: 🗯️ ャ ❛ A C E P T A R !

🗯️ ; O9 !

Había sido costoso. Pero tras varios intentos fallidos y un dilema para detener a Mojo jojo; había vuelto todo a la normalidad. Buttercup había recuperado su cuerpo y Ivy el suyo. La pareja, no dudo ni dos veces en volver a tener sus encuentros. Siempre a la misma hora y siempre en secreto... O bueno no tan secreto, pues Serpiente ya sabía todo... Y eso de cierta manera preocupaba a Ace. La conocía perfectamente y sabía que no era capaz de traicionarlo... Pero algo le decía que debía tener más cuidado con ella... Quizás, también debía aclarar todo, para de cierta forma sanar aquella herida que el mismo había provocado.

No se obligaría a amarla, pues su corazón solo pertenecía a una chica. Pero al menos, debía animarla a que encontraría a alguien que si la amará. Ivy, por su parte... Simplemente estaba confundida, su relación con Ace había cambiado de forma drástica y prácticamente no podían estar cómodos al estar juntos. Entendía que había motivos para eso... Pero, ella nunca quiso que las cosas terminarán de esa manera.

Su amor por Ace, se había vuelto una enfermedad, una obsesión, de la cual nisiquiera estaba consciente. Ella creía que era normal amarlo de esa manera. Pero no era nada normal, su obsesión la había cegado y sus sentimiento la hacían pensar varias ideas, ideas muy malas que sí las hacían, podrían terminar en algo muy malo. Ella no pensaba en hacer realidad sus pensamientos, tenía pensando en aceptar todo... Pero no podía aceptarlo; ella se seguía mintiendo así misma y se seguía diciendo que sí se esforzaba, Ace la amaría y le daría una oportunidad...

Ella estaba consciente que todo era mentira. Pero quería creer que todo podría volverse una realidad. En su mente, se formaban varios escenarios de lo que pudo haber pasado si no hubiese sido tan cobarde.

Ivy seguía amando a Ace profundamente. Le dolía amarlo, pero quería seguir amandolo de la manera enfermiza que lo hacía; pues ella quería creer que todo sería real algún día. Pero lamentablemente Ace amaba a Buttercup locamente y no estaba dispuesto a dejarla por cualquier otra persona, pues estaba feliz a su lado y era una de las mejores cosas que le habían pasado. Ivy estaba consciente de ello, pues lo había presenciado y le había dolido, sintió como si en ese momento la hubieran apuñalado sin piedad. Nunca tuvo el valor suficiente para ser sincera... Podía tenerlo ahora, pero sería en vano y de nada serviría, pues sabía lo que Ace podría responderle y el como le dejaría claro que solo eran amigos.

Debía superar todo, debía aceptar la verdad para poder estar bien. Pero al parecer, no quería estar bien... No quería aceptar la verdad, no quería aceptar su triste realidad. Ellos eran felices, ellos disfrutaban de su compañía y muestras de cariño... Pero ella... Ella se sentía triste y sola, se sentía como toda una tonta por no haber hecho las cosas a tiempo... Era una tonta de eso ya se estaba dando cuenta un poco... Pero no era capaz de aceptar nada, pues su corazón era terco y a la fuerza quería estar con Ace. No sabía como... Pero quería estar a su lado... Quería estar con Ace a cualquier costo...

Su sueño siempre fue estar con Ace. Pero, lamentablemente jamás pudo cumplirlo, pues el destino jamás lo tuvo planeado. Su amor por Ace la mataba; siempre supo de los riesgos del amor... Pero aún así jamás tuvo cuidado y se arriesgo, sabiendo que posiblemente saldría perdiendo todo. Su estabilidad, se había roto... Estaba enloqueciendo. Millones de dudas invadían su mente, millones de malas ideas venían a su cabeza. Unas peores que otras. Sabía que su odio hacía Buttercup, era injustificado, era malo... Era injusto... Pero aún así, no estaba dispuesta a dejar de odiarla... Pues ella le había ganado a Ace... Ella había ganado el corazón de su amado.

Era injusto para ella. Era injusto el como ella se lo había ganado tan fácil y sin hacer el mínimo esfuerzo, como Ivy lo había hecho. Ivy había luchado por mucho tiempo... Pero todo su esfuerzo había sido en vano, pues Ace... Jamás se enamoró de ella. Buttercup, había llegado para arruinar sus planes. Lo había hecho desde el momento en el que llegó a su hogar... Buttercup había llegado y lo había arruinado todo.