Blood Of Dragons ❝La sangre de dragón corre por mis venas.❞
Donde la hija Bastarda de Daemon Targaryen es su viva imagen.
O
Donde Aegon encuentra su lugar seguro en su prima.
⟨QUEDA PROHIBIDA LA COPIA O...
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Las espadas de ambos chocaban entre si frenando sus ataques,la princesa gira sobre eje dándole una pata en la pierna al platinado.
Aemond gira y golpea su espada con el espalda de Daella al mismo tiempo que la patea en la parte de atrás de la rodilla.
La platinada se queja del dolor y se mueve cubrido el golpe del platinado con su espada. Ambas espadas de acero Valyrio son detenidas en el aire por la otra.
Daella se hace para atrás antes de empujar a Aemond con una patada en el estómago,el platinado se levanta con rapidez y pone su espada en el cuello de Daella al mismo tiempo que ella hace lo mismo con él.
— es un empate — Sir Criston se teme entre ambos jóvenes que no alejan sus espadas del otro — princesa,príncipe ya pueden bajar sus espadas.
Los dos lo ignoraron mantenimiento la mirada fija en el otro sin apartarse. Las gente alrededor de ellos comenzaba a ir se menos dos que los miraban a ellos.
Daella movió más el filo de su espada rosando ligeramente el cuello de Aemond mientras el platinado hacia lo mismo. Sus miradas no se apartaban del otro vigilando cada movimiento por mínimo que sea.
Sir Criston comenzaba a preocuparse por el próximo movimiento del cualquiera de los dos,sabía muy bien que el príncipe y la princesa eran capaz de generarse heridas de gravedad al otro y no sentir culpa.
Los dos platinados bajaron sus espadas y se sonrieron para después chocar los puños. Sir Criston tomo las espadas de los dos y se alejó,los dos eran raros y jamás los entendería.
— casi te dejo ganar por lástima.
— ¿Tú dejarme ganar? — Daella lo mira incrédula — yo te iba a dejar ganar a ti.
— no,yo tenía la delantera.
— no,yo la tenía pero te di ventaja.
Y antes de que Aemond respondiera Baela apareció colando su mano en el brazo de su prometido al mismo tiempo que Jace se colocaba al lado de Daella.
— ambos lo hicieron muy bien — asegura la platinada menor — y son muy buenos los dos.
— yo so mejor que él/ella — hablaron al mismo tiempo señalándose.
— los dos son asombrosos — les sonríe.
Jace mira a su hermanastra mayor.
— 'ella ¿Podríamos ir hablar?.
— ¿De que? — Aemond lo mirá.
— a ti no te importa.
— te equivocas,sobrino — lo señala y pasa su mano libre por los hombros de Daella — mí deber como primo y prontamente cuñado es velar por cuidar el honor de mí cuñada.
Tanto Daella cómo Baela lo miraron sin creerle una palabra,ambas ya lo conocían muy bien y él solo estaba queriendo saber el chisme.
— es un asunto entre Daella y yo — le responde el Velaryon — así que no te metas.
