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La castaña caminaba a paso lento mirando cada libro de la estantería, su padre les había dado el día libre y ella no lo desaprovecharía estaba en la biblioteca de la gran mansión mirando cada libro más ninguno fue de su agrado su padre el cual los recompensaba si sobre salías en misiones o entrenamientos y Susan era muy aplicada ala hora de un entrenamiento o en clases así consiguiendo su saga de libros favoritos Harry Potter, sin más que pensar o hacer tomo el libro de una pequeña mesa el cual era Harry Potter y el cáliz de fuego Susan se sabia los libros y líneas de cada personaje más amaba el leerlos una y otra vez decía que quizás solo quizás si los leía mil veces los finales trágicos para aquellos personajes serían cambiados por obra de magia

—Ben sabes que él observarla desde aquí es acosarla—pregunto Klaus en un susurro no tan silencioso, Ben enseguida lo mando callar pero pudo volver a respirar bien al ver que Susan no los escuchó

—Que haces aquí—pregunto el asiático aún sin quitar la mirada de número ocho

—Te estaba buscando—respondió el ojiverde

Susan bufo con diversión al escuchar a sus hermanos hablar entre según ellos susurros cuando estaba apunto de hablar en voz alta un destello de luz azul apareció número cinco estaba frente a ella y se miraba frustrado

—Ocho, podrías revisarlas—dijo número cinco, tendiéndole un cuaderno lleno de números y cosas indescifrables para algunos pero Susan no era parte de ellos al tener se podría decir un poco conocimiento de viajes en el tiempo decidió ayudar a su hermano el cual sólo esperaba que este dejara su ego para no existirsé de más de su potencial Susan sabía que cada uno de sus hermanos eran poderosos solo que su poder no evolucionaba por su ignorancia

—Está casi correcta numero cinco pero el 09.04 es 0.04—número cinco miró sus apuntes con el ceño fruncido al entender su error

—No te sobre exijas eres verdaderamente brillante pero como toda persona comete errores—

—Todavía no entiendo por qué padre no me deja viajar en el tiempo—gruño cinco, Susan lo miró con una ceja levantada

—No tengo miedo

—Ese es el problema no te haz tomado el tiempo de sentarte y pensar cuantas cosas podrían pasar estas sobre exigiéndote si siguieses así podrías tener un colapso y quedarte varado en cualquier época sin tener las ecuaciones correctas y sin saber que daños podría tener en tu cuerpo o mente, número cinco tienes todo el tiempo del mundo eres la persona que podría controlar el tiempo si se lo propusiera

Cinco se sentó al lado de la castaña mirándola confundido

—Como estás tan segura que puede ocurrir

—No estoy segura son cosas impredecibles trata de obedecer a padre y práctica tus saltos espaciales a cortas distancias no más no menos—sin decirle más Susan  se levantó del sillón tomando su libro para caminar a la salida

Número cinco tan necio que era se teletransporto frente a su hermana la cual ni se inmuta al verlo como la apunta con el dedo de manera amenazante

—¡Estas del lado del viejo!—Susan se encoge de hombros rodeando a su hermano

—No estás listo cinco eres demasiado inmaduro para dar ese gran paso como viajar en el tiempo

Cinco furioso decidió seguir a su hermana

—Sígueme número cinco—dijo ocho sería, tomando por sorpresa a su hermano

Este sin decir nada la siguió Susan llegó hasta su habitación abriendo la puerta dejando pasar a cinco mientras ella buscaba algo en su cajón dándole la espalda al chico el cual tomó su katana mirándola con detenimiento

—Hace tiempo cuando me mencionaste el querer viajar en el tiempo busque y aprendí toda la información que pude haciendo notas y ecuaciones de emergencia no está totalmente terminado la ecuación para que puedas viajar esta completa sin ningún error me todo semanas hacerla pero finalmente lo logré

Cinco quedó plasmado al escuchar a ocho decir eso creía que su hermana simplemente no lo apoyaba en el hecho de querer viajar en el tiempo se quedó en silencio tratando de que en su rostro no se formara una sonrisa dejando la katana en la cama de Susan se acerca a pasos lentos ella extendió la libreta que parecía uno de esos diarios que su padre este era color azul cielo con S.H grabado en letras doradas

—Gracias ocho—murmuro cinco

Susan sabiendo que su hermano no era muy expresivo solo le sonrió caminando asía su cama

—Cinco el hecho de que no me gustaría que viajaras no significa que no te apoye—como si leyese sus pensamientos

—Solo prométeme que regresarás con vida no importa cuantos años dures en el futuro o pasado solo regresa a casa, yo te estaré esperando

—Lo prometo Ocho—la castaña solo lo abrazo con fuerza

Sin saber que era la última vez.

Sacrificio -Ben Hargreeves-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora