FLASHBACK 4

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Bruce se agachó en el suelo mientras sostenía el cuerpo inconsciente de su novia. Estaba asustado y muy preocupado, ya que nunca la había visto reaccionar así. Sí que había visto alguno de sus ataques de ansiedad, causados por algunas pesadillas, en las veces en que ambos habían dormido juntos en la Torre Wayne, pero jamás la había visto caer inconsciente, y menos aún con la presencia de otras personas para él desconocidas.

-¡Hana!-Llamó Bruce desesperado-¡Hana, despierta! ¿Qué te pasa?

Sin embargo no pasó nada. Los padres de acogida de Hana le indicaron a Bruce que podía dejarla sobre el sofá del salón, a lo que él hizo en seguida, tomando a la joven adolescente en sus brazos. En estos momentos, todos ignoraban la presencia de las otras dos personas presentes, que habían entrado a la casa, cruzando el umbral de la puerta.

Al cabo de varios intentos por parte de Bruce y de la familia de acogida de Hana, esta despertó algo desorientada. Cuando ellos le preguntaron por su reacción y le contaron lo que había pasado, Hana se incorporó en el sofá rápidamente, mientras que Bruce intentó impedírselo.

-Oye, oye, tranquila. No te incorpores tan rápido-pidió Bruce.

Hana observó a las dos figuras que permanecían tras su familia de acogida y su novio.

-¿Qué hacéis aquí? ¿Cómo me habéis encontrado después de tantos años? ¿Por qué habéis decidido aparecer ahora en mi vida?-Preguntó Hana molesta.

Hasta Bruce se sorprendió por el tono que su novia había empleado. La había visto algo enfadada, en las pocas veces que había discutido, pero desde luego, jamás la había visto tan enfadada ni a tal grado.

-¿Qué sucede, Hana? ¿Quiénes son?-Preguntó Bruce interesado.

Hana miró a su novio.

-Son mis padres biológicos-respondió simplemente.

Dicho esto los padres de acogida de Hana y Bruce se giraron sorprendidos para observar fijamente a los recién llegados.

-¿Con qué derecho os atrevéis a venir a nuestra casa a provocar que nuestra hija se altere hasta el punto de desmayarse?-Saltó el padre de acogida de Hana.

-Primero, no tenemos por qué daros explicaciones. Segundo, tenemos derecho sobre ella y todo lo que le concierne-respondió el padre biológico.

-No. Vosotros perdisteis esa oportunidad cuando la vendisteis a personas totalmente desconocidas e hicisteis de su vida un completo infierno-negó Bruce inmediatamente con tono muy serio.

-Tú debes de ser el joven Wayne, por lo que veo-habló la madre biológica de Hana-. Un placer, somos sus padres.

-No-negó Bruce-. Vosotros no sois sus padres. Solo sois las personas que le habéis dado la vida, pero fuera de eso, ella no es vuestra. Primero, porque legalmente, sus tutores legales son el señor y la señora Smith. Segundo, nunca habéis actuado por bien para ella ni en su beneficio, por lo que actuasteis en contra de unos derechos fundamentales para cualquier persona y, a causa de ello, perdisteis la potestad sobre ella-contradijo.

Estas palabras dejaron a todos sorprendidos, principalmente a los padres biológicos de Hana, quienes no esperaban esa reacción por su parte. Bruce, obviamente había deducido la razón de que esas personas aparecieran, pues él no se había presentado, pero estos sí sabían quién era él.

-Perdona. ¿Con qué derecho te crees que puedes hablarnos así? Somos sus padres por ley, Hana lleva nuestros genes y nuestra sangre corriendo por sus venas-protestó la madre biológica de Hana.

-Eso no hace ninguna diferencia. De hecho, tenemos los papeles arreglados y Hana es, legalmente, nuestra hija. La acogimos en nuestra casa y le dimos un hogar y una educación, cosa que ninguno de vosotros ha hecho. Y lo más importante, le dimos una familia y una mejor vida de la que había tenido hasta entonces-habló la señora Smith.

Mi primer amor.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora