Fase 1

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Alguna vez se han preguntado, ¿De verdad estamos solos en este basto universo? Pues yo creo que es absurdo pensar que somos los únicos, yo sí creo en los extraterrestres y en que existen cientos de razas desconocidas que habitan otros mundos, y que muchos de ellos están totalmente avanzados en tecnología. Creo también que los gobiernos, las autoridades y las grandes instituciones del mundo, así como los medios de comunicación ocultan demasiada información sobre este tema, y lo hacen por simples intereses económicos. Mi nombre es Stella Alba, y te contaré mi extraordinaria historia.

Últimamente me han pasado tantas cosas que me estreso demasiado; ¿Puedes creer que a partir de mañana tengo que empacar mis maletas para irme a vivir a los Estados Unidos? Es algo que nunca se me hubiera pasado por la cabeza, ni siquiera es algo de quiero hacer, pero no tengo más remedio. Y todo porque ya hace un mes que mis padres se divorciaron, y luego de un tiempo eso mi madre al final decidió irse con otro hombre, dejándome a mí con mi padre.

El caso es que justo después del divorcio a mi padre le ofrecieron un trabajo nuevo precisamente en New Jersey, Estados Unidos; y ya se pueden imaginar a quien se tiene que llevar por fuerza. Me he sentido muy triste, me duele mucho la idea de tener que dejarlo todo atrás; dejar a mis amigas del cole, a mis primos, a mi novio, incluso a mi gatita Minnie que tuve que regalársela a una amiga; dejar mi país México, para irme a otro.

Todo esto me ha provocado una terrible depresión, al punto que le rogué a mi padre que rechazara el trabajo y consiguiera otro aquí en Monterrey; pero siempre me decía que las "buenas oportunidades" no se deben rechazar y que además ya se había comprometido con el jefe de la empresa en ese país, o sea que ya no había marcha atrás.

Así que, con todo el dolor del mundo, tuve que aceptar irme a vivir a los Estados Unidos.

Me aterra el solo hecho de ir a un instituto norteamericano para retomar mis estudios, ser totalmente nueva y no conocer a absolutamente nadie me causa una terrible ansiedad, encima tendré que mejorar mi inglés a la fuerza; cosa que en un colegio mexicano no sucedería.

Pero esta es mi realidad ahora y debo afrontarla. Así que comencé a empacar mis cosas para irme el día miércoles a las 3am al aeropuerto. Una desdicha tener que madrugar, porque el aeropuerto más cercano está a cientos de kilómetros de mi casa y el vuelo sale a las 12 del mediodía.

Un día antes de irme a Estados Unidos, mis amigas del cole me invitaron a una fiesta de despedida que organizaron para mí; llevaron globos, dulces, regalos y hasta un pastel, parecía una fiesta de cumpleaños. Incluso llegó mi novio Fabio, y mis amigas Leticia, Mariana y Araceli que nunca voy a olvidar.

Fue muy divertido, pero al final de la fiesta lloré como nunca por tener que dejar a tantas personas maravillosas; aunque prometieron escribirme mensajes, pero para mí no es lo mismo sin tener la oportunidad de verlos cara a cara ni poder abrazarlos.

Al día siguiente me levanté y me alisté para emprender mi largo viaje; decidí ponerme una blusa de gatito y un pantalón de mezclilla más un abrigo por el frío de la mañana. Luego de tomar el desayuno me lavé los dientes y agarré mi bolso de mano para sentarme un rato a esperar la hora de ida.

—Ya es hora vámonos — dijo mi padre.

Nos subimos al auto de mi tío Francisco ya que él acordó llevarnos hasta el aeropuerto. Durante todo el camino tuve que responder cientos de mensajes en mi celular que me enviaba mucha gente despidiéndose de mí, me hubiera gustado que fuera de frente.

Ya estoy subida en el avión, me siento muy nerviosa porque es la primera vez que salgo del país. Frente a mí pegado al asiento de adelante, se encontraba una pantalla donde podía poner todo tipo de películas, series o música; así que me puse a escuchar algo de música clásica.

Casi me da un paro cardiaco en el momento que el avión comenzó a despegar, tuve que agarrar la mano de mi padre que estaba sentado a mi lado.

Así fue como mi vida cambió por completo, jamás imaginé que me fuera a tocar vivir una situación como esta, y aunque me ponga triste espero encontrar algo bueno en todo esto.

Luces En El CieloDonde viven las historias. Descúbrelo ahora