manteniendo cada vez algo más de distancia.

La guarda forestal gruñó y siguió caminando, respirando hondo y despejando sus caóticos pensamientos, se sentía mal por hablarle así a Cyno pero no podía disculparse hasta no estar totalmente calmada o podría soltar comentarios hirientes por el calor del momento.

Aún dentro de sus pensamientos y emociones repentinamente sintió extraño el suelo en el que se encontraba por la cual se detuvo en seco y miró alrededor bastante alerta, cosa que Cyno noto aún manteniendo su distancia prudente.

-¿Nari? ¿Que sucede?- Cuestionó apareciendo su lanza en caso de ser necesario.

-El suelo... Esta inestable así que no te acerques, trataré de volver sobre mis pasos- Exclamó tratando de dar el primer paso en reversa, sin embargo el suelo nuevamente se sintió extraño.

-Creo que puedo alcanzarte utilizando mi visión aunque probablemente tu pelaje se esponjara- Comento un poco burlón solo para intentar bajar la tención del momento.

-No es hora de los chistes Cyno, mantente al margen, no sabemos cuánto abarca la zona inestable- Ordeno la de tez clara un dando el segundo pasó en reversa.

El gran juez se mantenía atento para actuar en cualquier segundo, observando a Tignari detenidamente ¿Cómo es posible que una zona tan peligrosa estuviera tan cerca de la aldea? Definitivamente debí advertir a Candace sobre eso para que nadie salga herido.

Nari dio su tercer paso en reversa y en ese preciso segundo solo escucho un "crack" bajo sus pies, para luego caer y aunque Cyno actuó rápidamente para sujetarla termino siendo contraproducente pues ambos cayeron por aquel probable agujero.

Al despertar el de ojos carmesí miró a su alrededor en busca de las grandes orejas que conocía bien pero no pudo divisarlas por ningún lugar ¿A dónde había ido? Rápidamente comenzó a buscar cualquier rastro que lo guiará hasta allá, encontrando a la guarda forestal observando maravillada un poco de flora que se había abierto paso en el árido desierto.

-¿Podrías intentar no asustarme así tan seguido? Primero sales furioso de la casa, quedas atrapado sobre suelo inestable y caes en un agujero y despierto y no te veo cerca mío- Alego el gran juez realmente angustiado.

Siendo ignorado completamente, se acercó solo para asegurarse de que Nari estuviera consiente y no hubiera consumido algún hongo por curiosidad en comprender los efectos que podría causar, no sería la primera vez que algo así sucede y probablemente tampoco la última, después de todo se dedica a ello para comprender mejor su entorno y mejorar los medicamentos que crea.

El secreto de TignariDonde viven las historias. Descúbrelo ahora