El Guerrero de Kalailte (SuperCorp)

Capítulo 5: Nueva Identidad

Lena seguía con la adrenalina de haber visto las noticias, con el corazón caliente por la imagen de las dos heroínas con la niña. Se había olvidado por completo de la amenaza que habían recibido esa misma noche por parte de aquel hombre. 

Justo cuando se estaba aplicando su característico pintalabios rojo, oyó que llamaban a la puerta del balcón. 

"Sabes qué, voy a dejar esto sin cerrar a partir de ahora". Lena se rió mientras se apartaba para dejar entrar a Kara. Su traje se desmaterializó cuando se puso las gafas, y luego se las volvió a quitar, pulsando el pequeño botón lateral para evitar que se activara de nuevo. 

"¡¿Has visto las noticias?!" Kara se apresuró tan pronto como estuvo con su ropa normal.  

"Lo hice..."

"¡Estamos increíbles Lena! En serio, mi hermana está flipando ahora mismo con que haya otro súper corriendo por la ciudad, ¡pero esto es muy emocionante!" 

Lena se rió mientras Kara seguía charlando, pasando por su habitación y dirigiéndose a la cocina para pedir algo de comida para la pareja. Kara seguía hablando cuando Lena sacó la aplicación y pidió su parte y luego le pasó su teléfono a Kara para que hiciera lo mismo. 

"Lena, tu traje se veía impresionante, y... ¡ni siquiera sabía que podías lanzar a la gente a través de una habitación de esa manera! Y esa niña..." Kara levantó la vista del aparato y le hizo un puchero a Lena. 

"Kara, cálmate un segundo, ¿vale?". Lena le hizo un gesto para que se calmara, dando unos pasos hacia ella. 

"Lo siento, no me toca hacer pareja con la gente muy a menudo". Kara le dedicó una sonrisa de disculpa. Lena no pudo contenerse al ver esa expresión. Rodeó a Kara con sus brazos y la abrazó con fuerza. 

"Gracias". 

"¿Por qué?" Dijo Kara mientras apretaba un poco más a Lena. 

"Por darme esta oportunidad". Lena sonrió mientras se separaba. "Por darme la oportunidad de mostrar al mundo mi verdadero yo. Nunca me he sentido tan liberada en toda mi vida, salvando a esa niña..."

Lena sacudió la cabeza con un suave suspiro, apoyándose en la encimera de mármol de su cocina. 

"No he podido usar abiertamente mis poderes, nunca. Y como cualquier persona, cuando no puedes hacer algo que estás destinado a hacer, se vuelve doloroso después de un tiempo". explicó Lena, gesticulando fácilmente en el aire entre ella y Kara. "Me dolía no usar mi magia, y ahora que puedo hacerlo, siento que me he quitado un gran peso de encima y me siento libre de nuevo". 

"Oh Lena..." Kara se mordió el labio con los dientes e inclinó la cabeza de esa forma tan adorable que tiene. 

"Sólo... gracias, Kara. Por ver mi potencial, creer en mí y confiar en mí para trabajar a tu lado. Significa más para mí de lo que nunca entenderás". 

"Por supuesto que confío en ti; sé que no nos conocemos desde hace mucho tiempo, pero eres una buena persona. Y vamos a trabajar juntas. Vamos a ser el dúo más poderoso que haya visto este mundo". Kara sonrió. 

"Por eso quería hablar hoy y almorzar aquí. Creo que necesito conocer algunas de tus debilidades, y obviamente tú necesitas conocer las mías". comenzó Lena. 

"Bien, sentémonos a hablar mientras esperamos a que llegue la comida. Te contaré todo lo que quieras saber". 
    
    
**

Kara, por lo que sabía, sólo se debilitaba con la kriptonita. Le contó a Lena los tipos que había y lo que le hacían y sus experiencias cuando había estado expuesta. Las debilidades de Lena eran escasas, por suerte. No era invencible a menos que conjurara un hechizo que la hiciera así, y requería mucha energía para realizarlo. Aunque Lena tenía una resistencia más que saludable para lanzar hechizos, incluso ella tenía su límite. Su otra gran debilidad era el miedo.