A bit of your love ৎ୭ JimSu

02. Vacío

Mientras caminaba por la playa de arena blanca en la isla de Jeju, Yoongi se sorprendió por la belleza del lugar. El sol comenzaba a despuntar en el horizonte, pintando el cielo con una mezcla de tonos rosados y dorados que creaban una atmósfera mágica.

A su alrededor, Yoongi podía ver a algunos pescadores preparándose para salir a la mar en sus pequeñas embarcaciones. El sonido de las olas y las redes se mezclaban en el aire, creando una sinfonía perfecta que acariciaba sus oídos.

La verdad, era un lugar increíble. Donde poder respirar y huir de la realidad por un momento.

Tal vez no todo estaba yendo por el camino que imaginó, aunque nunca creyó que fuera tan fácil, pensó que Jimin no haría aquello más complicado de lo que era.

Solitario, decidió ir de turismo por los alrededores, el chófer que Jimin había asignado para él lo llevaría, pero ni siquiera eso contaba como un verdadero acompañante.

Era injusto, quizás era una buena oportunidad para ir juntos a caminar y así encontrar cosas en común para llevarse mejor, pero el alfa sólo se excusó con algo de trabajo.

Aquella mañana luego de haber llegado la noche anterior, no hacía más que ignorarlo y vivir sumido en el celular y una laptop. A penas y había tomado el desayuno en la mesa mientras acompañaba al omega con un silencio sepulcral.

Quizás, él solo estaba ocupado o simplemente era muy distante.

Yoongi prefirió pensar que solo se trataba de desconfianza o por estar muy ocupado, al final, él también se sentía algo tímido e incómodo, nunca habían estado juntos por tantas horas, nunca habían pasado una noche bajo el mismo techo.

La idea de que con el tiempo sería más fácil continuó implantada en su pecho, creía que al pasar de los días y semanas, ambos comenzarían a sentirse más cómodos con la presencia del otro hasta ser un poco mas cercanos.

O eso era lo que Yoongi deseaba.

Decidió caminar hacia un mercado cercano, y una vez allí, el aroma de la comida fresca lo envolvió. El bullicio de la gente y los vendedores gritando sus ofertas llenaban el ambiente. Yoongi no podía evitar sentirse un poco abrumado por todo el ruido, pero a la vez emocionado por la experiencia de estar en un lugar nuevo.

Mientras caminaba por las calles estrechas de la ciudad, Yoongi descubrió templos antiguos y tiendas de artesanías locales. Se sintió fascinado por la cultura y la historia de la isla.

Finalmente, Yoongi llegó a un mirador con vistas impresionantes del mar y la costa rocosa de la isla. Se detuvo allí por un momento, admirando la belleza natural de este lugar único en el mundo. Se dio cuenta de que, aunque solo había estado en la isla por unas pocas horas, ya se había enamorado de ella.

Fue una mañana emocionante para Yoongi, quien se sintió lleno de curiosidad por todo lo que la isla de Jeju tenía que ofrecer.

De regreso al hotel, su ánimo era sereno y optimista.

― Muchas gracias, señor Woo. - Sonrió tímidamente al bajar del auto y llevó con él una pequeña bolsa con algunos recuerdos que había comprado para cuando volviera a Seúl.

― ¿Le ayudo? - preguntó el hombre beta, vestido de traje y que aparentaba unos cuarenta años o un poco más.

― No, muchas gracias, solo es esto y no es pesado. - respondió y continuó hasta el ascensor.

Pensó que quizás Jimin estaría desocupado, así que se preguntaba por donde empezar para hablarle acerca de todo lo que había visto ese día, seguro sería una buena idea.