Luces En El Cielo

Fase 5

   Jamás olvidaré lo que pasó esa noche en mi propio jardín. Me siento rara últimamente, algo confundida con la vida, y no sé por qué mi cerebro se ha estado formulando muchísimas preguntas que nunca en mi vida me había hecho.

Te había dicho que soy una persona atea y que jamás me interesaron los temas paranormales y encima traté de buscar alguna explicación lógica a todo esto, pero no pude; y te juro que desde que me pasó aquello comenzaron a suceder otras cosas muy extrañas. Casi siempre cuando tengo algún sueño suele ser sobre cosas ramdom relacionadas a lo que hice en el día o cosas que estuve pensando; pero hace unos días que comencé a tener sueños rarísimos.

Lo primero que soñé fue que otra vez se me apareció la nave solo que esta vez aterrizó en el suelo, en esa ocasión pude ver que tenía una ventana y se podía ver una especie de cabina, y lo más raro eran las siluetas de unos seres muy altos con una cabeza más grande que la del humano promedio. Otro día soñé que estaba en mi jardín, pero no vi ninguna nave, y de la nada apareció un ser muy parecido a los que vi en mi otro sueño; tenía la piel azul, ojos celestes muy grandes y parecía que estaba sonriendo; se me acercó, pero jamás sentí miedo, más bien si te soy sincera me trasmitía una paz que no puedo describir.

Casi siempre a los extraterrestres los pintan como hombrecitos enanos con cabeza súper grande y ojos negros, muy feos la verdad. Pero, aunque este ser que vi en mis sueños tuviera algunas características similares, al contrario de los famosos grises este me pareció muy hermoso.

Y desde que empezó todo esto, me sentí muy confundida, como si sintiera que todo lo que me habían enseñado hasta ahora es totalmente falso.

¿Acaso vivimos en un mundo lleno de mentiras? Lo que crees que es verdad... ¿Lo crees porque realmente así es? ¿O Porque solo te dijeron que era verdad? ¿Vivimos en un mundo manipulado por alguien superior? Pues estas fueron las preguntas que comencé a realizarme.

En un principio hablaba con mi padre sobre todo lo que ha estado pasando, pero resulta que siempre fue totalmente ateo y de hecho me dijo que me estaba volviendo loca; así que decidí no hablar más del tema con él.

Comencé a investigar con ayuda de internet; vi cientos de videos que hablaban sobre extraterrestres, pero también salieron algunos que hablaban de conspiraciones, cosas de espiritualidad como los chakras o el tercer ojo. De verdad el mundo está plagado de misterios y esto es lo que lo hace interesante.

Hasta hace una semana era una persona atea sin interés alguno en estos temas, ni siquiera me interesaba cuestionarme la realidad en la que vivo. Pero desde que sucedieron algunas cosas extrañas mi forma de ver la vida cambió por completo.

Pero me siento muy sola, porque casi nadie comprende esto si no fuera porque la mayor parte de la población permanece dormida sin preguntarse nada, sin mirar más allá de las cosas y se conforman solo con lo que muestra la televisión o lo que ofrecen las grandes corporaciones. Casi nadie se cuestiona nada, y si alguien aparece con una opinión diferente o dando una información alternativa contraria a la versión oficial, lo terminan atacando y lo tratan como si estuviera loco.

De verdad no tengo a nadie con quien compartir mis pensamientos, ni mis experiencias. Sofía y Larissa no parece que les interese estas cosas, solo piensan en cotilleos de los famosos, en las tendencias de último momento y cosas así; y mi padre ni se diga.

Un día quise salir al patio delantero de mi casa para estirar las piernas, y justo Raiden se encontraba afuera así que fui a saludarlo.

En cuanto me vio se acercó y me dio un abrazo que hizo que se me acelerara el corazón, la verdad Raiden es mi único amigo más cercano en este país y lo aprecio bastante. Ese día me invitó a pasar a su casa, y pude conocer a su madre que siempre se la pasaba en su trabajo haciendo zapatos, pero fue una mujer amable desde el principio.

Luego me llevó a una especie de oficina y allí me presentó a su abuelo, el señor más carismático que he conocido y tenía pinta de ser un verdadero chamán indio americano.

La señora Claire que así se llamaba la mamá de Raiden, nos trajo un pastel de maíz y nos fuimos a sentar al frente de la casa, pasé un rato muy agradable. Entonces se me ocurrió insinuarle a Raiden lo que me ha estado pasando en los últimos días, sentía la curiosidad de saber si él podría comprender esto.

—Raiden... ¿Alguna vez te has cuestionado la realidad en la que vivimos? —

—Todo el tiempo, mi querida Stella, ¿Por qué lo preguntas? —

Desde el principio me di cuenta que tenía muchas cosas en común con Raiden, a ambos nos gusta la naturaleza y los animales. Pero jamás imaginé coincidir con él respecto a este tema; decidí contarle todas mis inquietudes, le hablé sobre la experiencia que tuve con la nave, sobre los sueños con el extraño ser y las preguntas que comencé a realizarme.

Nunca me lo hubiera imaginado, pero resulta que Raiden si le interesa mucho esto y nunca me vio como una loca cuando le conté todo; desde hace tiempo él cree mucho en estos temas, además que tiene bastante conocimiento gracias a su abuelo.

Raiden me contó sobre su vida; resulta que su familia es descendiente de nativos americanos, eso explicaría su piel morena y su oscuro cabello. Y que toda su familia ha sido consiente de la realidad en la que nos han establecido; de que todo está manipulado y que la humanidad ha perdido la verdadera conexión con la Tierra y con el espíritu, es por eso que el mundo está como está.

He aprendido muchas cosas nuevas, o, mejor dicho, he entendido muchas cosas que antes no sabía cómo eran en realidad. Ya ni siquiera creo todo lo que dicen los grandes medios de comunicación ni las fuentes oficiales.

Incluso dejé de creerle a la Nasa que todo el tiempo niega el fenómeno extraterrestre y muchas cosas que no sabemos. Estoy segura de que lo que vi fue real, y sé que los gobiernos tienen información oculta sobre este tema y que Nasa es solo un títere de los Estados Unidos.

Me pregunto cuántos seres habitarán nuestro Cosmos; ahora estoy segura que no estamos solos en este basto universo.