𝐌𝐘 𝐃𝐄𝐌𝐎𝐍𝐒, JAYRAE ✔

05. NO SOY ELLA

(🚬)

Sintió los suaves labios de Jason sobre los suyos y aunque estaba en shock por aquello, logró alzar sus manos hasta el pecho del castaño y darle un suave empujón. A pesar de haber sentido solamente tres segundos los labios de Jason junto a los suyos, pudo verlo.

Pudo ver el corto y borroso recuerdo que había aparecido en la mente de Jason.

Y aunque no había pedido que Jason la besara, algo en su interior se rompió al saber que el castaño nunca la besaría en sus cinco sentidos, solo la besaría pensando que era otra persona.

—J-Jason... &un suspiro tembloroso salió de sus labios y se reprendió a sí misma— Jason yo no soy... —lo empujó con más fuerza, deteniendolo completamente.

Ambos se miraron a los ojos, los de Jason estaban dilatados y tenían un brillo especial en ellos. Como si viera a el amor de su... No, eso no podía ser. No podia ser.

—¿Que pasa? —preguntó Jason, frunciendo el ceño con confusión.

—Yo no soy la que tu piensas, Jason. —cerró los ojos, alejándose un poco del castaño— Yo no soy tu novia.

—¿Que? Claro que lo eres, yo lo recordé. —Jason intento tomar la mano de Rachel pero la chica se alejó, abrazándose a si misma. Pudo percibir que tenía algo.

Estaba avergonzada.

—¿Que recordaste precisamente?

Jason frunció más el ceño, tratando de hacer memoria—. Era a una chica, estábamos en algo así como un cita. Yo le decía que la quería y después nos besamos. —miró de reojo a Rachel, que se sentó en el sofá con la vista en su regaso— Y-Yo en verdad pensé que eras tú, Rachel... Yo...

—Olvidalo... Solo olvidalo.

Tantos problemas por solo roce de labios. Eres mas tonta de lo que creí, Rachel. habló Trigon con burla, haciendo que la chica apretara el filo de su camisa con molestia.

—Rachel... —a tropezones Jason se sentó a su lado, haciendo que al fin ella lo mirará— Lo siento si te incomode, no quise...

—Te dije que lo olvidarás, no tiene importancia. —zanjó—. Será... Será mejor que me vaya a mi habitación.

El castaño se sintió culpable del estado en el que estaba Rachel al verla irse a su habitación sin dirigirle la mirada en ningún momento. Estaba borracho, pero no estaba del todo idiota, ni tan alcoholizado para no saber que la había cagado en grande.

En su defensa, en verdad había pensando que ella era su novia. Qué era esa chica que había besado en su corto y borroso recuerdo. Rachel era fabulosa, una chica excepcional y sobre todo hermosa, no supo de donde vino ese pensamiento pero estaba seguro que le hubiera gustado mucho que ella hubiera sido esa chica de su recuerdo.

Le hubiera encantado que ella si fuera en verdad su novia.

Esa noche se durmió pensando seriamente en las cosas que había recordado en esas semanas.

Los días fueron pasando como siempre, nadie en el departamento quería hablar sobre "El beso" aunque ambos lo tenían muy presente, sabían que en algún momento tendrían que hablar de ello pero era demasiado cobardes para revelar lo que en verdad había despertado en su interior. Tres días después tuvo la valentía de preguntarle a Rachel si sabía quien era su novia pero lo único que obtuvo de ella fue una pequeña sonrisa con un:

—Poco a poco lo recordadas, Jason. No quiero que por algo que te diga, tu mente se llene de recuerdos derrepente... Podría ser peligroso.

Él lo entendió, Rachel no quería que su mente se sobrecargada de imágenes que podrían hacerle daño... Estaba cuidando como siempre desde que lo había encontrado.