XI

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Que pacífica se volvió la vida de Dazai y Chuuya cuando se deshicieron de sus pequeños problemas.

- Me siento mal por ellos - Comentó Chuuya mientras dejaba de besar el cuello de su novio.

Dazai gruñó disgustado al ya no sentir los labios de su amado en su cuello - ¿de quién hablas, Chibi? -

Chuuya rodó los ojos - Quizás mis besos te absorbieron las únicas neuronas que tenías. Habló de los dos viajeritos en el tiempo. -

Dazai chasqueo la lengua al recordar a ése par de molestias, o como el les decía, "espermatozoides poco desarrollados" - Mini chibi debe estar bien, pero dudo de qué el suicida se encuentre bien con Akutagawa. -

Chuuya extendió una de sus manos hasta la mesita de noche, y trato de agarrar su celular, pero unas manos inquietas empezaron a viajar por todo su cuerpo - Dazai, acabamos de hacerlo. ¡Tranquiliza tus hormonas! - Dazai, aunque estaba disgustado con la idea de que ya no podía volver a profanar ese delicado cuerpo, quitó sus manos suavemente y dejó un casto beso en las mejillas de Chuuya.

- Esta bien. Veo que estás preocupado por los niños, ¿quieres ir a ver como están? -

Chuuya no esperaba un "¿quieres ir a ver como están?", en realidad estába esperando un "Vamos a traerlos"

Después de todo, se había encariñado con esos niños revoltosos. Le producían una cálida sensación en el pecho. Quería protegerlos. Si en el pasado nadie lo hizo, nunca era tarde para hacerlo. - Quizás... deberíamos traerlos de nuevo. Son nuestra responsabilidad, Dazai -

Dazai estába fastidiado con la idea. Odiaba a ese niño. Si a ese niño. (porque al pequeño chibi lo amaba mucho) Y la simple idea de traerlo de nuevo era tan molesta como un grano en el trasero. Y es muy obvio que su plan de solo traer a mini chibi no hiba a funcionar, pues seguramente Chuuya lo regañaría por abandonar a Osamu hasta el punto en el que le empiecen a sangrar los siete orificios del rostro. - Chuuya - Pronuncia con la voz más seria que podía.

Esa voz que a Chuuya le encanta aunque lo niegue hasta la muerte.

- ¿Y si sólo traemos a mini chibi? Podemos dejar a el suicida con mi fiel asistonto. [1] Estoy seguro que Akutagawa lo podrá cuidar. -

[...]

El plan no había resultado tan bien como lo esperaba. En realidad terminó con un Chuuya insultando y ahorcando a Dazai (aunque lo último lo excitó) mientras le insultaba en un perfecto Francés.

Si, en Francés.

Una pequeña costumbre de Chuuya molesto.

Dazai lamentaba haber estudiado francés. (obligado por mori) Pues había sido insultado y él lo había entendido todo. Chuuya aún no acababa, y Dazai juraba que sus oídos por un momento dejaron de escuchar insultos y pasarían a susurros llenos de amor. O quizás solo fue su cerebro qué gracias de la falta de oxígeno había empezado a fallar más de lo normal.

- Dazai, deja de usar ese cerebro de mierda. Cada que lo usas las cosas terminan de la puta mierda. -

¿Chuuya, aún seguía molesto o se le desconfiguró el idioma de tanta rabia?

Pero Dazai no negaría que la voz de su amante era jodidamente sexi.

<<Estás en el carro Dazai. ¡No puedes follartelo ahora! PIENSA EN COSAS ASQUEROSAS. basura, Akutagawa, basura, Akutagawa. No, esto no está funcionando. Aún sigo excitado por la voz francesa de Chuuya>>

𝖕𝖗𝖔𝖇𝖑𝖊𝖒𝖘 𝖎𝖓 𝖙𝖍𝖊 𝖋𝖚𝖙𝖚𝖗𝖊Donde viven las historias. Descúbrelo ahora