I Love The Way You Hate Me // Ryeji

12.

[ POV YEJI ]

"No... Me lo puedo... Creer" Mantuve el contacto visual con Yuna por unos largos segundos, aún con mis brazos rodeando el cuello de Ryujin, sin ser consciente de la posición en la que estábamos. Al darme cuenta, me sonrojé con dureza, soltando rápidamente el agarre que tenía en su cuello antes de carraspear un poco la garganta. Esto hizo salir a Ryujin de su trance.

 "Sal... AHORA" Protestó la menor antes de que Yuna asintiera con la cabeza y se fuera sin decir nada más, cerrando la puerta tras ella.

¿Por qué siempre nos tiene que interrumpir alguien?

Un suspiro salió de los labios de Ryujin tras incorporarse en la cama, yo la imité, quedando ahora las dos sentadas sobre el colchón. Toda la intensidad de hace unos segundos había desaparecido y la vergüenza empezó a apoderarse de mí, pero antes de que pudiéramos decir nada, la puerta se volvió a abrir.

Ambas nos giramos de nuevo para ver a Yuna asomando por la puerta.

"¡WOW! Lo siento, es que seguía sin creérmelo. Tenía que comprobar que no fueran imaginaciones mías" Dijo antes de que sus ojos se quedaran fijamente, mirando en mi dirección, yo seguí su mirada hacia abajo, viendo que aún tenía la camisa totalmente desabrochada, dejando al descubierto mi sujetador negro. Mis mejillas se sonrojaron aún más que antes, tan intensamente, que notaba mi rostro arder de la vergüenza. Me giré, dándole la espalda para empezar a abotonar de nuevo mi camisa lo más rápido que pude.

"¿YUNA? ¡QUE TE VAYAS!" Ryujin gritó de nuevo al agarrar uno de los peluches que tenía Winter por la cama y tirarlo directamente hacia la más pequeña, la cual cerró la puerta riendo antes de que pudiera golpearla con el peluche, el cual chocó directamente con la puerta ahora cerrada.

"Te juro que la mato..." La menor susurró al llevarse una mano a su pelo, tiranos este hacia atrás mientras se movía hasta quedar sentada junto a mí al borde de la cama.

"Creo que deberíamos volver a la fiesta" Dije al terminar de abrocharme la camisa y levantarme de la cama, no podía ni mirarla de la vergüenza que sentía.

Me agaché para recoger el resto de prendas del disfraz que estaban esparcidas por el suelo, volviendo a ponerme la corbata y dirigirme ahora hacia la puerta, pero la mano de Ryujin agarrando mi muñeca me detuvo.

"Yeddeong..." Me giré para mirarla, ella tenía la cabeza gacha, aún sentada al borde de la cama.

"No me ignores después de esto... Por favor..." Dijo ahora al alzar su rostro y mirarme con ojos suplicantes, yo amplié los míos, sorprendida ante sus palabras, era la primera vez que la veía tan vulnerable.

"Ryuddaeng..." Murmuré al acercarme de nuevo a ella, ahuecando sus mejillas con ambas manos mientras me inclinaba para dejar un suave y tierno beso sobre sus labios, para luego, susurrar contra estos.

"No te voy a ignorar, tonta" Sonreír antes de dejar otro beso más corto  "Solo te pido un poco de tiempo para poder explicarle todo esto a Lia, aresso?" Acaricié con cariño su mejilla con el dedo pulgar.

Quería estar con Ryujin, realmente lo deseaba, era absurdo seguir luchando contra eso, pero quería hacer las cosas bien ahora, quería enfrentar a Lia y ser clara con ella, explicarle todo desde el principio.

Ryujin asintió como un bebé a mis palabras, haciendo que una pequeña risa se escapara de mis labios. Era increíble como cada pequeño detalle que iba conociendo de ella, hiciera que me gustara aún más y más.

"Pero... ¿Eso quiere decir que me voy a tener que contener de besarte cada vez que te vea?" Un puchero se formó en los labios de la morena.

"Solo hasta que hable con Lia, si?" Hice una pequeña mueca antes de seguir "Entiende que todo esto es muy complicado, pero te prometo que no tardaré en decírselo, aresso?"