Luces En El Cielo

Fase 9

He comenzado a investigar sobre el tema de las abducciones, y es una realidad que afecta a muchas personas. Ha habido casos de mujeres que descubren estar embarazadas luego de una abducción y puede pasar que las vuelven a abducir para sacarles el feto, o las dejan tenerlo. También ocurre con hombres, en su caso les extraen el esperma y lo usan para crear seres híbridos.

Según leí todo esto es obra de los extraterrestres malos, es un misterio por qué lo hacen; lo único seguro es que muchas personas en el mundo lo han vivido y yo soy una.

Pero no creo estar embarazada porque justo hoy me vino el periodo, menos mal. Y parece que soy una en un millón que recuerda la abducción, normalmente es algo que la gente olvida y solo lo guarda en su inconsciente.

Aun así, me he sentido muy mal desde esa experiencia, me duele el cuerpo en especial el pecho y tengo mucha tos. Lo peor fue cuando comencé a toser sangre, y ya con eso mi padre se preocupó tanto que me llevó al médico.

Me hicieron exámenes de sangre, me revisaron de pies a cabeza, me tomaron la respiración y muchas cosas. Y cuando llegaron los resultados casi se me cae el alma a los pies, mi padre lloró desconsolado; pues me detectaron un cáncer en el pulmón derecho bastante avanzado.

¿Acaso fue por esa abducción? ¿Me colocaron ese cáncer allí? La verdad no sé si fue la abducción, porque antes de esa experiencia yo estaba muy bien, y justo después comencé a sentirme mal y cuando me trajeron al hospital me detectaron eso. Según los doctores hay veces que la gente no se da cuenta del cáncer hasta que ya avanzó más.

Ahora si es verdad que mi vida se vino abajo y no hay forma de que pase. Quien sabe cuánto tiempo me queda vivir en este mundo.

Cuando fui a darle la noticia a Raiden sentí mucho miedo de hacerlo porque no quería que se sintiera mal. Pero cuando tuve el valor de contarle vi que bajó la mirada y se quedó algo triste, pero luego se acercó a mí y me abrazó prometiéndome no abandonarme y que hará todo lo posible por hacer de mis últimos años los más inolvidables (aunque no sé si son años lo que me queda).

Mis nuevas amigas del colegio Sofía y Larissa hicieron lo mismo llevándome a comer a todos los lugares que encontraban.

Como dijo el señor Peter, debo mantener la calma pase lo que pase y aceptar el propósito que la vida tenga para mí. Aunque no puedo evitar llorar por las noches, tener que dejar a mis amigos, a mi padre, a mi gatito, todo; me producía una tristeza demasiado profunda.

Antes me tocó dejar mi vida mexicana para venir a otro país, y ahora me toca irme este mundo dejando otra vez a todos mis seres queridos. Con todo esto me puse a reflexionar, que debemos vivir cada día como si fuera el último, disfrutar de cada momento y de todas las cosas por más pequeñas que sean, porque la vida es demasiado corta como para angustiarnos por algo tonto.

La próxima semana ya comienza la quimioterapia y me harán lo más horrible del mundo, me cortarán el cabello el cual lo tengo súper largo y lacio.

Tengo mucho miedo la verdad, sé que debo mantener la calma, pero me cuesta demasiado. Ya era de noche y me fui a dormir, pero sentí que no iba a poder lograrlo; Aldebarán se acostó conmigo muy cerca de mi cara, al menos su presencia me reconforta.

Fue la noche más aterradora de mi vida además de la noche de la abducción. Porque comencé a escuchar unos estruendos que al parecer provenían del cielo, tan fuertes que no entiendo por qué mi padre ni la gente del barrio nunca hizo un escándalo, era como si solo yo los escuchara.

Y no eran truenos de lluvia porque en ese momento era verano y el cielo estaba despejado; eran sonidos como metálicos. De pronto mi habitación se iluminó por un instante, luego otra vez y otra vez, luces que provenían de afuera alumbraban todo a su paso. Era como si se estuviera librando una batalla espacial justo en el cielo donde me ubico y que soy la única que lo está presenciando.

Dicen que el mundo está en medio de un campo de batalla entre los seres que quieren nuestra evolución y aquellos que quieren aprovecharse de nosotros.

Finalmente me quedé dormida.