Hola! Mis queridos caballeros negros aquí estoy de regreso con esta historia y gracias por la paciencia, pero ya saben que estuve solo con dos historias por unos días, pero ahora sí tendrán las actualizaciones como de costumbre, ahora lean voten y comenten.
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Regina y Ruby salieron del cementerio y la morena le pidió ir a trabajar, no quería estar en casa y seguir pensando y ponerse triste, a lo que Ruby acepto, así que se fueron a comprar algunos muebles para la decoración de la casa, la cual pronto estaría lista y eso era lo último que faltaba para que estuviera lista y así ponerla en el mercado, después de hacer la compra de estos fueron a comer a un restaurante, platicaron de cualquier cosa para distraerse y después fueron a ver que tanto faltaba para terminar la casa.
Paso alrededor de un mes desde hace día y las cosas seguían igual en todos los aspectos, Ruby tratando de ignorar sus sentimientos, aunque estos iban en aumento, Regina tratando de descifrar si era amor lo que comenzaba a sentir por Ruby o seguía siendo el cariño que ya le tenía, mezclado con el agradecimiento por no haberla dejado sola en ningún momento, no sabía que hacer y aún no tenía el valor de hablar con alguien. Ahora se encontraban las dos en una nueva casa en remodelación, ambas estaban viendo la distribución de casa habitación tanto de la primera como segunda planta, cuando entro una pelirroja, la cual Ruby vio y sonrió, algo que no le gusto a Regina.
RUBY- ¡Mérida! - corrió a abrazarla -.
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MÉRIDA - vaya mi loba, hasta que doy contigo.
RUBY- no seas dramática que bien sabes conde encontrarme, tu eres la que andaba pérdida.
MÉRIDA - lo sé, lo sé, pero ya que tú predominas en el mercado de está zona, pues me fuí a ver otros países en los cuales me a ido de maravilla.
RUBY- hay mujer tienes que contarme, quizá me des algunas ideas.
MÉRIDA - por supuesto que sí y está morenaza quien es - señalo a la morena que no se miraba muy contenta -.
RUBY - mira te presento a Regina mi ahora socia, Regina ella es Mérida una vieja amiga de profesión.
REGINA- mucho gusto.
MÉRIDA- el gusto es mio Regina, me alegro de que ahora alguien trabaje con la loba, a veces suele gastarse dinero de más.
REGINA- lo sé, varias veces e tenido que frenarla.
RUBY- ¡Oye! Que tampoco han sido muchas.
REGINA - Ruby, desde que trabajo contigo van más de veinte veces que has tratado de gastar de más.
RUBY- bueno, puede que si sean muchas.
MÉRIDA - oye Rubs, se que ahora estás ocupada, te parece si te invito a cenar en mi departamento, hay muchas cosas de que hablar.
RUBY- me parece bien pelirroja, ¿Vives donde siempre?
MÉRIDA - obvio, así que no es necesario que te de la dirección, ya que la conoces a la perfección.
RUBY- vaya que si, entonces nos vemos en la noche.
MÉRIDA - perfecto, adiós Regina - está solo asintió - te veo en la noche loba.- se fue de ahí muy sonriente -.
REGINA - pensé que el apodo de loba solo era entre Emma y tu.
RUBY- no, ese apodo me lo gane por mi profesión, al momento de que siempre les ganaba las mejores casas a mis compañeros, a Emma le causaba gracia y pues siempre me lo decía.
REGINA - a bueno.
RUBY- ¿Estas bien? Te noto algo rara.
REGINA - estoy bien, solo algo cansada, pero vamos a seguir trabajando así terminamos más rápido.
RUBY - ok.
Ruby no le creyó a Regina, pues había aprendido a conocerla casi por completo, por lo que dedujo que su comportamiento se debía a la visita de Mérida, aunque no entendía el porque, pero lo dejo de lado y siguieron trabajando. Por la noche las dos llegaron a la casa y se fueron a dar un baño, más Ruby se arregló para ir con Mérida, una vez lista bajo enfundada en un vestido rojo que le quedaba de maravilla, Regina al verla quedó sin habla, pues le encantó como se veía y unas ganas de ir hasta ella y no dejarla salir la invadieron, pero no podía hacer eso, al menos no ahora.
RUBY - ya me voy a Regina, te aviso que a lo mejor me quedo a dormir con Mérida.
REGINA- ¿Y eso porque?
RUBY- porque seguro estaremos conversando hasta tarde, ya que llegamos mucho tiempo sin vernos y dudo que me deje salir a esa hora.
REGINA - por eso no hay problema, tu háblame y yo voy por ti.
RUBY- no es necesario Regina, además no voy hacer que manejes tan tarde, además como haremos, si yo llevo mi auto y tú tendrías que ir en el tuyo.
REGINA - no es molestia y por eso no te preocupes, voy en taxi a recogerte y nos regresamos en tu carro, además no te estoy preguntando, te estoy diciendo que yo voy por ti, así que me avisas.
RUBY- amm, está bien, entonces yo te aviso, adiós.
REGINA- adios y ten cuidado.
Ruby solo asintió y salió de la casa algo confundida por la actitud de Regina, sabía que la cuidaba, pero no pensó que fuera hasta ese punto de salir tan tarde solo para ir a recogerla, subió a su auto y fue hasta el departamento de Mérida, el cual ya conocía por las muchas veces que se veían ahí, porque no iba a negar que había estado un par de veces con ella, aunque solo fue cosa de unas noches de copas, porque sabían que no eran indicadas para estar juntas, al menos no en el ámbito romántico.
Regina se quedó en silencio en par de minutos después de que Ruby se había ido, pensando en la casi escena de celos que le hacía, pues el solo de pensar que Ruby se quedaría a dormir con Mérida le causó una extraña sensación en el estómago, así que antes de ir por ella, tomo sus llaves y salió hacia la casa de sus madres, pues necesitaba hablar con ellas y aclarar todos sus sentimientos y emociones.
CONTINUARÁ.......
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Si les gusto déjenme sus votos y comentarios, que tengan una buena mañana/tarde/noche depende de donde me lean, nos vemos en el próximo, bye.