𝐭𝐡𝐞 𝐛𝐚𝐬𝐭𝐚𝐫𝐝 𝐩𝐫𝐢𝐧𝐜𝐞𝐬𝐬 -aemond targaryen-

capítulo 18

--¿Aemond?-- repetí su nombre.

Su ojo miraban a los míos con cierta sorpresa.

Debido a su silencio no pude evitar pensar en que quizas hice mal en decirle.

fue estúpido creer en las palabras de Aegon.

--¡Aemond!--

Ambos miramos atras nuestra.

Alicent se acercó a nosotros, se veía molesta.
Tomo del brazo a su hijo, levantandolo a la fuerza.

--¡debemos irnos!-- exclamó.

Obviamente sus ojos me miraron como si yo fuera la peor persona con la que su hijo pudiera juntarse, pero creo estar acostumbrada a eso.

Pero mis ojos se centraban en aemond, el cual aun no ha dicho nada...

Su madre le llevó lejos, y el ni siquiera volteó en mi dirección.

Había cometido el peor de los errores...

Abraze mis piernas mientras dejaba que el agua corriera por mi cuerpo, volver al castillo en este momento no me parecía la mejor idea.

(...)

El sol ya se ocultaba, y yo seguía ahí.
Habian pasado horas desde que Aemond y su familia abandonaron driftmark, horas desde que fui sincera con mis sentimientos..

--¿Planeas pasar la noche aqui?-- preguntó la voz de mi padre.

--¿Que haces aqui...?--

--llevas horas sentada en este lugar-- dijo para luego sentarse a mi lado. --cualquier padre se preocuparía--

Ambos guardamos silencio unos segundos.

--¿Como sabes si estas enamorado..?-- pregunté abruptamente mientras volteaba a verle.

Daemon asintió levemente para si mismo, esa fue su forma de confirmar que era momento de tener una charla padre e hija.

--¿Tu crees estar enamorada?-- preguntó.

Guardé silencio.

--el amor no es algo que todos sentimos por igual..-- explicó.

Mi confundido rostro fue señal para que explicara mas a fondo sus palabras.

--no creo ser quien mejor pueda hablar sobre esto-- suspiró. --Rhaenyra de seguro sabrá que decir--

--no, por favor, sigue-- supliqué. --creo que escucharlo de un hombre me hará entenderlo mejor..--

Llevó una mano a su menton, frotando sus dedos contra la comisura de sus labios, parecia pensar correctamente en sus siguientes palabras.

--es complicado...-- dijo. --pero eso lo hace emocionante. Te mantiene...vivo, supongo--

--Tu amas a Rhaenyra, ¿no es asi..?-- pregunté.

Daemon volteo a verme, sonriendo levemente.

--¿Quien te dijo eso?--

--ví como le sonreías ayer--

Rió mientras llevaba una de sus manos a mi hombro, invitandome a acercarme a él.

--¿Tu estas bien con eso..?-- preguntó. --se que eres su mayor admiradora--

Sonreí.

--claro que estoy bien con eso...-- me apoye en su hombro. --¿Puedo ser sincera contigo, padre..?--

--siempre-- aseguró.

--le dije a Aemond sobre como me sentia..--

En ese momento mi padre apretó levemente su mandibula, pues sus sospechas acaban de ser confirmadas por su propia hija.

--¿Cual fue su respuesta?-- preguntó.

--el no dijo una sola palabra..-- suspiré.

Mi padre volteó a mirarme, hice lo mismo.

--no te merece, eres mejor que él y sus hermanos--

Reí.

--padre, según tu nadie me merece-- sonreí.

--cualquier hombre o muchacho que quiera pedir tu mano debera tener un duelo conmigo--

Volteé mis ojos mientras reía antes las declaraciones de mi padre.

Se que este tipo de charlas no eran de su estilo, pero al menos hizo un esfuerzo por mí.

--¿Crees que deberia odiarlo...?-- pregunté, volviendo al tema de Aemond. --por lo que sucedió anoche--

--mi opinión no importa-- respondió mientras se levantaba del suelo. --ambos parecen ser buenos amigos. el se ve como alguien solitario, Y tu eres lo contrario--

Estiro su mano para ayudarme a levantar.

--quizas ambos sean de ayuda para el otro-- añadió.

Me sorprendía lo bien que se tomó mi padre la situación.

Aun sentía algo de culpa por tener una rápida reconciliación con Aemond, pero si mi padre lo aceptaba, supongo que puedo hacer lo mismo...

--¿Que hay de mi madre..?-- pregunté. --¿Como sabías que estabas enamorado de ella?--

Mi padre sonrió.

--no lo sabía-- respondió. --era molesta, una completo sabelotodo. Creía detestarla, pero no fue asi..--

--¿era molesta?-- pregunté sonriente.

--la peor bruja del templo-- aseguró.

--¿Templo..?--

Mi padre guardo silencio, parecia arrepentirse de haber revelado esa información.

No insistí en obtener una respuesta ya que no queria hacerle enojar, pero no recordaba que mi madre perteneciera a algun "templo"

Pues lo que mi mente me permite recordar era un pequeño pueblo, uno conformado por mujeres con habilidades unicas.

Mi madre era una de ellas.

(...)

Cuando regresamos al castillo mi padre me llevo con Rhaenyra, dijo que habia algo de lo que ambos querian hablar conmigo.

Subimos hasta llegar a la azotea.

Ella fue la primera en explicarme la situación.
En sus palabras, dijo que ambos estaban planeando casarse.
Noticia la cual me tomo por sorpresa, pues no esperaba algo asi tan pronto.

--¿Que hay sobre laenor?-- pregunté.

--vamos a matarle-- respondió mi padre.

Abrí mis labios de par en par.

--sera una muerte falsa-- Rhaenyra corrigió, a lo cual mi padre rió debido a mi rostro.

--utilizaremos otro cuerpo, el fuego lo volverá irreconocible-- explicó el hombre.

Procedieron a explicarme detalladamente su plan, y al parecer ya llevaban mas de la mitad listo.

Esta noche se llevaria a cabo lo restante.

(...)

Mi participación en este plan era relativamente simple, pues es una tarea la cual he repetido múltiples veces.

Luego de leerles un libro, ambos niños se prepararon para dormir.

Les arrope correctamente para luego dirigirme a la salida.
Antes de cerrar la puerta detras mia, les di un ultimo vistazo.

El matrimonio entre Rhaenyra y mi padre nos uniría finalmente como hermanos, y
Eso me emocionaba mas que nada.

Entré a la habitación de mis hermanas, asegurandome de ver si ambas ya dormian.
Baela dormia plácidamente al igual que su hermana, cerré la puerta pues ya no tenia mas que hacer.

Me dirigí hasta mi habitación para lograr descansar, ahora solo faltaba esperar.

Era cuestión de horas para que la noticia de la "muerte* de laenor nos sea anunciada.

-continuara-